MIERCOLES Ť 5 Ť DICIEMBRE Ť 2001
Ť Con otra terminología, es la misma propuesta privatizadora de Zedillo: Bartlett
Presenta AN en el Senado la iniciativa para abrir el sector eléctrico; no pasará, advierten PRI y PRD
Ť Inútil intento del panista Rodríguez Prats por convencer al SME de los beneficios
ANDREA BECERRIL
La fracción del PAN en el Senado de la República presentó ayer la iniciativa de ley que reforma los artículos 27 y 28 constitucionales, a fin de abrir la industria eléctrica al capital privado. De inmediato el PRI y el PRD advirtieron que se trata de la misma propuesta del ex presidente Ernesto Zedillo para privatizar ese sector estratégico y que, al igual que aquélla, no pasará.
Además del rechazo de las fuerzas políticas, fuera del recinto senatorial cientos de trabajadores del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) llevaron a cabo un mitin para manifestarse en contra de la desincorporación del sector e incluso encararon al panista Juan José Rodríguez Prats, quien trató de explicar a los trabajadores los supuestos beneficios del proyecto, pero sólo encontró repudio y el grito de "šla patria no se vende! šLa patria no se vende!''
El priísta Oscar Cantón Zetina y el perredista Demetrio Sodi de la Tijera, que estuvieron también en la concentración realizada fuera del recinto de Xicoténcatl, se llevaron, en cambio, ovaciones y el grito de "šduro, duro, duro!" cuando expresaron que no votarán a favor de la iniciativa que pretende abrir a trasnacionales el sector eléctrico.
En entrevista, el senador del PRI Manuel Bartlett Díaz dijo que, aunque el proyecto panista cambió la terminología e introdujo dos transitorios, supuestamente para dejar a salvo a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y a Luz y Fuerza del Centro, en realidad se trata de una privatización total.
Al presentar la iniciativa de ley a nombre de su fracción, Rodríguez Prats insistió en tribuna en el apremio de abrir el sector eléctrico, ya que, dijo, en los próximos diez años ''se requerirá la instalación de más de 32 mil 400 megavatios de capacidad de generación, equivalente a 86 por ciento de lo que contamos actualmente".
Sostuvo que no buscan una privatización, sino una reforma que, "al tiempo de proponer una alternativa innovadora para capitalizar el sector eléctrico, no es ajena al sentir social y ratifica expresamente la rectoría del Estado".
Aseguró que la propuesta reitera el compromiso del presidente Vicente Fox de que ''no se privatizarán ni CFE ni Luz y Fuerza del Centro ni sus activos'', y que los derechos laborales de los trabajadores quedan plenamente garantizados.
Expuso el proyecto de reformas a los artículos 27 y 28 de la Constitución, que ''permitirá transitar de un servicio prestado en forma exclusiva por el Estado a un servicio que sume los esfuerzos de las empresas de los sectores público, social y privado, bajo la rectoría del Estado, en congruencia con los artículos 25, 26 y 28 de la propia Constitución".
El panista explicó que actualmente el párrafo sexto del artículo 27 constitucional transfiere al Estado en forma exclusiva la generación, conducción, transformación, distribución y abastecimiento de energía eléctrica que tenga por objeto la prestación del servicio público. La iniciativa, detalló, plantea modificar ese párrafo, "a efecto de que las empresas de los sectores social y privado puedan concurrir con las entidades del sector público a la ampliación de la capacidad de generación, así como al crecimiento de la infraestructura de transmisión y distribución y a la prestación de los servicios de energía eléctrica".
La iniciativa del PAN propone dejar en manos de capital privado la generación eléctrica, hacer concesionable la distribución y que sólo que quede en manos del Estado la transmisión, a través de un "sistema nacional", al que integrarían ''las redes de conducción de electricidad en alta tensión que interconectan las plantas de generación con los sistemas de distribución en prácticamente todo el territorio nacional".
La propuesta blanquiazul, precisó Rodríguez Prats, incluye un artículo cuarto transitorio ''en el que se señala que la CFE y Luz y Fuerza del Centro no requerirán asignación ni concesión alguna para continuar atendiendo las zonas de distribución de energía eléctrica en las que actualmente prestan el servicio". Aseguró que con tal disposición queda plenamente garantizado el respeto a las empresas públicas y a sus trabajadores.
