Jueves 24 de enero de 2002
La Jornada de Oriente publicación para Puebla y Tlaxcala México

 
n Melquiades Morales reconoce la incapacidad de su gobierno para afrontar el problema
Pese a la solidez económica, aún no hay mejoría de la gente en extrema pobreza: Fox

Ignacio Juárez Galindo n

El presidente de la República Mexicana, Vicente Fox Quesada, reconoció que pese a la solidez de la economía nacional y su posicionamiento a nivel internacional -"somos la economía más grande de habla hispana"-, dicha situación no ha podido mejorar el nivel y la calidad de vida de 40 millones de mexicanos que están por abajo de la línea de la pobreza. Ante esta situación, el presidente expuso que los tres "retos fundamentales" de su administración son disminuir la pobreza, mejorar la educación y avanzar en seguridad pública y el estado de derecho.
Asimismo, argumentó que pese a los problemas económicos ocurridos el año pasado, la economía interna del país "creció de buena manera", no así el sector exportador. Empero, apuntó que, según varios indicadores internacionales, hacia la mitad del presente año, principalmente en el segundo semestre, "las cosas regresarán al crecimiento".
Por su parte, el gobernador Melquiades Morales Flores también reconoció la incapacidad de su gobierno para abatir los problemas de pobreza y marginación que presentan 147 municipios del estado -el 67 por ciento del total-, por eso llamó a los integrantes del sector privado a "jugársela con los pobres" para que adopten una de las 53 microrregiones que existen la entidad y que reportan niveles miserables de vida, según la Secretaría de Desarrollo Social.
Durante una comida entre los representantes del sector productivo de Puebla y Vicente Fox, efectuada en Casa Puebla, más de 30 empresarios poblanos -encabezados por el industrial automotriz José Valderrama- respondieron de inmediato el llamado de Melquiades Morales, y levantando la mano se comprometieron a adoptar una microrregión. Dicha situación provocó la sorpresa y reconocimiento de los jefes de los gobiernos federal y poblano. ıste último sólo alcanzó a decirle al Ejecutivo federal: "Señor presidente, como ve, mis paisanos son muy salidores".
En su intervención, Vicente Fox Quesada ofreció una visión optimista para la recuperación del país. En un principio realizó un recuento de los logros económicos y el posicionamiento de México en el ámbito internacional. Dijo que actualmente somos la economía número nueve en tamaño en el mundo entero, es decir, la más grande en toda Latinoamérica e Iberoamérica. Anualmente intercambiamos 350 millones de dólares y nuestra economía está respaldada por una moneda bajo sistema de flotación que lleva cuatro años estable.
Apuntó que la inflación del año 2001 concluyó en 4.4 por ciento y las tasas de interés bajaron del 18 a 6 por ciento. Ambas situaciones, agregó, nos colocan cerca de la meta para el año próximo de igualar dichos rubros a los parámetros que existen en Estados Unidos y Canadá.
Empero, Fox indicó que pese a los avances y solidez de la economía existe una pregunta: "¿Por qué (dicha estabilidad) no puede responder precisamente a mejorar el nivel y la calidad de vida de esos 40 millones de mexicanos y mexicanas que están por debajo de lo que se ha establecido como línea de la pobreza? 18 por ciento están por debajo de la línea de extrema pobreza".
Para dar respuesta, el Ejecutivo federal sostuvo que existen tres principales retos que se deberá sortear para "estar en la arena de las grandes economías". Uno de éstos, mencionó, es abatir los niveles de pobreza, para lo cual se creó un sistema financiero que permita acercar a esos 40 millones de personas a los servicios de ahorro, cajas populares y microcréditos. Además, se puso en marcha el programa de microrregiones que, en coordinación con los estados, busca que la población más marginada y pobre tenga oportunidades de empleo, educación y salud y pueda poner en marcha su propio negocio.
En cuanto al reto económico, subrayó que la prioridad para enfrentar los problemas de 2001 fue "salvaguardar las variables fundamentales", lo cual se cumplió y se logró la estabilidad económica. Sin embargo, el mandatario federal aceptó que "nos quedamos muy cortos" en cuanto a la generación de empleos y oportunidades.
De ahí, puntualizó, que este año la prioridad será proteger el empleo y generar fuentes de ingreso, por lo que se fortaleció los programas de Empleo Temporal, de Entrenamiento y Capacitación y los apoyo a proyectos productivos. A través Nacional Financiera se impulsará más 150 mil empresas, entre pequeñas y medianas, mientras que el Banco de Desarrollo Rural se reestructurará y mediante el sistema de cooperativas agrícolas podrá haber apoyos a la gente del campo.
Sin embargo, Carlos Abascal Carranza, secretario del Trabajo y Previsión Social, informó que para 2002 sólo se podrá generar 300 mil empleos, pese a que hace un año se perdió 382 mil fuentes de empleo.
Abundó que para reactivar la economía y generar empleos, mediante fórmulas mixtas de participación, fondos fiscales para incentivos e inversión privada se pondrá en marcha "programas muy agresivos" de infraestructura carretera, plantas de tratamiento, puertos y aeropuertos. En cuanto a Pemex y Comisión Federal de Electricidad, se utilizará la fórmula de "Pidiregas" para atraer inversiones que sobrepasarán los 20 mil millones de dólares.
Más adelante, tocó el tema de la reforma fiscal y reconoció que las decisiones adoptadas por los legisladores "mejorarán estructuralmente el sistema fiscal del país". Argumentó que al inicio del sexenio el ingreso total fiscal era de 10.8 por ciento, el cual era destinada a la inversión, pero para este año será de 13 por ciento.
Por último, Vicente Fox Quesada refirió que el asunto de la seguridad pública es el tercer reto a enfrentar. De entrada, aceptó que en este tema "tenemos mucho que andar" y existe un problema básico de coordinación de esfuerzos, ya que hay "demasiadas instituciones que tienen que ver con el tema y demasiada dispersión del problema". A manera de defensa, dio a conocer que se construye un subsistema de prevención y de policía y otro de procuración de justicia.
Respecto a los avances en esta materia, informó que se incrementó en 150 por ciento la destrucción de plantíos de mariguana y amapola, se ha detenido a más de 4 mil 500 capos relacionados con el narcotráfico, encargados de direcciones o niveles superiores de las organizaciones criminales. Pero el Ejecutivo federal sostuvo: "Aun con todo esto, la verdad es que estamos muy insatisfechos con los resultados.