Ť Ocupantes incendiaron viviendas para evitar cumplimiento de orden judicial
Desalojan granaderos asentamiento en Iztapalapa
SUSANA GONZALEZ G.
En un intento por evitar ser desalojados del lugar donde vivieron casi cuatro años, habitantes del predio conocido como El Gallito, en Iztapalapa, incendiaron varias viviendas y se atrincheraron, con la esperanza de que los 250 granaderos que fueron enviados para hacer cumplir una orden judicial que devolvía el terreno a una empresa particular desistieran del operativo.
Pero todo fue en vano. Con los uniformados -también acudieron integrantes de la Policía Montada- que desde las 11 de la noche del miércoles cercaron el predio, llegaron unos 90 trabajadores de la empresa inmobiliaria Grupo Geo.
Con máquinas derribaron la alambrada del campamento y arrasaron los cuartos asentados en un terreno de casi cuatro hectáreas, en las calles San Rafael Atlixco y Michoacán, colonia Guadalupe del Moral, colindante con la UAM-Iztapalapa.
La mayoría de la gente optó por sacar sus pertenencias mientras eran destruidas unas 276 viviendas precarias, hechas con madera, cartón y lámina, que albergaban a igual número de familias, según Catalina Ramírez, una de los líderes del asentamiento irregular.
La tensión prevaleció durante toda el día mientras el fuego consumía los restos de las viviendas, y aunque no hubo enfrentamiento directo, se reportaron dos lesionados leves: José Antonio Cortés Alvarez, primer secretario del juzgado 45 en materia penal, recibió una pedrada en la cabeza, y el operador de una máquina fue atendido de una cortada en una mano.
A mediodía varios colonos rodearon a un trabajador para impedir el avance de las máquinas, por lo que los granaderos se concentraron a la expectativa. En ese momento fue avivado el fuego en dos viviendas, aunque los desalojados responsabilizaron a los trabajadores de Geo e incluso a los granaderos.
Pertenecientes a la Confederación Agrarista Mexicana (CAM) y liderados supuestamente por el diputado local del PRI Humberto Serrano, los habitantes de El Gallito, donde llegaron a vivir desde 1998, argumentaban contar con un amparo, emitido el 23 de noviembre de 2000 por el décimo tribunal colegiado en materia administrativa del primer circuito, que los protegía contra cualquier desalojo. "Estas tierras son ejidales y son nuestras, porque somos habitantes de Iztapalapa", decían.
Por su parte, Roberto García González, representante legal de Grupo Geo, aseguró que el juzgado 45 en materia penal ordenó el desalojo para restituir la propiedad a favor de su cliente. El pleito legal, dijo, data de 1997, cuando la empresa acusó de despojo a Alberto Briones, colaborador del diputado Serrano.
Por la tarde, los habitantes de El Gallito -llamado así porque ahí estuvo una antena de la estación de radio 620- emprendieron una marcha hacia el centro de la ciudad, armados con palos, y pese a los conflictos viales que ocasionaron y la destrucción de un automóvil, no fueron atendidos en la sede del gobierno capitalino.