Falleció Pablo Antonio Cuadra, ''un poeta siempre apegado al rigor de la palabra''

¤ Se dedicó a difundir la cultura de su país y creó una vasta obra literaria

CESAR GÜEMES Y AGENCIAS

Luego de atravesar por un largo periodo de enfermedad, falleció el poeta Pablo Antonio Cuadra a los 89 años a causa de un paro respiratorio. Poco antes de cerrar el 2001 el secretario de la Academia Nicaragüense de la Lengua, Francisco Arellano, anunció que la salud del escritor se encontraba en estado crítico, motivo por el cual Cuadra no salía de su residencia en Managua, ni siquiera para asistir a las sesiones de ese órgano colegiado.

El escritor Sergio Ramírez expresó: ''Nicaragua pierde a uno de sus grandes poetas del siglo XX. Cuadra fue un poeta siempre apegado al rigor de la palabra, y con excelencia literaria pudo recrear el mundo nicaragüense, algo que no es fácil''.

Familiares de Cuadra habían señalado en repetidas ocasiones que el autor de Poemas nicaragüenses vio agravados sus padecimientos desde que le practicaron una intervención quirúrgica en Costa Rica, en 1995.

El 3 de febrero de 2001, Pablo Antonio Cuadra ?miembro desde 1943 de la Academia Nicaragüense de la Lengua? recibió el grado de doctor honoris causa por la Universidad Americana de Nicaragua, y que el pasado 4 de noviembre cumplió 89 años. Desde los 19 años, se dedicó a difundir la cultura de su país y al trabajo de su vasta obra literaria.

Cuadra fue uno de los fundadores del Movimiento de Vanguardia en Centroamérica, dentro del cual destacó, además de poeta, como dramaturgo y prosista.

Sin días de ocio

Una de las últimas entrevistas que concedió, a la periodista Doriam Díaz, de la revista Viva, suplemento del diario La Nación, afirmó Cuadra: ''La corriente creadora me llevaba muy aprisa, por eso ahora estoy en proceso de revisar mi obra". Continúa, por su parte, Díaz: ''No permite que se le sugiera tomarse días de ocio: él trabaja a su ritmo, lento pero continuo; prueba de ello es que, en la edición de julio de la revista El Pez y la Serpiente (fundada por él en 1961), se publicó una colección de sus últimos poemas con el título El Nicán-Náuat. Para don Pablo Antonio, la poesía sigue siendo revelación y misterio. 'Un libro se presenta como por sorpresa. Es una serie de poemas ligados entre sí y que responden a la perfección que uno siempre busca', agrega mientras se anima más, y todo su cuerpo parece hablar de versos. 'Lo que impulsa a crear no es comprensible: proviene de las corrientes misteriosas de la creatividad. Uno mismo es parte de la sorpresa. El impulso es espontáneo y revelador como la anunciación de un ángel', detalla. Pese a todo, el trabajo poético es arduo para él. Después del momento de iluminación, viene el 'engavetamiento': Cuadra deja 'enfriar' los versos para volver a leerlos y, si es necesario, corregirlos. El poeta quiere mucho a Costa Rica, pero ?claro? más quiere a su propio pueblo, a sus nicas, y no pierde un instante para reiterarlo: 'He trabajado por una concepción más humana del nicaragüense, y esto se refleja en mi trabajo literario'".

Intentos de postularlo al Nobel

Gloria Guardia, narradora y escritora panameña, especialista en la obra del poeta, ha señalado a propósito de la importancia de Cuadra para las letras castellanas: ''Tengo ensayos sobre Pablo Antonio Cuadra, un libro sobre su pensamiento poético; Pablo realmente es una persona extraordinaria, un poeta tremendamente humano, uno de los más grandes de América. Pablo agradeció el hecho de que yo le dedicara el primer estudio profundo a su obra. Yo estaba en ese momento en Nueva York cuando lo escribí, en un curso de posgrado en la Universidad de Columbia.

''El libro se publica nada menos que en Gredos, que en ese momento la dirigía el gran poeta Dámaso Alonso; esta es una de las editoriales más prestigiosas de lengua española que se dedica a publicar precisamente ensayos de crítica literaria. Es un libro extenso. Cuando me posesioné en la Academia Colombiana, mi discurso de posesión fue también sobre la poesía de Cuadra y en esta instancia hablé sobre la palabra mito-poética en la obra de Pablo Antonio Cuadra."

Nacido en Managua en 1912, a Cuadra se le recuerda, entre otros, por sus libros Poemas nicaragüenses, El jaguar y la luna, Cantos de Cifar y Por los caminos van los campesinos, en el que narra la partida de los hombres del campo a la guerra civil.

En su faceta de periodista, Cuadra dirigió muchos años el diario La Prensa, de Managua, y el suplemento La Prensa Literaria. Según la agencia Reuters, el poeta renunció a la dirección del rotativo en 1997 después de ciertas diferencias con los propietarios de ese medio.

Los intelectuales nicaragüenses intentaron varias veces postularlo como candidato al Nobel de Literatura, pero sus gestiones no prosperaron.