Bush se dice decepcionado de Arafat; lo acusa de fomentar el terrorismo
Ť No descarta Powell sanciones políticas y diplomáticas Ť Pide a líderes árabes presionar al líder de la ANP para castigar a traficantes de armas Ť La postura de EU apoya la violencia, no la paz: dirigente de la OLP
DPA, AFP Y REUTERS
Washington, 25 de enero. El gobierno estadunidense endureció hoy su postura hacia palestinos, al responsabilizar directamente al presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Yasser Arafat, de permitir la escalada del terrorismo anti israelí. Incluso, el secretario de Estado estadunidense, Colin Powell, habló de la posibilidad de adoptar una serie de sanciones diplomáticas y políticas, que incluirían el cierre de las oficinas en Washington de la Organización para la Liberación de Palestina. Esto ocurría al tiempo que Israel reaccionaba con ataques en los territorios palestinos a dos atentados suicidas ocurridos esta semana.
El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, acusó este viernes al líder de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) de "incrementar el terrorismo", mientras aviones F-16 israelíes bombardearon la noche de hoy posiciones palestinas en las ciudades de Gaza y Tulkarem (Cisjordania) en respuesta al atentado suicida cometido horas antes en Tel Aviv que dejó un saldo de más de 20 heridos.
"Estoy decepcionado de Yasser Arafat", dijo Bush a la prensa en Portland, Maine, al ser interrogado sobre el fracaso del líder palestino para castigar a los funcionarios de su gobierno que según Washington y Tel Aviv están implicados en la frustrada operación de tráfico de armas del buque Karine A.
Arafat "debe hacer un completo esfuerzo para detener el terrorismo en Medio Oriente", dijo Bush. "Para que haya paz allí debemos detener la violencia. Negociar las armas interceptadas en un buque no es luchar contra el terrorismo, es fomentarlo", aseguró.
Los comentarios de Bush, realizados desde el buque guardacosta Tahoma, tuvieron lugar al tiempo que el secretario de Estado, Colin Powell, afirmaba que Estados Unidos considera un "abanico completo" de pasos diplomáticos y políticos respecto a Arafat y que no descarta un posible enfriamiento de las relaciones con la ANP.
"Estados Unidos tiene un completo rango de opciones disponibles de naturaleza política y diplomática", dijo Powell tras su encuentro con el canciller interino afgano, Abdullah Abdullah, en el Departamento de Estado.
Se suspendería misión de Zinni
Como mínimo, la administración Bush está considerando la suspensión de la misión de su enviado especial a Medio Oriente, Anthony Zinni, y acusar de esto a Arafat, según fuentes diplomáticas estadunidenses, las cuales han discutido cerrar las oficinas de la ANP en Washington.
El jefe de la diplomacia estadunidense agregó que Bush presentó a líderes árabes evidencias de que la ANP está involucrada en la frustrada operación de tráfico de armas del buque Karine A y los urgió a presionar a Arafat para que tome medidas contra los implicados. El mandatario envió cartas detallando el caso a los líderes de Egipto, Jordania y Arabia Saudita, afirmó Powell. "La idea es llevar" a los líderes árabes "a presionar a Arafat para que actúe", explicó.
Ante esta situación, el representante de la Organización para la Liberación de Palestina en Washington, Hassan Abdelrahmán, señaló que "lamentamos esta posición que deja patente un alineamiento total con el punto de vista israelí", en declaraciones a la televisión satelital de Qatar, Al Jazeera.
"Desgraciadamente, la administración estadunidense presta atención a los elementos extremistas en su seno y al grupo de presión israelí que impulsan el aumento de la violencia", agregó.
En su opinión, la ANP esperaba que Bush "se preocupara de los crímenes cometidos por Israel contra el pueblo palestino para que la posición estadunidense fuese creíble". "Si Estados Unidos avala el proyecto de Sharon, encaminado a hacer estallar el proceso de paz, eso quiere decir que apoya el camino de la violencia y de la tensión y no el de la paz", concluyó.
Por su parte, el ministro del Exterior español, Josep Piqué, afirmó en Madrid que la Unión Europea seguirá considerando a Arafat como el "legítimo representante" del pueblo palestino, pese a que Israel ya no lo considere un interlocutor válido.
Respecto a la posibilidad de que la Casa Blanca rompa relaciones con Arafat, Piqué se limitó a decir que es una "especulación".
Mientras, aviones F-16 israelíes bombardearon este viernes por la noche posiciones palestinas en las ciudades de Gaza y Tulkarem (Cisjordania) en respuesta al atentado cometido horas antes en Tel Aviv que dejó 20 heridos, tres de ellos graves, mientras el autor, un joven de 17 años, miembro de la Jihad Islámica, murió según sus allegados.
Los aviones bombardearon en dos ocasiones un complejo de seguridad palestina, el campo Ansar, frente al cuartel general de Arafat en la ciudad de Gaza.
Repudio palestino
La dirección palestina repudió los bombardeos y dijo que "considera al primer ministro israelí, Ariel Sharon, responsable del aumento de la violencia en momentos en que los palestinos realizan gigantescos esfuerzos por consolidar el alto al fuego e impedir cualquier acción militar", indicó en un comunicado, publicado por la agencia Wafa.
Los dos bombardeos sobre el campo causaron por lo menos 12 heridos leves, en su mayoría policías, indicaron fuentes médicas palestinas. Minutos después en Tulkarem, al norte de Cisjordania, un F-16 israelí disparó un misil sobre un edificio oficial, según fuentes de seguridad. El misil alcanzó y destruyó un edificio cercano a la sede del gobernador, la Mukata, que anteriormente fue blanco de una incursión aérea el 18 de enero.
Un portavoz israelí confirmó el bombardeo del edificio de Tulkarem. Con respecto al bombardeo sobre Gaza, el portavoz explicó que el blanco era "un estacionamiento de vehículos blindados de la Fuerza 17", la guardia de Arafat.
Tras el atentado en Tel Aviv, cerca del lugar de la explosión fue hallada una bolsa con una ametralladora y gran cantidad de municiones. Las autoridades israelíes investigan si pertenecía al terrorista suicida. Asimismo, la policía detuvo a un palestino de Hebrón que trataba de huir de la zona del atentado.
Ante advertencias urgentes del servicio secreto israelí sobre la inminencia de nuevos atentados, casi todas las grandes ciudades israelíes se encuentran en máximo estado de alerta.
Tan sólo pocas horas antes del atentado, las tropas israelíes y unos 20 tanques se retiraron de A-Tireh, en la ciudad cisjordana de Ramallah. Los soldados israelíes ocuparon ese barrio hace una semana, después de que un extremista palestino matara en la ciudad de Hadera, al norte de Israel, a seis personas que asistían a una fiesta religiosa judía.
Así las cosas, 52 oficiales y soldados israelíes reservistas anunciaron su negativa a participar en "la operación y la ocupación de las zonas palestinas" en el futuro, en una petición publicada por la prensa este viernes.
"Seguiremos sirviendo en el ejército cuando se trate de defender al Estado de Israel pero no en tareas de opresión y de ocupación de los palestinos", escribieron los militares de reserva.
Casi todos los contestatarios, que firman con sus nombres y grados, que van desde un soldado de segunda clase hasta lugarteniente, pertencen a unidades de combate, como los paracaidistas y las unidades de infantería elite.
Es la primera vez desde el inicio de la intifada, el 28 de septiembre de 2000, que se publica una petición como ésta, lo que a consideración de los analistas, constituye un verdadero llamado a negarse a servir en los territorios palestinos.