Ť Carlos Fernández-Vega
PARA EL IPAB Y sus funcionarios concluye la primera semana de lucha libre en lodo, y todo indica que el revolcón va para largo.
HASTA DONDE SE PUEDE apreciar, las llaves -especialmente quebradoras-, golpes, mordidas, pellizcos y piquetes de ojo aplicados por el procurador fiscal de la Federación en contra del IPAB y sus guajiros han tenido un efecto contundente, a grado tal que su orondo titular, Gabriel Reyes Orona, presume que Julio César Méndez Rubio, secretario ejecutivo del instituto, será presentado por la PGR y que el mismísimo chiquillo mayor podría sustituir a los siete vocales del organismo público siempre, desde luego, con la opinión favorable de las dos terceras partes de los miembros del Senado de la República.
EN LA PRIMERA CAIDA, dos funcionarios públicos -Eugenio González Sierra, del IPAB, y León Alberto Schietekat, del Bancomext-, mordieron el polvo y fueron arraigados en el que fuera uno de los domicilios del fracasado cirujano plástico Amado Carrillo Fuentes, el honorable Señor de los Cielos, inmueble que ahora sirve como casa de seguridad de la PGR. En la segunda caída, que presumiblemente arranca el próximo lunes, lo más seguro es que Méndez Rubio se dedique a jugar baraja con los ex servidores públicos ya mencionados, toda vez que Reyes Orona asegura que los ilícitos detectados ''no fueron una operación aislada''.
ESTE TIPO DE EVENTOS (las "puerquezas", como en sus tiempos diría el general y filósofo Arturo Durazo Moreno, gurú de La Güera Rodríguez Alcaine) nos recuerda la mexicanísima tradición de que al inicio de una nueva administración pública -y la del cambio no tendría por qué ser diferente- se desata la pasión por la lucha libre en lodo. La encabezada por el chiquillo mayor ya se había tardado -aunque esa parece ser la constante de su gobierno-, pero ya le tocaba.
IRREMEDIABLEMENTE, TAMBIÉN, provocan una profunda nostalgia. Y como el autor de México S. A. amaneció en esa tesitura, valgan los siguientes pasajes -todos ellos registrados en mayo de 1999 y aportados, generosos que son, por distintos colegas de La Jornada- para ubicar el origen de los acontecimientos en el IPAB:
''EL COORDINADOR DE LOS diputados panistas, Carlos Medina Plascencia, admitió ayer que se entrevistaron con el presidente Zedillo antes de que el dirigente nacional del blanquiazul, Luis Felipe Bravo Mena, instruyera a los senadores de su partido para que aprobaran junto con el PRI el nombramiento de los cuatro vocales del IPAB. '¿Con quién más se pueden hacer los acuerdos en este país?', preguntó el ex gobernador de Guanajuato, luego de señalar que en esa reunión se pactó llevar a un periodo extraordinario de sesiones la discusión de siete temas de la agenda política, entre ellos los cambios al Cofipe. Por separado, senadores del PAN deploraron la actitud asumida por el PRI, luego del acuerdo en torno al IPAB. 'El gobierno nos viene a pedir favores, pero luego los priístas se niegan a cumplir los acuerdos', comentó Emilio Goicoechea, y dijo que su partido 'cambió la cabeza de Guillermo Ortiz' por un acuerdo político que beneficia a la sociedad en general. Goicoechea sostuvo que el propio presidente Zedillo pidió a su partido, Acción Nacional, aprobar el dictamen en torno a la junta directiva del IPAB, por el bien del país''. (Ciro Pérez Silva, Andrea Becerril y Luis A. Boffil)
