Ť Reunión de panistas y priístas con Creel y Gil en el Palacio de Covián; PRD, ausente

Nuevo cabildeo entre Ejecutivo y legisladores para destrabar el presupuesto y el reformón

Ť Optimismo de Fernández de Cevallos y Calderón; ''en los próximos días se comunicará algo bueno para el país'', dice el líder de los diputados blanquiazules Ť El tricolor, cauteloso

ALONSO URRUTIA

Otro encuentro en el Palacio de Covián entre legisladores de PRI y PAN, el secretario de Gobernación, Santiago Creel, y el secretario de Hacienda, Francisco Gil, acercó posiciones en torno al paquete presupuestal y la reforma hacendaria. Con matices, priístas y panistas hablaron de avances en la negociación, pero, según el tricolor, aún no hay nada concreto, pues persisten diferencias y dificultades.

Quien fue más optimista con el encuentro fue el coordinador de los senadores panistas, Diego Fernández de Cevallos: "mi opinión es que la reforma fiscal puede concluir pronto y bien; hay un buen desempeño de los grupos paralementarios, hay una buena relación con el Ejecutivo, pero por elemental sentido de responsabilidad no puedo adelantar pormenores, porque daría pie a muchas especulaciones".

Sin ningún representante del PRD en la mesa, el coordinador de los senadores priístas, Enrique Jackson; el líder de la bancada del PRI en la Cámara de Diputados, Rafael Rodríguez Barrera, y la presidenta de la mesa directiva de San Lázaro, Beatriz Paredes, comieron en las oficinas de Creel. Por los panistas llegaron Fernández de Cevallos y el coodinador de los diputados, Felipe Calderón.

El senador panista vaticinó: "es de esperarse que en los próximos días algo se comunique a ustedes y sea bueno para el país".

Enrique Jackson dijo que el encuentro fue uno más de los intercambios para detectar con más detalle dónde faltan los recursos. "Nos importan mucho los recursos para la educación pública superior; nos importan los recursos para el campo, para la salud".

Todo esto obliga a Hacienda a hacer números y a pensar en diversas opciones, y a los legisladores "también a medir las consecuencias y los alcances, los efectos de las decisiones, los costos que tienen algunas disposiciones fiscales que se pudieran contemplar, pero también los costos que pudiera tener que no haya recursos listos para atender programas en estados y municipios donde les hace falta muchos recursos".

Según Jackson, en la reunión se exploraron opciones de recaudación y "seguimos obviamente con muchas diferencias, con muchas dificultades, pues el tema de los impuestos no es fácil".

-ƑEn la reforma fiscal le darán el margen de acción que quería el gobierno federal para el presupuesto del 2002?

-Pues es lo que andamos buscando. A ver hasta dónde damos.

Entrevistado por separado, el senador priísta Humberto Roque Villanueva sostuvo que en el paquete presupuestal "se puede quedar perfectamente sin resolverse el tema del IVA. Lo que importa para los macroeconomistas y para el secretario de Hacienda es lo que se ha dado en llamar el mensaje a los mercados, es que no se aumente el déficit público, por encima del 0.65 que se tiene acordado".

A mi juicio, este podría ampliarse, pues todavía bajo la Presidencia de Ernesto Zedillo, con un crecimiento económico cercano a 7 por ciento, inflación menor a 10 por ciento, había un déficit fiscal de 1.17. "Hay un poco de mito de la Secretaría de Hacienda y de los neoliberales en asumir que el déficit fiscal no puede subir de 0.65 por ciento".

La urgencia -subrayó- no está en la reforma fiscal, sino en la aprobación del Presupuesto de Egresos del 2002, porque lamentablemente la Constitución no prevé los elementos conocidos en otros países como válvulas de escape o cláusulas de excepción que le permitan seguir aplicando a la nación y concretamente al gobierno, el presupuesto".