Ť Será netamente recaudatoria y afectará a los más necesitados: Coparmex y Caintra

Rechazan empresarios una reforma fiscal parchada

Ť Recurriremos a todos los medios para impugnar posible impuesto telefónico: Javier Lozano

ALFONSO GUTIERREZ Y ALEJANDRO GONZALEZ CORRESPONSALES

Dirigentes de la cúpula empresarial de Nuevo León se manifestaron contra la reforma fiscal que se va a aprobar en el Congreso de la Unión, pues dijeron que será netamente recaudatoria y se comportará como una miscelánea fiscal, no como una reforma impositiva integral.

En entrevista por separado, los presidentes de la Cámara de la Industria de la Transformación y el de la Coparmex manifestaron su descontento; argumentaron que lo que se apruebe afectará intereses de los más necesitados, así como a algunos sectores económicos.

Por su parte, Javier Lozano, ex presidente de la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel), señaló que las empresas del sector telefónico estarán atentas al desarrollo de la propuesta de un impuesto adicional a los servicios de telefonía fija, móvil y de interconexión y, en caso de ser aprobada, recurrirán a todos los recursos para impugnarla.

"Usaremos todas las medidas legales a nuestro alcance y que podamos interponer, porque se trata de una carga fiscal que atenta contra los usuarios y significa una afrenta contra el desarrollo de las telecomunicaciones en México", aseguró.

Explicó que en ninguna parte del mundo existe un impuesto de este tipo, y aclaró que, de aplicarlo, las inversiones planeadas por las empresas del sector -22 mil millones de pesos en los próximos cinco años- podrían ponerse seriamente en entredicho.

Eduardo Garza Fernández, presidente de la Cámara de la Industria de la Transformación (Caintra), declaró que por falta de consenso se retrasó la aprobación de la reforma fiscal, y ahora, al cuarto para las 12, aprobarán una parchada que afectará muchos intereses económicos, entre ellos los de los más necesitados.

Mientras, el presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de Monterrey, Arturo Garza y Garza, expresó que es una miscelánea fiscal que no cumplirá con los objetivos de promover la inversión y el empleo, y dijo que lo que deben hacer es aumentar la base gravable, fiscalizando la economía informal, la cual representa 40 por ciento de los contribuyentes actuales.

El presidente de Coparmex Nuevo León, Victor Zorrilla Vargas, expresó que la reforma fiscal que se aprobará en el Congreso de la Unión no llegará ni a eso, ya que prevé que por la falta de consenso resultará una simple miscelánea.

En entrevista, el representante de más de 5 mil empresarios de Nuevo León dijo que la reforma fiscal saldrá con parches, y solamente va a ser recaudatoria, por lo que previó que el gobierno va a obtener recursos adicionales mediante un impuesto indirecto, y consideró que la reforma no será factor de crecimiento para el empleo.

Indicó que este año no va a salir bien, el gobierno va a tratar de sacar provecho de algún impuesto en especial, y algunos de los sectores económicos serán afectados.

Mencionó que el empresariado nacional no está contento con el resultado que va a tener la reforma fiscal, ya que hubo mucho tiempo para aprobarla, y por protagonismos de los diputados no se pudo sacar adelante.

Apuntó que de aquí al 31 de diciembre, los legisladores van a trabajar como negros para sacar como resultado una miscelánea fiscal parchada.

Subrayó que a ver si el próximo año la reforma sale mejor, porque prevé que haya mayor consenso.

Con esta democracia, dijo, "tenemos que aprender a trabajar mejor para lograr un correcto crecimiento en la economía, y esto se lograría bajando el impuesto sobre la renta para estimular la inversión"; asimismo, se ampliará la base de contribuyentes.

En tanto, Roberto Ruiz Rubio, concesionario de Coca Cola en Querétaro, consideró que de aplicarse un gravamen a los refrescos, como se analiza en el Congreso de la Unión, el mercado de las bebidas gaseosas sufrirá una contracción de aproximadamente 18 por ciento, y consecuentemente, pondría en peligro la economía de poco más de 300 mil familias que dependen de la industria azucarera.

Además, hizo un llamado a los legisladores federales para que busquen otras alternativas de recaudación fiscal, en donde se mantenga la tasa cero en los refrescos, porque de lo contrario, advirtió, el precio de las bebidas gaseosas tendería a incrementarse de inmediato.