''LA ALIANZA PRI-PAN funcionó nuevamente para aprobar, en el marco de la recién instalada Comisión Permanente, ya que en el Senado no hubo quórum, el nombramiento de los cuatro vocales integrantes de la junta directiva del IPAB. El acuerdo entre priístas y panistas, por el que se ratificó prácticamente la lista original de consejeros del IPAB presentada por el presidente Zedillo al iniciarse la discusión hace tres meses, incluyó llamar a un periodo extraordinario de sesiones, con una agenda de temas de particular interés para el PAN, en la cual se incluyen, además, las 'reformas en materia electoral'. Ahí, el PRI y el PAN lograron la mayoría requerida -las dos terceras partes de sus integrantes-, según la ley que creó el instituto y se impusieron. Así, se aprobó el dictamen al que se dio el tratamiento de 'urgente y obvia resolución'. El coordinador de los senadores del PAN, Gabriel Jiménez Remus, quien un día antes aseguró que no aprobarían una lista remitida a último momento por el Ejecutivo, respondió que la decisión responde a la necesidad 'de dar confianza a los inversionistas extranjeros y al mundo financiero de que es posible alcanzar consensos en el Congreso mexicano. Fuimos congruentes', dijo, e hizo notar que en ningún momento se puso a discusión la renuncia de Guillermo Ortiz. Poco antes de las 10 de la noche, Jiménez Remus entró al salón de sesiones del Senado para anunciar el consentimiento de su fracción y la del PRI para aprobar a los consejeros del IPAB. También se dieron a conocer los nombres de los vocales del IPAB: Alejandro Creel, Adalberto Palma, Carlos Isoard y Humberto Murrieta. Todos, a excepción del último, son los mismos incluidos en la primera lista enviada por el Presidente de la República. La Comisión Permanente los aprobó, con 31 votos a favor (PAN-PRI) y seis en contra''. (Andrea Becerril)
'ACCION NACIONAL VOLVIO a ceder a la tentación de negociar con el gobierno y, sin tener la reforma electoral amarrada ni haber conseguido la destitución de Guillermo Ortiz y Eduardo Fernández -durante tres meses anduvieron pregonándolo-, su dirigencia aceptó aprobar con el PRI el nombramiento de los cuatro vocales del IPAB. Y es que en la negociación para la aprobación de los vocales los diputados del PAN quedaron al margen de una negociación que, en el Senado de la República y en la Secretaría de Gobernación, encabezaron Diego Fernández de Cevallos y el dirigente panista Luis Felipe Bravo Mena, quien se tuvo que trasladar a San Lázaro para explicar a los diputados el nuevo arreglo que habían tenido con el gobierno. Explicación que, sin embargo, se tradujo al final en una orden, como se quejaron algunos panistas: 'Bravo Mena llegó y nos indicó que, asumiendo plenamente su responsabilidad como dirigente, había dado la orden de que los senadores votaran con el PRI los nombramientos'. Los diputados también acataron lo ordenado. 'No puede ser, no puede ser', respondían los del PAN. 'No es lógico, no lo entendemos', decían mientras buscaban entre sus compañeros a los más enterados para aclarar las cosas. Medina Plascencia salió del salón de plenos seguido por sus diputados, quienes reclamaban, indignados, una respuesta sobre el 'nuevo arreglo con el gobierno'. Se encaminaron al Salón Fundadores, donde ya los esperaba el presidente panista, Luis Felipe Bravo Mena, quien les explicó que, 'asumiendo plenamente' su responsabilidad como dirigente, dio la orden de que los senadores votaran con el PRI los nombramientos. En entrevista dijo que la opinión de los diputados no es la única que cuenta en el partido y, por el contrario, senadores, consejeros nacionales, gobernadores e integrantes del CEN estaban por darle una pronta salida al IPAB''. (Ciro Pérez Silva y Juan Manuel Venegas)
Las rebanadas del pastel:
¿Y EL JEFE DIEGO? En
mayo de 1999 presumía la paternidad blanquiazul del IPAB:
''es una institución que mi partido sugirió, promovió
y llevó al Congreso, lo que se votó aprobatoriamente... La
decisión fue la mejor para el país''.