MIERCOLES Ť 17 Ť OCTUBRE Ť 2001
Ť Reforzar el combate al terrorismo, prioridad del acuerdo suscrito con Vicente Fox
Expresa Aznar su apoyo al Plan Puebla-Panamá
Ť También acordaron impulsar la consolidar los procesos de integración de países iberoamericanos
JUAN MANUEL VENEGAS ENVIADO
Madrid, 16 de octubre. Al final de la visita de Estado del presidente Vicente Fox Quesada a España, se impuso la prioridad del gobierno español: se reforzarán los mecanismos de cooperación bilateral para la persecución, ubicación, detención y extradición de personas vinculadas a ETA; a cambio, México se lleva la promesa de que desde la presidencia de la Unión Europea, a partir del 2002, España promoverá el desarrollo del Plan Puebla-Panamá e impulsará la concreción de los resultados que se obtengan de la Conferencia de Naciones Unidas para la Financiación del Desarrollo, que tendrá lugar en nuestro país en marzo del año próximo.
Fox Quesada concluyó este martes su visita oficial a este país -cuarta escala de su gira por Europa- y, como ocurrió en los días anteriores, el combate al terrorismo, concretamente de la organización vasca ETA, marcó la pauta, esta vez en la declaración conjunta que dieron a conocer ambos gobiernos.
Dado a conocer en el Palacio de la Moncloa por el presidente del gobierno español, José María Aznar, y el propio mandatario mexicano, el texto del "Documento Estratégico de las Relaciones España-México", establece como primer punto el acuerdo suscrito para combatir el terrorismo, que "constituye una de las principales amenazas para la convivencia en libertad y para la democracia".
Advierte que "los infames atentados" del 11 de septiembre en Estados Unidos han dejado de manifiesto que ningún país está libre de la amenaza, por lo que "México y España se comprometen a intensificar su cooperación en la lucha contra el terrorismo, y aunar esfuerzos bilateral y multilateralmente para combatir esta lacra".
Coordinación legislativa y judicial
Esta colaboración, precisa el documento, abarcará los ámbitos de seguridad, cooperación legislativa y judicial, así como la colaboración entre los servicios de inteligencia e información, a fin de que los dos gobiernos cuenten con "una mejor coordinación policial, armonización legislativa y convencional y un intercambio más fluido" de comunicación sobre las actividades de las bandas terroristas.
Para tal objetivo, cada país designará un coordinador de alto nivel, que trabajará conjuntamente en el fortalecimiento de la cooperación mutua.
En conferencia de prensa, Fox Quesada reforzó sobre este punto: hoy estamos obligados a sumarnos al esfuerzo de todas las naciones para lograr erradicar "esta lacra, y en el caso concreto de España, en el caso particular de la ETA y los etarras, ratificamos nuestra voluntad plena de proceder a extraditar cuanto antes a todo terrorista que pretenda utilizar el territorio mexicano, que pretenda buscar refugio y escondite en nuestro país".
Insistió en que México no se convertirá en "santuario de etarras", por lo que trabajará coordinadamente con España también "en todo lo que tenga que ver con dineros y financiamiento para estos grupos terroristas o grupos criminales. šVamos a cerrar el cerco en esta materia!".
En la misma rueda de prensa celebrada en La Moncloa, Aznar destacó por su parte que el compromiso que contrajeron México y España "es un compromiso absolutamente cerrado para combatir el terrorismo, e incluirá especialmente colaboración entre los servicios de inteligencia e información y coordinación policial".
Como Fox, el jefe del gobierno español puso énfasis en la importancia de incluir en el acuerdo "la armonización legislativa convencional" y la detección de los "sistemas de financiación de los grupos terroristas".
En otro orden relacionado con cuestiones económicas y de desarrollo comercial, el acuerdo México-España establece que sólo con la consolidación de los procesos de integración de los países iberoamericanos se podrá asegurar "el desarrollo
democrático y económico de los países miembros de la comunidad y la mejora de las relaciones políticas y económicas a través de mecanismos de cooperación institucionalizada, que contribuyan además al incremento de los intercambios comerciales y al crecimiento económico en beneficio de la población".
Con ese planteamiento propugnan el reforzamiento del sistema de cumbres iberoamericanas, para convertirlo en el marco que permita sentar las bases del diálogo en asuntos de interés común; actuar conjuntamente ante las cuestiones que puedan afectar los intereses de la región, y "prestar atención al mantenimiento y profundización de los sistemas políticos democráticos".
Al respecto, los gobiernos de España y México se comprometieron a apoyar los esfuerzos de los países e instituciones centroamericanos en su "progresiva integración económica y política, y en particular en el fortalecimiento del Sistema de Integración Centroamericana".
En este caso concreto, el gobierno del presidente Aznar expresó su "respaldo al desarrollo del Plan Puebla-Panamá, cuyo objetivo es dotar de infraestructuras comunes a la región mesoamericana, favoreciendo el desarrollo económico, social, cultural y ecológico de la zona, así como para que reciba el impulso de la Unión Europea durante la presidencia española", en el bienio 2002-2003.
Financiamiento para el desarrollo
Otro de los temas a destacar del "acuerdo estratégico" para la cooperación entre México y España, se refiere a los sistemas internacionales para el financiamiento al desarrollo, sobre todo de los países con economías emergentes.
En tal sentido, Fox y Aznar suscribieron el compromiso de llevar a cabo consultas para integrar una "agenda de concertación Europa-Iberoamérica y el Caribe que incluya, entre otros temas, reformas a la Organización de las Naciones Unidas y del sistema financiero internacional, negociaciones comerciales multilaterales, promoción del financiamiento para el desarrollo, protección del medio ambiente y lucha contra el crimen organizado transnacional y el tráfico de drogas y delitos conexos".
Esa será la base para fortalecer la inversión y los intercambios comerciales entre las naciones. Y para consolidar esta oportunidad, los gobiernos español y mexicano recomendarán y alentarán entre los países latinoamericanos, entre otras medidas, "crear un marco legal que inspire confianza no sólo a la inversión y al empresario nacional, sino también a los inversores internacionales".
La estancia de cuatro días de Fox en Madrid concluyó la tarde de este martes con sendos encuentros privados con el secretario general del gobernante Partido Popular (PP), Javier Arenas, y su homólogo del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), José Luis Rodríguez Zapatero. Ya entrada la noche, sostuvo un último encuentro -también privado- con el rey Juan Carlos y su esposa, la reina Sofía.