MIERCOLES Ť 17 Ť OCTUBRE Ť 2001

Ť Tan sólo en el ataque "intensivo" del lunes participaron 100 aeronaves

Más de 2 mil bombas y misiles han caído en Afganistán

Ť Washington enviará más ayuda alimentaria; busca calmar el sentimiento antiestadunidense

AFP, DPA Y REUTERS

Washington, 16 de octubre. Más de 2 mil bombas y misiles han sido lanzados sobre Afganistán desde el comienzo de los ataques, y más de un centenar de aviones participaron en las incursiones aéreas del lunes, jornada en la cual bombas teledirigidas de 500 kilos alcanzaron "por error" almacenes de la Cruz Roja en Kabul, según admitió el Pentágono.

Pero si Estados Unidos ha prácticamente inutilizado a las fuerzas armadas talibán, parece tener dificultades para ganar otra batalla, la de "los corazones". "Hay mucha desinformación, muchos malentendidos" en cuanto a Washington y su lucha, explicó el portavoz adjunto del Departamento de Estado, Philip Reeker.

Un ejemplo de la mala comunicación de Washingtron con los musulmanes y los árabes parecieran ser los comentarios de la consejera de seguridad nacional para el presidente George W. Bush.

En una entrevista que dio el lunes a la cadena árabe Al Jazeera, Condoleezza Rice aseguró que los musulmanes no son blanco de la campaña contra el terrorismo, pero también exigió que los palestinos cesen los ataques contra afghanistan_attacks_kbtIsrael, y expresó la preocupación de Washington en torno a Saddam Hussein. Justamente fueron estos últimos comentarios los difundidos para promover la entrevista.

En el marco de esta batalla de corazones, funcionarios estadunidenses dijeron que invertirán 38.5 millones de dólares en ayuda alimentaria para Afganistán, mientras el presidente George W. Bush dijo en una visita a la Cruz Roja que la Casa Blanca recibió en cinco días 90 mil cartas de niños estadunidenses con un dólar cada una para los niños afganos. "Una forma de combatir el mal es demostrando amabilidad, amor y compasión", sostuvo el mandatario al invitar a esa campaña.

En cuanto a las batallas militares, entre tanto, el teniente general Gregory Newbold, director de operaciones del Estado Mayor Conjunto, informó en Washington que las fuerzas del talibán están casi inutilizadas tras diez días de bombardeos, y que las tropas de la opositora Alianza del Norte están a punto de hacerse con el control de la ciudad clave de Mazar-e-Sharif, un cruce de caminos estratégico en el norte del país, cercana a Uzbekistán, ex república soviética con la cual Washington logró un pacto militar.

Las declaraciones de Newbold se dan un día después de que las fuerzas estadunidenses, con la colaboración de Gran Bretaña, intensificaran los bombardeos contra blancos de los talibán y de la red Al Qaeda del fundamentalista Osama Bin Laden.

En este sentido, el militar apuntó que se han lanzado más de 2 mil bombas y misiles, pero aseguró que sólo un bajo número de proyectiles erró el blanco.

Justamente uno de los proyectiles que erraron el blanco fue a parar a almacenes de la Cruz Roja en Kabul, reconoció luego un comunicado del Pentágono. Las bombas fueron dirigidas a ese depósito puesto que se creía que allí se almacenaba equipo militar.

Este es el segundo error admitido oficialmente por el Departamento de Defensa, tras reconocer que el 12 de octubre una bomba teledirigida o inteligente alcanzó un blanco civil cerca de Kabul y mató a cuatro personas.

Newbold, por otro lado, tambien señaló que más de 100 aviones, entre ellos 60 bombarderos -incluidos algunos AC-130-, fueron utilizados en la jornada "intensiva" de ataques del lunes.

Agregó que el número y la gama de aparatos empleados refleja "la agilidad" en las operaciones aéreas, ahora que las fuerzas estadunidenses han logrado controlar el espacio aéreo. La campaña apunta ahora más a "blancos emergentes" que prestablecidos, precisó.

Ayer, además, por primera vez entraron en acción los cuatro portaviones ubicados en el mar Arábigo, informó Newbold, que sin embargo se mostró reacio a dar informción sobre el papel del USS Kitty Hawk, enviado a la zona sin su contingente habitual de aviones, para poder ser utilizado como base para el despliegue de helicópteros con comandos de fuerzas especiales.