MARTES Ť13 Ť NOVIEMBRE Ť 2001

Ť Peculado y asociación delictuosa, los cargos en su contra

Dictan auto de formal prisión a ex procurador de Justicia de Chiapas

ANGELES MARISCAL CORRESPONSAL

Tuxtla Gutierrez, Chis., 12 de noviembre. El juez Francisco de Jesús Aguilar Zúñiga dictó auto de formal prisión al ex procurador Eduardo Montoya Liévano, detenido hace seis días como presunto responsable de peculado y asociación delictuosa.

Luego que el togado dio a conocer la resolución a Montoya Liévano, los abogados de éste apelaron el veredicto, en virtud de que ninguna de las personas o los representantes de las instituciones que lo inculpan se presentaron a los careos que solicitó el reo.

En su dictamen, Aguilar Zúñiga indicó haber hallado elementos suficientes para considerar que el detenido sería culpable de malversar más de 7 millones de pesos del Fondo Federal de Seguridad, motivo por el que está procesado.

Edgar Cortázar Villafuerte, director de los Centros de Readaptación Social de Chiapas, confirmó por su parte que Montoya Liévano se encuentra en la zona de celdas de clasificación, donde están recluidos ex policías detenidos por diversas causas. Explicó que la ubicación del ex procurador se debe a que al momento de ser detenido Montoya Liévano dijo temer por su vida, debido a amenazas que habría recibido durante su gestión por parte de sujetos ahora presos.

El ex procurador fue detenido en esta capital el 6 de noviembre, día en que se dio a conocer el homicidio de quien fungió como su coordinador de Finanzas, Hugo Leonel de Regules García.

A ambos ex funcionarios, así como a Roberto Sevilla Mandujano -aprehendido el 8 de este mes- se les implicó de malversar fondos federales destinados a la seguridad, así como recursos del estado que de manera extraordinaria se les autorizaron durante el tiempo que colaboraron en la administración de Roberto Albores Guillén.

n.

Además se investiga a Montoya Liévano por la presunta protección que dio a un grupo de escuadrones de la muerte en el que habrían participado policías a su mando, a los cuales se imputa ejecutar a diversos delincuentes e incluso a policías.