LUNES Ť 8 Ť OCTUBRE Ť 2001

Ť Analistas

La ofensiva militar podría aliviar la economía de EU

REUTERS

Washington, 7 de octubre. El lanzamiento de una ofensiva militar de Estados Unidos y Gran Bretaña contra Afganistán podría dar alivio a la economía estadunidense, agobiada por las preocupaciones sobre el futuro, coincidieron varios analistas. No obstante, advirtieron que el impacto en el resto del mundo es más difícil de evaluar.

Desde los ataques del 11 de septiembre, en los que aviones secuestrados se estrellaron y destruyeron al World Trade Center de Nueva York, y a parte del Pentágono, En Washington, una nube de incertidumbre se ha mantenido flotando sobre la economía mundial.

Parte del pesimismo proviene de temores sobre posibles nuevas agresiones contra Estados Unidos, pero otra parte se originó en una simple aprensión sobre lo que podría producirse en Asia Central, mientras Estados Unidos comenzaba a acumular fuerzas para la ofensiva que se materializó el domingo.

Los ataques podrían ayudar a recuperar la confianza, asumiendo que lograrán un éxito claro y visible.

Las enseñanzas de la Guerra del Golfo

La Guerra del Golfo de los años 90 puede ser un cierto precedente, con un periodo de incertidumbre que comenzó después de que Irak invadiera a Kuwait en agosto de 1990, y que desapareció rápidamente cuando la coalición encabezada por Estados Unidos atacó a Irak en enero de 1991.

''Aprendimos de la Guerra del Golfo que lo que realmente lastima a la economía y al mercado de valores es no saber qué va a suceder'', señaló el economista Sung Won Sohn, de Wells Fargo Bank en Mineapolis.

Pero cualquier alivio podría durar poco si la situación termina siendo más complicada que en la Guerra del Golfo.

''El desarrollo (de la situación) en los próximos días será clave. Si da la impresión de que las cosas no se van arreglar rápidamente, entonces se obtendrá una serie de escenarios", pronosticó Anthony Karydakis, economista de Banc One Capital Markets en Chicago.

Un insurrección popular entre los fundamentalistas islámicos en Pakistán o una serie de ataques dinamiteros alrededor del mundo serían muy desestabilizadores para los mercados y las economías.

Incluso si los ataques sirven como válvula de escape para Estados Unidos, también podrían acentuar las presiones en el exterior y frenar las perspectivas de una recuperación económica.

Gran Bretaña se unió a Estados Unidos en los ataques del domingo, pero algunos aliados europeos, en muchos de los cuales coexisten grandes comunidades árabes, podrían enfrentar las preocupaciones de un incremento de las tensiones sociales.

Por otro lado, un prolongado conflicto podría conducir a interrupciones en el comercio debido a alteraciones en el transporte aéreo y marítimo.

Los analistas destacan que para los países emergentes, recientemente sacudidos por la crisis argentina, las repercusiones serían mayores, pues los inversionistas buscarán mayores seguridades en las economías desarrolladas. Para esta semana pronosticaron más turbulencia en los mercados bursátiles latinoamericanos debido a los ataques estadunidenses contra Afganistán.