Ť Es un reflejo del gobierno autócrata de Aznar, asegura líder
Multitudinaria manifestación en Madrid contra ley que privatiza universidades
ARMANDO G. TEJEDA CORRESPONSAL
Madrid, 1o. de diciembre. Estudiantes, profesores, rectores, padres de familia y líderes políticos y sindicales protagonizaron hoy en Madrid una multitudinaria protesta contra la Ley Orgánica de Universidades (LOU) del gobierno del presidente José María Aznar.
La marcha, que según organizadores superó el medio millón de personas, reunió a estudiantes de todas las comunidades autónomas del estado español, desde Galicia a Andalucía.
Por su parte, la ministra de Educación y Cultura, Pilar del Castillo, expresó que pese a las protestas la nueva ley se aprobará.
La manifestación fue convocada por la Plataforma en Defensa de la Universidad Pública (que representa a la totalidad de las casas de educación superior del país), los sindicatos que aglutinan a la mayoría de los trabajadores de los centros educativos, las centrales Comisiones Obreras y Unión General de Trabajadores, la Conferencia de Rectores, la Asociación de Padres de Familia y los dos principales partidos políticos de oposición, el Socialista Obrero Español e Izquierda Unida.
Los manifestantes pidieron la dimisión de la ministra y advirtieron que no descansarán hasta que sea retirada la legislación, que, entre otras cosas, impone un sufragio universal ponderado -valdrán más los votos de docentes con doctorado-, introduce exámenes que determinarán el ingreso a cada universidad y amplía fórmulas de contratación de profesores.
La columna principal de la movilización fue encabezada por el líder socialista José Luis Rodríguez Zapatero, el comunista Gaspar Llamazares, los sindicalistas José María Fidalgo y Cándido Méndez y una nutrida representación de rectores, entre ellos Gregorio Peces-Barba (uno de los redactores de la Constitución) y Raúl del Villar, de la Universidad Autónoma de Madrid.
Del Villar explicó a La Jornada que esta "protesta es un acto de responsabilidad de la comunidad universitaria".
El líder de la Unión General de Trabajadores explicó que "esta ley universitaria es el reflejo de un gobierno autócrata y poco ilustrado del señor Aznar y, pese a lo que diga el Ejecutivo, la comunidad universitaria está consciente de lo que esta ley significa", pues favorece a los centros privados frente a la educación pública.
Un grupo de jóvenes gritaba "si somos el futuro, ¿por qué nos dan por el culo-", mientras llegaban finalmente a la Plaza de España, donde se instaló un escenario.
Una marcha, también contra la LOU, reunió a 15 mil personas convocadas por la Confederación del Trabajo y anarquistas, que rechazaron participar en la marcha oficial porque, dijeron, estaba condicionada por intereses ajenos al movimiento estudiantil.
La comunidad universitaria ya advirtió en más de una ocasión que si el gobierno persiste en poner en marcha la ley educativa se hará un llamado a la "desobediencia civil", que podría significar, según Gaspar Llamazares, "no sólo la dimisión de Del Castillo, sino muy posiblemente la de Aznar del gobierno".