LUNES Ť 19 Ť NOVIEMBRE Ť 2001

Ť Culmina el 22 en la Galería VMRelaciones como parte del programa El Aire

Arquitectura bélica en la muestra de Estrella Carmona

MERRY MAC MASTERS

A mediados de los noventa la pintora Estrella Carmona (puerto de Veracruz, 1962) se fue a vivir a Monclova, Coahuila, a fin de desarrollar un trabajo de investigación en torno a la minería, los procesos siderúrgicos y el movimiento de las máquinas. Durante cerca de cuatro años Carmona produjo alrededor de 110 óleos, que fueron repartidos entre las oficinas de Altos Hornos en diferentes partes del país.

Al seguir trabajando la serie de las máquinas, surgió la inquietud por hacer algo sobre arquitectura, que tuviera que ver con las fortificaciones, las señalizaciones de batallas, los obeliscos, los muros y las ventanas: "Todo lo que serían espacios abiertos con base en una perspectiva visual que tuviera que ver con puntos de fuga muy pronunciados. Querían un poco la imagen de espacialidad". Las "arquitecturas militares", como consigna Mónica Mayer, es el tema central de la exposición que hasta el día 22 presenta Carmona en la galería VMRelaciones, Córdoba 37-9, colonia Roma, dentro de un proyecto de arte joven de El Aire, centro de arte y Grupo Gilardi.

La temática tiene que ver también con la comparación de la arquitectura con un espacio "metafísico". Esto es, "comparar con el proceso del pensamiento los espacios y las distancias entre la tierra y el espacio aéreo. Un poco también con la idea de mostrar el espíritu que subyace dentro de las máquinas. Asimismo tiene que ver con lo que llamaba Schopenhauer la segundo visión que es lo que surge cuando uno duerme y ve con la mirada del sueño. O sea, los ojos que ven durante el sueño, son los que he tratado de representar en estos cuadros". Otra teoría relacionada con la exposición es la de la estrategia del triángulo. Esto es, "dibujar y pintar en base a la estructura triangular resulta en ciertas líneas de tensión que vienen a representar el movimiento y las distancias como un parámetro de la espiritualidad".

Según Carmona lo que le ha llevado a trabajar lo bélico es "una interrogante en torno a qué tanto es válida la noción del progreso y qué tanto es real la noción de racionalidad en la sociedad occidental contemporánea". Como método de trabajo ha escogido básicamente el materialismo histórico y el nihilismo. Es mediante la mezcla de ambas formas de pensamiento que ha logrado dar forma a sus cuadros.

Dentro de la plástica mexicana a Carmona "le gusta" la generación de la Escuela Mexicana de Pintura, así como la forma de trabajar de Saturnino Herrán. En la actualidad experimenta en base a verdes, sepias y ocres.

Si da la impresión de que sus obras apenas caben en los lienzos, la entrevistada dice: "Sí, de hecho uno de mis grandes anhelos es algún día poder trabajar un mural porque siempre trato de ubicarme dentro de la pintura más que nada como primero un acto físico, con una gran actividad del brazo junto, desde luego, con la mental. Los espacios pequeños me bloquean bastante".

En la actualidad Carmona se encuentra en la ciudad de Nueva York por cuatro meses gracias a una beca de residencia del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes.