JUEVES Ť 18 Ť OCTUBRE Ť 2001
Ť Aplaude el presidente George W. Bush la medida de Moscú
Anuncia Putin el desmantelamiento de un centro de espionaje electrónico ruso en Cuba
Ť Confirma el Kremlin que también dejará su base militar en bahía Cam Ranh, Vietnam
Ť "Rechazo total" de La Habana, que perdería con la medida importante fuente de ingreso
AFP Y REUTERS
Moscu, 17 de octubre. El presidente ruso, Vladimir Putin, anunció hoy que Rusia desmantelará "este año" su centro de espionaje electrónico en Cuba, lo que implica la clausura de la mayor instalación secreta que Moscú posee actualmente en el extranjero.
La medida fue aplaudida por su homólogo estadunidense George Bush, que la consideró como "otra indicación de que la guerra fría terminó. El presidente Putin entiende que Rusia y Estados Unidos ya no son adversarios, y que no evaluamos nuestros éxitos en función de cuanto complica la vida a otro país".
Sin embargo, Washington venía presionando para este cierre, y en julio del año pasado la Cámara de Representantes del Congreso estadunidense aprobó un proyecto de ley que prohíbe cualquier medida de alivio financiero para la deuda externa rusa hasta que la Casa Blanca certifique que Moscú cerró su base.
El mandatario ruso, que confirmó también la decisión de su gobierno de abandonar su base militar en la bahía Cam Ranh, en Vietnam, aludió a razones financieras para la decisión de desmantelar el centro de Cuba, por el cual paga 200 millones de dólares anuales por arrendamiento, sin contar el mantenimiento de personal.
"Por esa suma podemos comprar y poner en el espacio 20 satélites espías y adquirir hasta cien estaciones de radares", afirmó por su parte el jefe del estado mayor ruso, general Anatoly Kvashnin.
En La Habana no hubo en la mañana una reacción oficial al sorpresivo e inesperado anuncio, que se da 10 meses después que Putin confirmara la continuidad operativa de la estación de radioescucha durante una visita oficial que efectuó a la isla caribeña, pero por la noche La Habana expresó su "total desacuerdo" con la medida.
Según un comunicado oficial, las negociaciones entre ambos países sobre el destino de la base de radioescucha en Lourdes "aún no han concluido".
"El acuerdo sobre el centro radioeléctrico no está cancelado ya que Cuba no ha dado su aprobación y resultará necesario que Ru-sia continúe negociando con el gobierno cubano", dijo La Habana en un comunicado leído en la televisora estatal.
El gobierno de Fidel Castro agregó que "desgraciadamente tal vez el presidente Putin, debido al cambio de horario, no tuvo oportunidad de recibir a tiempo nuestros bien fundados argumentos y sugerencias sobre el asunto, antes de que pudiera afirmar lo que dijo públicamente".
Cuba espera, añadió el documento gubernamental, que "este diferendo se resuelva de forma razonable, justa y digna. Algo debe ser comprendido por todos, sin ningún tipo de ilusiones: en Cuba no hay ni habrá pánico ni temor".
"No es una buena noticia"
Por su parte, fuentes diplomáticas consultadas por Afp sostuvieron que la decisión rusa "no es una buena noticia para el país" antillano, en momentos en que atraviesa por una agudización de su crisis económica debido a la caída del turismo tras los atentados del 11 de septiembre en Nueva York y Washington y los bajos precios internacionales del níquel y el azúcar, sus principales exportaciones.
Además, el cierre del centro de espionaje electrónico debilitará a los servicios de inteligencia de la isla.
Instalada en las inmediaciones de la localidad de Lourdes, la base rusa, con una extensión de 72 kilómetros cuadrados, fue descrita por Putin como un "centro informativo que da servicios a los intereses de la rama militar de Rusia y en parte dirige la información que recibe y que procesa a los órganos competentes en Cuba".
La estación, 20 kilómetros al sur de La Habana, fue construida en los tiempos de estrecha alianza política, económica y militar entre Cuba y la ex Unión Soviética.
La Habana ha mantenido discreción sobre la existencia de la base, y recién en 1993 el ministro de las Fuerzas Armadas y segundo hombre de la jerarquía cubana, Raúl Castro, comentó públicamente sobre su existencia al afirmar que desde allí el gobierno de Moscú obtenía 75 por ciento de sus informaciones estratégicas.
"Para Cuba no plantearía ningún problema de conciencia si mantuviéramos (...) un centro de exploración radioelectrónico de un país que no consideramos enemigo (...) cuando tenemos una base militar estadunidense ocupando ilegalmente y por la fuerza un pedazo de nuestro territorio" en Guantánamo, dijo Raúl Castro entonces.
Putin aseguró que el cierre de Lourdes no afectará las relaciones con el gobierno de Castro, y que Moscú mantenía su condena al bloqueo económico que sufre La Habana desde hace más de cuatro décadas. Sin embargo, en los hechos es una nueva señal de acercamiento a Estados Unidos, país con el cual las relaciones pasan por su mejor momento desde que el presidente ruso ofreció su apoyo a la "coalición internacional antiterrorismo" de Bush.
Sobre el tema de Afganistán, el canciller ruso, Igor Ivanov, y el de China, Tang Jiaxuan, se pronunciaron hoy en Shanghai a favor del establecimiento de un gobierno "de coalición" en ese país tras el fin de los ataques estadunidenses.