¤ Investigación de Profepa

Identifican 9 zonas forestales "críticas"

ANGELICA ENCISO L.

Casi 5 por ciento de actos ilícitos como tala ilegal de bosques y el tráfico clandestino de flora y fauna silvestres se asocia con delitos graves -narcotráfico y secuestro- y con bandas organizadas, asienta una investigación que realiza la Procuraduría Federal de Protección del Ambiente (Profepa) desde 1995.

El organismo precisa que en materia forestal hay nueve zonas "con características de ingobernabilidad" donde la tala clandestina está acompañada de resistencia social a la autoridad, se presentan delitos de gravedad como narcotráfico, robo de vehículos y secuestros. Por ello ha sido declarada asunto de seguridad nacional.

Destaca que sólo cuenta con 600 inspectores para todo el país.

"Ante los efectos de la globalización hay un posicionamiento de empresas forestales en el mercado nacional, lo que ha implicado dejar fuera de competencia a los productores", indica.

Las nueve áreas críticas que la Profepa identifica están en 11 estados: Sierra Tarahumara de Chihuahua; la reserva de la biosfera Mariposa Monarca, en Michoacán y estado de México; Santa María Ocotán, Durango; la región de Uxpanapa, Veracruz; Coyuca de Catalán, Guerrero; parques nacionales Zoquipan e Izta-Popo, en estado de México y Puebla; Sierra de Zempoala, Huitizilac, Ocuilán y Ajusco, estado de México, Distrito Federal y Morelos; Chimalapas, Oaxaca y Chiapas; la Selva Lacandona, Marqués de Comillas y Montes Azules en Chiapas, donde se interrelacionan crimen organizado, robo de vehículos, portación de armas prohibidas, secuestro, cohecho, cultivo de enervantes y colusión de autoridades con delincuentes, además de diversos delitos forestales.