Un asesinato largamente anunciado
Señora directora: La muerte largamente anunciada
de nuestra compañera Digna Ochoa, valiente defensora de los derechos
humanos, finalmente se consumó, ante la indiferencia, negligencia
e incapacidad de las autoridades quienes estaban obligadas a velar por
su seguridad.
Este asesinato vil y cobarde nos indigna profundamente
pues denota la falta de capacidad del gobierno para garantizar el libre
ejercicio de la profesión, en este caso de la abogacía, y
nos hace pensar en una guerra sucia que supuestamente ya estaba
desterrada. Sin embargo, este hecho lamentable y vergonzoso evidencia la
falta de gobernabilidad y el regreso de las fuerzas más oscuras
y siniestras, que están actuando libremente, o peor aún,
fomentadas desde un poder de facto, que es el que realmente gobierna.
Exigimos al jefe de Gobierno y al procurador del Distrito
Federal una investigación exhaustiva y eficaz que llegue al fondo
de este crimen y sus móviles y se castigue a los responsables materiales
e intelectuales.
Cruz Arteaga, Carmen Merino, Bárbara Zamora,
Juan José Vera, Leonel Rivero, Santos García, Juan de Dios
Hernández, Sergio Soto, Guillermo Briseño, Manuel Fuentes,
Federico Urtaza, Lauro Sol., Samuel Porras, Julio Ortega, Juan Jiménez,
Ignacio Martínez
Delito contra la seguriudad de la nación
Estimada señora directora: La Asociación
Nacional de Abogados Democráticos denuncia el brutal asesinato de
Digna Ochoa, que debe verse no sólo como un homicidio pleno de agravantes,
como el de ser una mujer indefensa, sino como un delito contra la seguridad
de la nación, según el artículo 139 del Código
Penal, porque al atentar impunemente contra una sencilla abogada defensora
de derechos humanos, produce alarma y temor en la población, perturba
la paz pública y menoscaba la autoridad del Estado.
El crimen, con la saña de una mente torturadora,
de una reconocida y valiente abogada de los más humildes, de campesinos
e indígenas ecologistas y presuntos zapatistas, acusados con frecuencia
por combatir la injusticia social, sin duda infunde temor: tanto por constatar
la indefensión jurídica del mexicano al anular el régimen
de derecho, basado en las garantías individuales de defensa jurídica
frente a los abusos de autoridad, como en los propios abogados nobles que
se encuentran inermes en el desempeño de su función social
de búsqueda de la justicia en la defensa de sus clientes frente
a tribunales.
La autoridad del Estado se menoscaba cuando no puede dar
seguridad jurídica a la población de que el derecho impera
en las relaciones sociales y no la delincuencia y el aumento imparable
de la inseguridad pública, en buena medida por la permanencia de
la corrupción y complicidades, precisamente de los órganos
que deben garantizar la seguridad de la sociedad.
Y todo lo anterior se agrava porque se cumplieron las
siniestras amenazas que una y otra vez se repitieron durante más
de cinco años, sin que las policías, ya advertidas, evitaran
el crimen, incumpliendo la obligación del gobierno con la convención
de la ONU para la protección de los abogados defensores. Matar al
abogado es matar el derecho de defensa legal del ciudadano. Es matar el
encauzamiento jurídico de los conflictos sociales.
El asesinato de Digna Ochoa es el asesinato del derecho
a la justicia. Que no puede quedar impune, y que exige el castigo de los
culpables materiales e intelectuales como condición para reivindicar
el estado de derecho en estos tiempos tan convulsos, por el bien de México.
¿Pues de qué sirve el presunto cambio democrático
de gobierno si continúa la impunidad de amenazas y hasta asesinatos
que impiden la elemental aplicación de la ley para hacer valer los
derechos básicos del ser humano?
Asociación Nacional de Abogados Democráticos.
Adalberto Saldaña Harlow, Presidente, Adán Nieto Castillo,
Adela Salzar de Castillejos, Alejandro Lira Salinas, Alfonso Bouzas, Alma
Rubí Villarreal Reyes, Ana Laura Entel Díaz, Ana María
Salazar de Murrieta, Alejandro Nadal Egea, Angel Cortez Beltrán,
Arturo Alcalde Justiniani, Aurea Susana Codina Barrios, Aurora Calleja
Baltasar y 61 firmas más
Llaman a manifestarse mañana lunes ante Gobernación
Señora directora: Desearíamos publicar
esta carta en El Correo Ilustrado.
Las personas y organismos civiles que firmamos esta carta
expresamos nuestro repudio y profunda indignación por el asesinato
de la abogada defensora de derechos humanos Digna Ochoa. Creemos que ya
no es posible permanecer callados y seguir permitiendo la impunidad en
nuestro país. No puede hablarse de ningún cambio democrático
mientras estos hechos sigan ocurriendo. Convocamos a una movilización
urgente en la Secretaría de Gobernación, en avenida Bucareli,
este lunes 22 de octubre a las 16:00 horas.
Rosario Ibarra de Piedra, Comité Eureka; José
Alvarez Icaza, Eréndira Cruzvillegas, CENCOS; Edgar Cortés,
Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez; Hugo
Almada, Miguel Concha, Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria;
Centro de Estudios Ecuménicos, Centro de Derechos Humanos Bartolomé
Carrasco, Delia Devila, María Dolores Villagómez, Observatorio
Eclesial, Familia Franciscana Internacional; Adrián Ramírez,
LIMEDH; Francisco Cerezo Contreras, Emiliana Cerezo Contreras, Comité
Amplio por la Libertad de los Presos Políticos "Hermanos Cerezo";
Angelica Ayala, Red Ciudadana del Presupuesto Participativo; Antonio Vital,
Sempo; Gustavo Hernández, Red Nacional de Comunicadores Civiles;
Ana Colchero, Antonio Argüelles, Gloria Rico, Mario Rivera, Nuria
Fernández, Saúl Sánchez, Espacio de la Sociedad Civil;
Clara Rodríguez, R. Rodríguez Baños, César
Núñez, Luis Arturo Bassols, Martha Yoloxóchitl Alatriste,
Eduarda Jiménez, Marino Mejía, Froylán Yescas
|