Directora General: Carmen Lira Saade

México D.F. Viernes 25 de enero de 2002

Mundo

Ť Las instalaciones atacadas, del talibán y no de Al Qaeda, admite Richard Myers

Mueren 15 combatientes en bombardeo de EU; fueron detenidos 27 milicianos afganos

Ť Todavía hay focos de resistencia integristas, dice Donald Rumsfeld, jefe del Pentágono

REUTERS, AFP, DPA Y PL

Kabul, 24 de enero. Quince combatientes afganos murieron y otros 27 fueron detenidos, luego de que la aviación estadunidense bombardeó dos instalaciones sospechosas del talibán y Al Qaeda en el sur de Afganistán, y la entrada en acción de fuerzas especiales estadunidenses en la zona.

El ataque, en el que un soldado estadunidense resultó con heridas leves, ocurrió a unos cien kilómetros al norte de Kandahar, donde se constató que se trataba de instalaciones del talibán y no de extranjeros de Al Qaeda, reconoció el jefe del estado mayor conjunto estadunidense, Richard Myers.

Voceros del Pentágono afirmaron que aviones AC-130 destruyeron un escondite de armas y municiones en dos campos, sin encontrar a dirigentes de Al Qaeda como se creía. En cuanto a los 27 capturados, al parecer la mayoría milicianos afganos, fueron trasladados a la base de Kandahar.

El secretario estadunidense de Defensa, Donald Rumsfeld, aseveró que todavía quedan "focos" de resistencia de combatientes talibanes y de la organización islámica de Osama Bin Laden, y que seguirán persiguiéndolos hasta el final.

La agencia afgana Aip reportó que los bombardeos se extendieron hasta Khost, en el este del país y cerca de la frontera con Pakistán, con ataques sobre las montañas de Chargoti Ghar, donde Washington sospecha hay combatientes enemigos.

Mientras Washington liberaba este día 217 millones de dólares en activos del ex régimen talibán que mantenía congelados desde 1999, la FBI expresó su preocupación sobre la posibilidad de que miembros de Al Qaeda hayan logrado escapar a Irán. Pero de Bin Laden dijo no saber si vive.

El jefe del gobierno interino afgano, Hamid Karzai, consiguió por su parte la promesa en Pekín del primer ministro chino, Jiang Zemin, de un aporte de 150 millones de dólares para la reconstrucción de su país, y a cambio se comprometió a cooperar para luchar contra el separatismo musulmán en el este de China.

Karzai partió luego a Tadjikistán, donde afirmó que su gobierno otorga a Rusia una gran participación en la estabilidad de Asia central y espera un activo rol en la transición afgana, así como en la lucha contra el terrorismo y el narcotráfico.

"Hay razones para preocuparse" por la seguridad en Afganistán, declaró en Kabul Frances Vendrell, adjunto del representante especial de Naciones Unidas, Lajdar Brahimi, y expuso que hay cientos de miles de personas con armas, con varios comandantes que no responden al mando central, y de allí que sus fuerzas se hayan enfrentado últimamente en el norte afgano.

En la víspera de la llegada a Afganistán del secretario general de Naciones Unidas, Kofi Annan, quien pondrá en marcha la Loya Jirga o gran asamblea de notables, Vendrell negó que existan "evidencias concretas" de que Irán esté armando a alguna facción afgana para desestabilizar.

Annan, en escala en Pakistán, pidió que se mantenga un apoyo internacional prolongado para la nación centroasiática.