VIERNES Ť 30 Ť NOVIEMBRE Ť 2001

Ť No son creíbles reportes de matanza de 160 talibanes por aliancistas: Pentágono

EU despliega otros 100 soldados en el norte afgano; intenso bombardeo sobre Kandahar

Ť Informan de la muerte de un efectivo estadunidense en acción no militar en Uzbekistán

DPA, AFP, PL Y REUTERS

refugees_afghanKabul, 29 de noviembre. Estados Unidos continuó hoy incrementando su presencia militar en Afganistán al desplegar otros 100 soldados de infantería en el norte del país, al tiempo que su aviación lanzó un intenso bombardeo sobre Kandahar y fuerzas contrarias al talibán comenzaban a avanzar hacia esa ciudad, el último reducto de la milicia islámica.

Se trata del despliegue de un centenar de soldados de la décima división de montaña en Mazar-e-Sharif, en cuyo aeropuerto un grupo de 10 de esos efectivos comenzó a levantar minas y a reparar el aeropuerto civil, que muestra enormes cráteres tras los bombardeos estadunidenses.

El Departamento estadunidense de Defensa informó de la muerte de otro de sus soldados en Uzbekistán, que "no fue consecuencia de una acción enemiga", dijo un escueto informe. Apenas ayer la CIA confirmó la muerte de uno de sus agentes y de cinco soldados heridos en Mazar-e-Sharif.

La vocera del Pentágono, Victoria Clarke, negó otra masacre de unos 160 prisioneros talibanes y combatientes extranjeros luego de que sus socios locales de la Alianza del Norte tomaron el viernes pasado el poblado de Takteh Pol, entre Kandahar y la frontera con Pakistán, como lo admitió ayer un comandante pashtún.

"Ha habido informes sobre una masacre de 160 prisioneros perpetrada por las fuerzas de la oposición. Nos hemos esforzado en clarificar esto y esas informaciones no son creíbles", señaló la vocera sobre esta nueva matanza, diferente a la de 450 extranjeros asesinados el domingo en la cárcel de Qalae-Jangi, de Mazar-e-Sharif.

Sostuvo que "las fuerzas de oposición han tomado pocos prisioneros" y que "los reportes que tenemos es que esos prisioneros están siendo tratados adecuadamente", al aludir a la confesión de un comandante de las fuerzas antitalibán de Gul Agha, un ex gobernador mujaidín de Kandahar, cuyas fuerzas se involucraron en ese baño de sangre de Takteh Pol, cuando los talibanes se negaban a rendirse y para doblegarlos decidieron ejecutar a los 160 prisioneros en su poder.

De acuerdo con el informe del comandante pashtún, no identificado, las ejecuciones se efectuaron ante militares estadunidenses en tierra, que coordinaban apoyos con el suministro armamentos a los aliancistas desde helicópteros en la zona.

Otro de los comandantes fieles a Gul Agha, Jalid Pashtoon, se encargó también de negar la matanza de los talibanes en Takteh Pol. "No ha ocurrido un solo incidente de ese tipo", dijo, pero agregó que dos combatientes al parecer árabes murieron cuando se resistieron a rendirse y sacaron granadas y "sus muertes se hicieron inevitables".

Pashtoon señaló que las fuerzas de Gul Agha han comenzado a avanzar unos cinco kilómetros hacia Kandahar, hacia el sur del aeropuerto, alrededor de Shegah, con un contingente de unos 3 mil efectivos bien armados, entrenados y listos para entrar en combate. Aunque, reconoció que el objetivo es más bien persuadir en primer término a los talibanes de que cambien de bando.

Explicó que el problema es que prevalece como el mayor obstáculo el decreto islámico del líder talibán, mullah Mohammad Omar, de continuar con la Jihad o guerra santa. Esto hace, dijo, que sea muy difícil la negociación para que se rindan, y que de haber combates en una semana o menos debería caer Kandahar.

Los talibanes resisten lanzando cohetes contra sus fuerzas, indicó Pashtoon, pero aseveró que hay la promesa de enviar a sus casas a aquellos soldados que se rindan, como se hizo ya con unos 60 milicianos que habían sido capturados. Sin embargo, respecto a los extranjeros, dijo que parecen decididos a luchar hasta el fin porque no les dejaron ninguna ruta de escape.

El mullah Omar reafirmó desde Kandahar, el último baluarte talibán, que sus fuerzas lucharán hasta el final. "No abandonen ninguna área. Esto no es una cuestión de tribus; es una cuestión de islamismo", por lo que rechazó todo tipo de negociación con los estadunidenses e instó a "luchar hasta el último aliento".

"El está definitivamente allá, quiere luchar hasta la última gota de sangre", expresó Pashtoon.

Un ex responsable de la Alianza del Norte en Kabul, el comandante Besmilá, estimó que Kandahar podría capitular en una semana y afirmó que había combates en la zona. Aseguró que algunas fuerzas contrarias al talibán estaban en contacto con ellos, como el comandante Gul Agha y el mullah Najibulá, un ex comandante talibán de la ciudad sureña.

El Pentágono confirmó que hay movimientos "discretos" de los grupos opositores al talibán en la provincia de Kandahar, y que trabajaba en coordinación con ellos. Funcionarios en Washington afirmaron que el jefe de inteligencia talibán habría desertado hacia las fuerzas de la oposición, así como otros jefes talibanes.

El comandante estadunidense de operaciones militares en Afganistán, general Tommy Franks, declaró a The New York Times que Estados Unidos podría establecer nuevas bases militares en el país centroasiático para facilitar la movilidad de sus tropas, que se sumarían a la ya establecida en Kandahar por los marines.

Los Angeles Times señaló que varios miembros de Al Qaeda habrían sido capturados en Afganistán por la Alianza del Norte, y que entre ellos figuraba Ahmed Omar Abdel-Rahman, hijo del jeque ciego Omar Abdel-Rahman, condenado en 1995 por un complot abortado en Nueva York.

Aparte de los bombardeos sobre Kandahar de las últimas horas, se reportó que 15 civiles murieron en otros ataques sobre las poblaciones de Wandoz, Qazi Karez y Mulla Abdulla, y dos niños que corrían tras un fardo de ayuda alimentaria lanzada desde un avión murieron al entrar a un campo de minas que estallaron, en Herat.

Otro reporte de la agencia Aip apuntó que la milicia talibán ahorcó en una plaza pública de Kandahar a un supuesto espía de Estados Unidos, al que se le decomisó un teléfono satelital.