Directora General: Carmen Lira Saade

México D.F. Miércoles 23 de enero de 2002

Cultura

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Ť Mejora de imagen, requipamiento y reforzamiento estructural

Rescate de un legendario espacio escénico

ARTURO JIMENEZ

Reforzamiento de algunas de sus estructuras y de diversas medidas de seguridad, reducción de mil 500 a mil 300 butacas, restauración de decorados, columnas, esculturas, plafón central y fachada y requipamiento del audio, la iluminación y el escenario, figuran entre las obras que rescatan del deterioro al Teatro de la Ciudad de México, el legendario Esperanza Iris.

Otras obras importantes son corrección de los problemas de isóptica (apreciación adecuada del escenario por todos los espectadores), ampliación del foso de atrilistas para dar cabida a más de 60 músicos, en lugar de los 30 originales, cambio de toda la tramoya de la mecánica teatral y dotación de nuevos servicios como cafetería, baños para minusválidos y estacionamiento.

Los andamios metálicos para trabajar en los palcos ya fueron retirados, pero el más grande, instalado en el escenario, aún domina el interior, aunque pronto será desmantelado.

Decenas de trabajadores de la construcción y restauradores del Instituto Nacional de Bellas Artes laboran día y noche para poder concluir los últimos ''detalles". Al final se reinstalarán las butacas y las alfombras.

Mejor acústica natural

Durante un recorrido encabezado por el coordinador general del Instituto de Cultura de la Ciudad de México, Alejandro González Durán, éste destacó el mal estado en el que se encontraban los palcos, que fueron apuntalados con estructuras de acero.

Otras obras que mencionó son: más camerinos, cambio de las plantas eléctricas de emergencia, nuevos pasillos para una rápida evacuación y ampliación del tamaño de los tres foyer, en uno de los cuales vivió Esperanza Iris y que ahora albergarán cafeterías.

Al escenario, que sólo contaba con dos ''trampas" de un metro cuadrado, se le dotó de cinco más, las cuales permitirán mayores recursos escénicos. También se hizo un estudio de la geometría del teatro para que el sonido no rebotara o se ahogara y así contara con la mejor ''acústica natural" posible, además de un buen ''sonido artificial".