MIERCOLES Ť 31 Ť OCTUBRE Ť 2001
Ť Nueva oleada de bombardeos sobre Kandahar, Mazar-e-Sharif, Kunduz y Paktika
La Alianza del Norte cuenta con 500 militares de EU y sus aliados, dice el régimen talibán
AFP, DPA, AP Y REUTERS
Kabul, 30 de octubre. La milicia talibán denunció hoy que Estados Unidos y sus aliados tienen ya por lo menos 500 militares trabajando al lado de la opositora Alianza del Norte, al reiniciarse este martes una nueva oleada de bombardeos sobre Kabul, Kandahar, Mazar-e-Sharif, así como sobre blancos en Kunduz y Paktika.
"Según nuestras informaciones, 500 estadunidenses y sus aliados, entre ellos soldados profesionales y expertos técnicos y de formación, llegaron hasta las posiciones" de la alianza opositora, cuyo territorio bajo su dominio se encuentra en el norte del país, señaló el responsable de inteligencia del talibán, Qari Ahmadulá.
Indicó que "la mayoría de esta gente se encuentra en Faizbad, en el centro de la provincia de Badajshán", la única controlada por la oposición. Esa provincia se localiza cerca de la frontera con Tadjikistán, una de las repúblicas centroasiáticas de la antigua Unión Soviética.
El funcionario dijo que esas fuerzas opositoras están siendo abastecidas de municiones desde el aire por la fuerza aérea de Estados Unidos, a las que busca reforzar en sus planes de lanzar una ofensiva. Se trata de una coalición de milicias que controlan cerca del 10 por ciento del país en el noreste, el centro y cerca de Kabul.
Al iniciarse la cuarta semana de bombardeos sobre Afganistán, la organización estadunidense Human Rights Watch denunció que entre 25 y 35 civiles murieron durante una de las incursiones efectuadas el 22 de octubre por la aviación estadunidense, de acuerdo con datos obtenidos de sobrevivientes en hospitales de Quetta, Pakistán.
Las víctimas en esa ocasión se registraron en el poblado de Chowkar-Karez, en la provincia de Kandahar. Uno de los directivos del organismo para Asia, Sidney Jones, refirió que ninguno de los testigos mencionó que en la zona hubiera posiciones del talibán o Al Qaeda, la organización del líder islámico Osama Bin Laden.
Tras una aparente pausa de 24 horas, la aviación estadunidense lanzó una segunda oleada de bombardeos sobre las posiciones del talibán en el frente nordeste de Kabul. Los aparatos atacaron en varias oleadas sucesivas, arrojando una docena de bombas de fuerte potencia sobre las mismas posiciones atacadas por primera vez hace dos días.
El talibán denunció que una bomba destruyó un depósito de agua potable en el pueblo de Veni Hihar, a ocho kilómetros de Kabul. Residentes dijeron que una bomba cayó en las afueras de la ciudad hacia la medianoche, y las baterías antiaéreas respondieron.
Los estadunidenses lanzaron prolongados bombardeos sobre la ciudad meridional de Kandahar, el bastión del talibán, donde habría sido alcanzada una instalación militar, cuyo saldo sería de cuatro civiles muertos y otros diez heridos en la zona residencial de Mirwais Mena, de acuerdo con la agencia Aip, cercana al talibán.
Los bombardeos en Kandahar se prolongaron durante varias horas, y fueron repelidos por fuego de artillería del talibán.
Los bombardeos fueron ampliados a blancos sobre Kunduz y Paktika. Según los reportes, los bombardeos se concentraron sobre el aeropuerto de Kunduz, la norteña provincia del mismo nombre, que causaron la muerte de un talibán.
Aip señaló que fueron sometidas a intensos bombardeos posiciones del talibán en Sherena, la región de Paktika, al este.
Hubo otra serie de bombardeos sobre la línea del frente talibán en Kalay Katair, en la provincia de Tajar, así como en dos distritos de la provincia de Balj, colindante con Uzbekistán. Asimismo, se produjeron bombardeos sobre la gran ciudad norteña de Mazar-e-Sharif, donde la oposición afirma estar a pocos kilómetros.
No obstante, en la zona norteña los ataques aéreos se concentraron en el área de Dara Suf, provincia de Samangan, y en Marmoul, provincia de Balkh, donde los frentes fueron bombardeos intensamente, sin que de momento se conozca el resultado.
En tanto que el general estadunidense Tommy Franks confirmaba por primera vez desde Uzbekistán la presencia de consejeros de su país en las filas de la Alianza del Norte, esa fuerza afirmó haber rechazado un contraataque del talibán en los alrededores de Qala Nau.
Incluso, voceros opositores afirmaron haber cortado una línea de abastecimiento clave del talibán a la cercana ciudad de Herat, cuyo aeropuerto fue alcanzado nuevamente en los ataques de Estados Unidos durante la noche.
En otro reporte, Aip dijo que la milicia islámica ahorcó a tres hombres acusados de robo en las inmediaciones de la ciudad de Herat. Previamente hubo una persecución de esas personas en una autopista del área, en cuyo enfrentamiento seis ladrones murieron.