DOMINGO Ť 21 Ť OCTUBRE Ť 2001
Ť Buscan instalar en su lugar a músicos del SUTM, acusan
Mariachis amenazados de desalojo llevan serenata al alcalde de Ecatepec
Ť Le dedicaron al edil panista El ausente y Sacaremos a ese buey de la barranca
JAVIER SALINAS CORRESPONSAL
Ecatepec, Mex., 20 de octubre. A ritmo del Son de la negra, El Ausente, Sacaremos a ese buey de la barranca y otras, más de 200 mariachis e integrantes de 22 grupos norteños ofrecieron la noche de este viernes una serenata al alcalde panista Agustín Hernández Pastrana en protesta porque el ayuntamiento pretende desplazarlos de su lugar de trabajo.
"Ráscale duro a esa guitarra, compadre, para que nos escuche el presidente" se decían los mariachis que juntos entonaron sus mejores melodías en la explanada del palacio municipal, mientras decenas de transeúntes observaban la singular protesta.
Despierta fue la melodía con la que mariachis y norteños comenzaron la serenata, "para que el edil abriera los ojos" e hiciera caso a su protesta.
Desde hace más de 15 años, los 22 grupos integrados en la Unión de Mariachis y Norteños de Ecatepec ofrecen sus servicios en el primer cuadro del municipio; sin embargo, desde hace unos meses la administración panista se ha empeñado en retirarlos del lugar.
Los líderes de la Unión, Martín Soto Rosales y los hermanos Andrés y Anthelmo Serna Rivera, acusaron a Rafael Oteo Olivares, secretario particular del alcalde Agustín Hernández, de querer instalar en su lugar de trabajo a otras organizaciones de la sección 331 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Música. Además indicaron que el funcionario les ha exigido 100 mil pesos para otorgarles la autorización.
En la protesta se entonaron melodías como el Son de la negra, México lindo y querido, Sacaremos a ese buey de la barranca, y una vez que los mariachis se enteraron que el alcalde no los iba a recibir porque no estaba en la presidencia municipal, la petición de entonar la melodía El ausente fue unánime, acompañada de una serie de chiflidos.
Por la noche, una comisión ingresó a palacio a dialogar con autoridades municipales, mientras mariachis y norteños esperaban afuera la respuesta bebiendo café.