LUNES Ť 3 Ť DICIEMBRE Ť 2001
Ť Anuncian mercado más riguroso para ofrecer cintas nacionales en Francia
Exhibe 20% de salas en México el otro cine
Ť Balance positivo en el festival fílmico que ayer concluyó en Acapulco, dicen organizadores
ERICKA MONTAÑO GARFIAS ENVIADA
Acapulco, Gro., 2 de diciembre. El balance preliminar del Festival de Cine Franco Mexicano -que culminó ayer con la proyección de Un mundo raro, de Armando Casas- es positivo y se cumplieron los objetivos tanto de intercambio cultural como de venta de películas, declaró Daniel Toscan du Plantier, director de Unifrance, uno de los principales organizadores del encuentro.
En esta sexta versión del festival se presentaron 53 cintas francesas para su venta a unas 70 distribuidoras mexicanas y latinoamericanas que se interesaron especialmente por varias de las que se exhibieron en el Teatro Juan Ruiz de Alarcón: L'emploi du temps, de Laurent Cantet; Yamakasi, de Ariel Zeïtun, y C'est la vie, dirigida por Jean-Pierre Améris. Además de Reines d'un jour, de Marion Vernoux; Vidocq, de Pitof, y Grégoire Moulin contre l'humanité, de Artus de Penguern, un caso especial este último debido a que en Francia pasó sin pena ni gloria. Hasta el momento las negociaciones continúan.
Asimismo, asisten compradores franceses interesados en películas mexicanas. Al respecto, Gerardo Bellido, director de Distribución de Imcine, precisó que en el mercado se presentaron 12 películas mexicanas, pero aún no se sabe cuáles son las que serán vendidas para su exhibición en Francia.
Bellido adelantó que existe un proyecto bien estructurado, propuesto por los franceses, para la realización de un mercado el próximo año en el que se exhiban en forma más rigurosa las películas mexicanas y ver su posible distribución en Francia y otros países europeos.
Toscan señaló que algunas de las películas francesas encontraron compradores en los mercados más importantes de América Latina, pero también se dio el enriquecimiento cultural porque ahora el festival ya es franco-mexicano y "somos socios tanto en la creación como en la reflexión".
Como en años anteriores Toscan ratificó la realización del festival el próximo año, "porque el cine francés nunca ha estado tan bien como en los últimos 25 años". No descartó además la posibilidad de coproducciones entre Francia y México, incluso algunos directores franceses ya se interesan en filmar en el país, aunque señaló que no es una cuestión que se haga por decreto.
Lo que es importante, dijo, "es evitar que haya una hegemonía en el cine", en referencia al estadunidense, y subrayó que por ello se alienta la diversidad cultural. "El festival tiene la característica única de que es el intercambio del cine mexicano y francés. Cuando comenzó -hace seis años- no había cine francés en México y viceversa. El cine de Estados Unidos ocupaba 97 o 98 por ciento de las salas mexicanas, pero gracias al desarrollo de ambas cinematografías ahora 20 por ciento de las salas en México exhiben el otro cine".
Sin embargo, precisó que no se trata de tener una posición agresiva contra el cine estadunidense, "sólo queremos presentar una alternativa a esa hegemonía".