Ť Los comités de base, fundamento para que no haya acarreo o errores como en 1999, dice

Busca PRD evitar divisiones en lucha por la dirigencia

Ť La credibilidad del proceso de marzo dependerá de la instalación del aparato electoral

RENATO DAVALOS

Los perredistas, incluidos directiva, gobernadores y candidatos, buscan todavía un acuerdo que fije reglas internas de cara a la contienda por la dirigencia nacional del partido, para evitar ataques personales y ulteriores divisiones. La elección de marzo y la organización del proceso -más de 25 millones de boletas y la instalación de al menos 50 mil comités de base- planteará al PRD en un plazo perentorio un reto adicional, del que dependerá la credibilidad, informaron fuentes perredistas.

Los comités de base -por regla estatutaria- constituirán el fundamento para evitar que haya acarreos o que se repita la experiencia de 1999. Los electores estarán referenciados en la sección comicial, vinculada al comité, para evitar que una persona sufrague en dos o más lugares.

Además, entre los esfuerzos que los perredistas hacen en el ámbito interno resalta la posibilidad de que una vez registrados los candidatos haya uno o varios debates entre ellos, informaron las fuentes.

La comisión electoral, que se instalará junto con la de garantías a principios del próximo año, tendrá como tarea esencial la definición de los topes a los gastos de campaña.

Para entonces se prevé que esté resuelta la controversia que fue planteada por algunos perredistas en los máximos órganos electorales en contra de que se utilicen el padrón histórico y el nuevo.

Un punto fundamental del acuerdo entre candidatos, detallaron las fuentes, estriba en la fijación de reglas para evitar los ataques personales que derivarían en la división partidista. La búsqueda esencial trata de fijarse a partir de la elevación del debate interno que se avecina.

Sin embargo, los encuentros que gobernadores, directiva y aspirantes han tenido hasta el momento no han cristalizado en un acuerdo. Las reuniones se multiplicarán en los próximos días con la esperanza de que se fijen las reglas esenciales que eviten el descrédito recíproco de aspirantes.

De la instalación del aparato que se requiere para la elección de todas las directivas perredistas, comités de base, consejeros nacionales, estatales y delegados al congreso nacional -en un periodo de poco más de cuatro semanas- dependerá en buena medida la credibilidad del proceso, comentaron.