SABADO Ť 27 Ť OCTUBRE Ť 2001
Ť El disco rescata un patrimonio cultural casi desconocido para muchas personas
Suenen tristes instrumentos es un caleidoscopio de variantes sonoras acerca de la muerte
Ť Forma parte de la colección más importante de la Fonoteca del INAH
ANGEL VARGAS
El canto y en general la música figuran entre las principales manifestaciones mediante las cuales los pueblos de México se han relacionado con la muerte desde tiempos ancestrales.
''Cuando vivía el infeliz, šya que se muera!,/ y hoy que está en el veliz, šqué bueno era!/ Sin embargo se veló y el rosario se rezó/ y una voz en el silencio interrumpió:/ -Ya pasa la botella, no te quedes con ella."
Lo mismo con humorístico desparpajo (como en el anterior fragmento de Cerró sus ojitos Cleto, de Chava Flores) que con solemnidad o profundo dramatismo (basta recordar los compases del vals Dios nunca muere o las estrofas de La última palabra, de Macedonio Alcalá y Daniel C. Pineda, respectivamente), la muerte es un tema sumamente recurrente en la expresión sonora de las diversas culturas del país.
Corridos, sones, música de concheros...
Sin embargo, según Benjamín Muratalla, coordinador de la Fonoteca del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), se trata de un patrimonio cultural poco difundido fuera de su lugar de origen y, por ende, prácticamente desconocido entre las mayorías
De allí la relevancia de un proyecto que emprendió esa instancia y que arrojó como resultado el disco compacto Suenen tristes instrumentos.
Se trata de un álbum antológico con el que -explica el etnólogo- ''se pretende presentar a manera de caleidoscopio una selección de las diferentes variantes musicales de cómo se vive y se siente el fenómeno de la muerte en las diversas regiones del país".
Integrado por 21 registros, forma parte de la colección más importante de la Fonoteca del INAH, Testimonio musical de México, y en su proceso de realización intervinieron los investigadores Irene Vázquez, Elsa Malvido, Víctor Acevedo y Javier Romero.
Calificado de ''primer esfuerzo para analizar y dar a conocer la música producida en torno a la muerte", el disco incluye un folleto que contiene ''un estudio anexo sobre orígenes europeos y coloniales de algunas costumbres y prácticas mortuorias de México; asimismo presenta un análisis etnográfico de la música compilada".
Gran parte de las piezas incluidas fueron registradas mediante grabación de campo, y su origen abarca prácticamente toda la República. Se pueden escuchar desde corridos, sones y marchas hasta música de banda y de concheros, así como canciones populares, valses y minués.
''No es un disco hecho para gente docta; recoge música popular y lo menos que podíamos hacer era intelectualizarlo y presentarlo de manera que resultara difícil de entender para sus mismos creadores o para el pueblo al cual le pertenece este patrimonio musical", subraya Muratalla.
Aprovechando la proximidad de las fiestividades de muertos, el material será presentado hoy a las 17 horas en el auditorio Jaime Torres Bodet del Museo Nacional de Antropología, en un acto en el que intervendrán los especialistas Antonio García de León y Víctor Acevedo Martínez, así como los cantantes Oscar Chávez y Tehua, y la banda Mixe de Oaxaca.
Pa' la güesuda
Y, a propósito de la parca, hoy darán inicio en la ciudad de México dos actividades artísticas y culturales relacionadas con ese tema.
La primera es el arranque de temporada del espectáculo escénico Entuerto de muertos, en el que se recurre a diversos clásicos de la literatura universal, entre ellos Miguel de Cervantes Saavedra y Sor Juana Inés de la Cruz, con ''el objeto de fomentar la lectura" entre los espectadores ''a través de arquetipos que despierten el deseo de conocer más acerca" de los autores. Las funciones serán en la Isleta menor de la primera sección del Bosque de Chapultepec, los viernes a las 20:30 horas y los sábados y domingos a las 19 horas, y concluirán el 2 de diciembre.
Bajo el lema ''La muerte no existe para el arte, hagámoslo vivir", el Centro Nacional de las Artes (avenida río Churubusco y calzada de Tlalpan, colonia Country Club) realizará a partir de hoy y hasta el 4 de noviembre el festival Vida y Muerte, donde confluirán ceremonias rituales, conciertos, narraciones escénicas, lecturas de poesía, conferencias, talleres infantiles, ofrendas, expo-venta de artesanías, danzas folclóricas, danza contemporánea y viajes multimedia al Mictlán. Sobresale el concierto que el quinteto de cuerdas Raíces ofrecerá el lunes, a las 12 horas, en homenaje a Francisco Gabilondo Soler Cri-Cri, a quien también se montó una ofrenda.