Los cambios propuestos por la fracción panista al artículo 28 son para adecuarlo a las modificaciones planteadas al 27 Constitucional.
''šLa patria no se vende!''
Una vez presentada la iniciativa, Bartlett, que en los últimos 12 meses se metió de lleno en ese tema, advirtió que aun con los cambios de terminología, es la misma propuesta que formuló Zedillo y que el PRI no aceptó en su tiempo, porque se trata de la privatización total. Advirtió que además la presentan en mal momento, cuando el gobernador de California alertó sobre las desincorporaciones y una de las principales trasnacionales, Enron, ''aca-ba de tronar''.
"El PAN está proponiendo dejar sólo la transmisión en manos del Estado, y si recordamos el proceso que siguió la iniciativa de Zedillo, al final preservaban también esta última fase del proceso. Y esto no es ninguna concesión graciosa; lo que ocurre es que las desastrosas experiencias de privatización en el mundo demostraron que era un fracaso dejar en manos de particulares también la transmisión."
Resaltó que "ya se dieron cuenta de que las carreteras, que son la base de los sistemas de transmisión, no pueden privatizarse, porque hay una contradicción entre los particulares dueños de la transmisión y los particulares dueños de la generación".
Dijo también que sostener que podrán participar en la industria eléctrica los sectores social y privado no es más que un cambio de terminología, porque en el mercado ''no hay nada de social; lo único que hay son trasnacionales que quieren ganancias. Así que lo que el PAN plantea es una privatización total".
Los mismos argumentos los escuchó Rodríguez Prats más tarde, cuando estuvo frente a los trabajadores del SME, que desde muy temprano corearon consignas fuera del recinto de Xicoténcatl. La plazoleta Lerdo de Tejada estaba copada por cerca de mil sindicalistas.
Con gritos de "šduro, duro, duro!" y "šFox entiende, la electricidad no se vende!'' recibieron a la comisión de senadores del PRI, el PRD y el PAN. El secretario general del SME, Rosendo Flores, echó por tierra de inmediato uno de los argumentos centrales de Rodríguez Prats, quien se veía preocupado por la furia de trabajadores.
De nada sirve, les dijo el líder del SME, que se mantengan los activos de la CFE y la CLF, porque la intención es dejar morir a la empresas, que no podrán competir con las trasnacionales.
Les cedió el uso de la palabra a los senadores. Rodríguez Prats comenzó y en cuanto dijo "quiero informarles que el día de hoy el PAN presentó...", los gritos y rechifla lo acallaron.
''šLa patria no se vende! šLa patria no se vende!'', corearon cientos de gargantas... El panista trató de seguir su discurso; aludió a que la cuestión fiscal está atorada, al desplome de los precios del petróleo... ''Tenemos que garantizar que haya inversión hacia el futuro, para tener la certeza y ofrecer a los inversionistas y a todo el país que habrá energía eléctrica." "šUuuuuh, mentiroso!'', fue la respuesta. Se refirió al artículo cuarto transitorio de su iniciativa y de nuevo recibió el estruendoso "šLa patria no se vende, nooo se vende!''
Rodríguez Prats propuso a los trabajadores del SME discutir en comisiones el tema y cuando finalmente dijo: "No tengo por qué mentirles; se está buscando la posibilidad de abrir la competencia en relación a generación y distribución'', los "šno!, šno!'' surgieron interminables, mientras él alzaba la voz para tratar de hacerse oír. ''šVendepatrias!'', le gritaron todavía. Y mostraron los pulgares hacia abajo: "reprobado, reprobado".
En ese ambiente, las intervenciones de Cantón Zetina y Sodi de la Tijera fueron recibidas con aplausos. El primero expuso el compromiso del tricolor de no permitir la privatización del sector eléctrico. "šDuro, duro, duro!'', le respondieron los trabajadores del SME, con los puños en alto.
Sodi levantó aún más los ánimos de los sindicalistas al advertir: "la reforma que hoy presentó en tribuna el PAN está muerta, igual que estuvo la de Zedillo en 1999". Advirtió también que parece que ''Acción Nacional y el gobierno no han entendido que si no hay consenso, no hay reformas". "šDuuuro, duuuuro!", se oyó No vamos a dar nuestro voto para la privatización; por el contrario, vamos a trabajar con las demás fuerzas políticas que quieran que la industria eléctrica sea orgullosamente nacional''.