SABADO Ť 27 Ť OCTUBRE Ť 2001

Ť El presidente de EU se inició en los negocios petroleros con un hermano de Osama

Oscuros, los vínculos de George W. Bush con millonarios sauditas y con la familia Bin Laden

Ť Si desea congelar bienes de terroristas primero debe revisar sus propias inversiones: ONG

Ť Los lazos entre el jefe de Al Qaeda y la Casa Blanca podrían ser muy estrechos, afirma

DE LA REDACCION

La incursión en los negocios petroleros del actual presidente de Estados Unidos, George W. Bush, que se inició a finales de los años 70, fue hecha al amparo de "oscuros vínculos" con millonarios de origen saudita y con la familia de Osama Bin Laden, líder de la organización Al Qaeda (La Base), a quien la Casa Blanca acusa de los atentados del 11 de septiembre contra las Torres Ge-melas del World Trade Center, en Nueva York, y el Pentágono, en Washington, de acuerdo con varios reportes.

attacks_landfill_ng4Un reporte difundido por la organización no gubernamental Bush Watch, una persistente crítica de las intenciones del actual gobierno estadunidense de limitar las libertades individuales bajo el pretexto de combatir al terrorismo, señaló que el actual mandatario tendría que revisar sus propias inversiones si efectivamente desea congelar todos los activos financieros de empresas y personas relacionadas con Bin Laden, un ex ciudadano saudita que dirige Al Qaeda desde algún lugar de Afganistán.

El 24 de septiembre pasado el presidente Bush anunció en el Jardín de las Rosas de la Casa Blanca la decisión de su gobierno de tomar medidas para debilitar las redes financieras de grupos terroristas y de quienes les brindan apoyo.

"Todos los bancos estadunidenses que tengan activos de esos grupos o individuos deberán congelar esas cuentas", dijo entonces el republicano Bush.

"Pero el actual presidente estadunidense no siempre ha practicado lo que ahora predica", señaló Bush Watch, en un reporte difundido a través de su página de Internet (www.bushwatch.net).

George W. Bush posee negocios que alguna vez fueron financiados por prominentes figuras del régimen de Arabia Saudita -entre las que se cuenta la Bin Laden, dedicada a negocios financieros y de la construcción-, las que al mismo tiempo apoyaban las actividades de Osama Bin Laden, reclutado por la Agencia Central de Inteligencia (CIA) para combatir al régimen pro soviético de Afganistán en la década de los años 80.

"El primer negocio de George W. Bush, Arbusto Energy, obtuvo en 1979 financiamiento de James Bath, un empresario originario de Houston y amigo cercano de la familia Bush", señaló el reporte de la agrupación, elaborado por el periodista residente en Washington Wayne Madsen.

Uno entre varios inversionistas, Bath dio a Bush 50 mil dólares a cambio de una participación de 5 por ciento en Arbusto Energy. Por esos años Bath era el único re-presentante en Estados Unidos de los negocios de Salem Bin Laden, cabeza de la acaudalada familia saudita y uno de los mu-chos hermanos de Osama.

Sospecha no confirmada

"Por mucho tiempo ha existido la sospecha, que nunca ha sido confirmada, de que el dinero para Arbusto provino directamente de Salem Bin Laden", añadió.

En un comunicado difundido después de los atentados del 11 de septiembre, la Casa Blanca rechazó tajantemente esa posible conexión e insistió en que Bath invirtió su propio dinero, no el de Salem Bin Laden, en Arbusto Energy.

En pronunciamientos contradictorios so-bre el tema, Bush primero negó haber conocido alguna vez a Bath, pero después reconoció la participación del empresario de Houston en Arbusto Energy y también ad-mitió haber estado consciente de que Bath representaba intereses sauditas.

Bush Watch señaló que, "en efecto, Bath tiene profundos vínculos tanto con la familia Bin Laden como con los principales involucrados en el escándalo que rodeó la quiebra del Banco de Crédito y Comercio Internacional (BCCI), donde había fondos de Osama Bin Laden.

Afirmó la agrupación independiente que el BCCI "defraudó a sus depositantes 10 mil millones de dólares en los años 80, en un hecho que en su momento fue calificado por Robert Morgenthau, fiscal del distrito de Manhattan, como 'el más grande fraude en la historia financiera mundial'".

Agregó: "Durante los años 80 el BCCI actuó como el principal canal para lavar dinero destinado a financiar actividades clandestinas de la CIA, que iban desde dar apoyo financiero a los mujaidines afganos (que combatían al régimen pro soviético de Kabul) hasta pagar a los intermediarios que traficaban con armas de Irán para la contra de Nicaragua".

Cuando el presidente Bush anunció que tiene la firme decisión de seguir la pista al dinero usado en los últimos años para fi-nanciar el terrorismo, debe estar consciente de que esa pista conduce no sólo a Arabia Saudita, sino también a los mismos financieros y hombres de negocios que originalmente lo ayudaron a incursionar en los ne-gocios petroleros y después lo impulsaron a la Casa Blanca, señaló la agrupación.

"Los vínculos entre Osama Bin Laden y la Casa Blanca pueden ser mucho más estrechos de lo que el propio Bush está dispuesto a reconocer", señaló por último Bush Watch.