Justicia y perdón, bases de la paz, dice Norberto Rivera

KARINA AVILES

El arzobispo primado de México, Norberto Rivera Carrera, advirtió que no puede haber paz sin justicia. Debido a que la "justicia humana es siempre frágil e imperfecta, expuesta a las limitaciones y a egoísmos personales y de grupo", debe completarse con el perdón, subrayó.

En la homilía de fin de año, en la Catedral Metropolitana, el cardenal manifestó que el perdón "tiende más bien a esa plenitud de la justicia que conduce a la tranquilidad del orden y que pretende una profunda curación de las heridas abiertas.

"Para esta recuperación, para construir la paz, son esenciales ambas: la justicia y el perdón. No hay paz sin justicia, no hay justicia sin perdón", insistió. Dijo que lo anterior puede aplicarse tanto para las tensiones que afectan a los sujetos como para las de alcance más general y aun internacional.

Destacó que la acción de perdonar no se contrapone a la justicia porque no significa renunciar a las legítimas exigencias de reparación del orden violado.

El prelado apuntó que la paz se edifica cuando se establece la justicia "con base en derechos, deberes y cargas".