Ť Cuatro fueron secuestradas en Ciudad Juárez y otra en Guadalupe y Calvo
Chihuahua: hallan ejecutadas a cinco personas levantadas por uniformados
Ť Los cuerpos fueron encontrados atados de pies y manos y en estado de descomposición
RUBEN VILLALPANDO Y MIROSLAVA BREACH CORRESPONSALES
Cinco personas que habían sido levantadas por grupos de hombres vestidos con uniformes de agentes policiacos y armados con rifles en los municipios de Ciudad Juárez y Guadalupe y Calvo Chihuahua aparecieron ejecutadas este sábado.
La policía municipal de Ciudad Juárez localizó a las 7:40 horas los cuerpos sin vida de cuatro jóvenes que fueron secuestrados (o levantados, como se dice en el argot policiaco local) por un comando de personas que portaba uniformes negros y se hicieron pasar por agentes de la Procuraduría General de la República.
Los
cuerpos estaban desnudos, amarrados de pies y manos y envueltos en cobijas
en un terreno ubicado entre las calles Valentín Fuentes y Pedro
Rosales de León. Vecinos del sector informaron que los cuerpos probablemente
fueron tirados durante la madrugada de este sábado.
Al mediodía fueron identificados como Juan Antonio Chávez, Raúl Varela, Eduardo Chávez y Oscar Barraza, de 23, 24, 32 y 33 años, respectivamente.
Juan Manuel Carmona Herrera, vocero policiaco, comunicó que los cuatro se encontraban atados con plástico transparente del cuello, tórax, rodilla y pies, llevaban aproximadamente cuatro días de fallecidos y estaban en avanzado estado de descomposición.
Familiares de las víctimas presentaron el miércoles pasado sendas denuncias por secuestro en el departamento de Averiguaciones Previas y el grupo antisecuestros de la Policía Judicial del Estado.
Raúl Varela, padre de uno de los secuestrados, manifestó entonces que los responsables persiguieron a las víctimas desde la zona comercial conocida como El Pronaf hasta su casa, en un tramo de más de dos kilómetros de distancia, sin que las corporaciones policiacas intervinieran.
Basado en el relato de Daniel Chávez, uno de los testigos que fue golpeado cuando se llevaron a los jóvenes dijo que los secuestradores llegaron en cuatro camionetas, argumentando que eran agentes de la Policía Judicial sin presentar identificaciones.
Este mismo sábado, en la comunidad El Cajoncito, municipio de Guadalupe y Calvo, otro comando integrado por 25 hombres que portaban uniformes y rifles secuestraron a Santos Urías Núñez, quien tres horas después fue encontrado acribillado en un paraje cercano al poblado en donde fue raptado.
Familiares de la víctima denunciaron ante la policía municipal que el hombre fue levantado de su domicilio a las 8 horas en aquella comunidad de la Sierra Tarahumara, en la zona limítrofe con Badiraguato, Sinaloa. En el reporte de la policía se asienta que recibió varios impactos de bala de grueso calibre.
El vocero de la procuraduría de Justicia del estado, Víctor González Castro, confirmó la ejecución de Urías Núñez, de 42 años, e indicó que la dependencia no tiene información respecto a la presunta participación de militares en el crimen.
Sobre este asunto, el gobernador Patricio Martínez García refirió que la ola de violencia que vive el estado, especialmente en Ciudad Juárez, se debe al desorden que prevaleció entre las filas de la policía preventiva de aquel municipio durante el gobierno del panista Gustavo Elizondo.
Denuncias contra asesinos de mujeres
En Ciudad Juárez dos jovencitas ratificaron una querella por violación en el departamento de Averiguaciones Previas contra Víctor Javier García Uribe y Gustavo González Meza, quienes las atacaron el año pasado.
Una de las jóvenes explicó que ella había presentado la demanda por ataque sexual desde noviembre del año pasado contra un chofer de camión de pasaje urbano sin que el responsable fuera detenido, pero al ver las fotografía de los dos acusados de cometer ocho homicidios reconoció a González Meza como su agresor.
La otra joven señaló que a bordo de un camión de pasajeros fue agredida y sin que la violaran le hicieron tocamientos en todo el cuerpo, por lo que también decidió presentar la demanda al identificar a los responsables.
Por esta denuncia la Policía Judicial del Estado decomisó el camión propiedad de García Uribe, para buscar evidencias de violencia.