Prerrogativas del IFE, atractivo para conformar partidos políticos
Ť Se recurre a viejas prácticas para conseguir afiliados
MIREYA CUELLAR
La industria electoral debe de ser un buen negocio. Tamalizas, rifa de aparatos electrodomésticos, reparto de despensas... a muchas de las viejas y muy conocidas prácticas que se consideraban privativas del PRI están recurriendo quienes buscan que el Instituto Federal Electoral (IFE) les otorgue un registro condicionado como partido político y, por tanto, subsidio público.
Y es que más allá de que vayan a permanecer o no en la lucha política, obtener el registro puede ser redituable. La fórmula consiste en invertir entre 3 y 7 millones de pesos para afiliar a los 77 mil 400 ciudadanos ?en teoría militantes? que exige el IFE, con la expectativa de recibir casi 20 millones de pesos como prerrogativas al final de este año y triplicar esa suma durante el próximo, cuando habrá elecciones federales para renovar el Congreso.
El IFE cuenta con una bolsa de 117 millones 499 mil 839 pesos, que serán repartidos entre agosto y diciembre de 2002 a las agrupaciones que obtengan registro como partido. El próximo año les tocaría más, pero si no refrendan su registro en las urnas -deben alcanzar 2 por ciento de la votación en las elecciones de 2003- no hay problema, ya que automáticamente desaparecen, porque pierden la personalidad jurídica; sin embargo, los dirigentes pueden repartirse los bienes adquiridos con los recursos públicos que recibieron, y el instituto ya no tiene facultades para pedirles cuentas.
Cuando el pasado 31 de julio de 2001 venció el plazo establecido en la ley para notificar al IFE la intención de constituirse en partido político, 52 organizaciones políticas se anotaron, desde Socialdemocracia, de Gilberto Rincón Gallardo, que se quedó en 2000 a unos cuantos votos del registro, hasta algo que inscribieron como Partido Pan Blanco Real, cuyo domicilio -cuando menos el ofrecido al IFE- no existe.
Desde entonces, buena parte de quienes manifestaron intención han desistido ante la dificultad de efectuar las 100 asambleas distritales (con 300 afiliados) o 10 estatales (con la participación mínima de 3 mil militantes por entidad) que les exige el IFE, cuyo plazo para realizarlas vence este mes.
Quienes sí pudieron hacerlas deberán organizar -también antes de que termine enero- una asamblea nacional constitutiva y contar con un mínimo de 77 mil 460 afiliados inscritos en el padrón electoral.
"Motivación de la gente"
En la organización de asambleas y recolección de afiliados han estado "trabajando" algunas organizaciones. Los reportes de los observadores enviados por el IFE a las asambleas señalan que la agrupación política Movimiento de Acción Republicana, encabezada por el empresario Francisco de Paula León, y el Partido Popular Socialista (PPS), que en el pasado ya contó con registro, realizaron rifas de electrodomésticos y repartieron alimentos para "motivar" a la gente a participar en sus reuniones.
En la asamblea distrital que efectuó el 16 de diciembre pasado en el parque Las Américas de la colonia Doctores de la capital, el PPS repartió despensas. Los asistentes tuvieron que hacer cola en dos ocasiones; primero, con su credencial de elector en la mano, ante una mesa donde después de firmar la carta de afiliación recibían un boleto rojo que, en otra fila, podían cambiar por una despensa.
Un kilo de arroz, un litro de aceite, una bolsa de sal, un jabón de pastilla, una pequeña lata de chiles jalapeños, una bolsa de frijol y un kilo de azúcar recibieron los ancianos y las señoras que con sus niños en brazos o de la mano hicieron fila para convertirse en militantes del partido que fundó Vicente Lombardo Toledano.
"Es un regalo que está haciendo la Alianza Nacional de Trabajadores a aquellas personas que voluntariamente decidan afiliarse. No es a cambio de su afiliación, es un estímulo", intentó explicar Néstor García Sánchez, oficial mayor del PPS y animador de la asamblea, quien justificó la situación argumentando que los partidos "grandes" (PRI, PAN y PRD) tuvieron que pagar a la gente durante la elección de 2000 para que aceptara ser representante de casilla.
-¿O sea que todos los partidos tienen que comprar lealtades?
-No, noooo. Desgraciadamente el sistema se presta para la comercialización. Hay partidos empresa, como el Verde Ecologista, propiedad de una familia. Ustedes deberían ver eso, nosotros estamos muy lejos de esa situación. No somos una familia haciendo negocio con un instituto político ?agrega García Sánchez.
"Rifas, sí; tamalizas, nunca"
El empresario Francisco de Paula León, promotor de la campaña de Vicente Fox a la Presidencia de la República en 2000 y hoy alejado del círculo de Los Pinos, reconoce: "en el Movimiento de Acción Republicana hicimos fiestas, rifas, pero no tamalizas; eso es muy feo. Nunca dimos tamales, y mucho menos acarreamos gente. Es el reporte del IFE de una asamblea, pero realizamos 120; es un reporte mentiroso y ya lo impugnamos".
Sin embargo, la Alianza Republicana, que encabeza el priísta Jaime Miguel Moreno Garavilla, y que también quiere obtener registro para un nuevo partido político, acusa a la mayoría de quienes están en la puja, especialmente a Francisco de Paula, de valerse de métodos poco éticos para hacerse de afiliados.
Manuel Granados Covarrubias, secretario general adjunto de dicha alianza, dice que sólo ellos optaron por el IFE como instancia certificadora en sus asambleas, ya que los demás prefirieron recurrir a los notarios, porque si bien el IFE da fe de manera gratuita y los notarios cobran entre 10 y 15 mil pesos por reunión, el órgano electoral "es muy estricto".
Al notario, "como cobra, no le interesa si realmente hay o no el número de personas que exige el IFE, con que le presenten las hojas de afiliación le es suficiente. El certifica que están las 300 afiliaciones, aunque no estén reunidas las 300 personas, y tampoco le interesa cómo fue que se obtuvieron las firmas o si en las asambleas se hicieron rifas o se repartieron despensas".
Lo que nació en 1994 como la Cruzada Democrática por el Sufragio Efectivo para "observar" la elección como grupo "ciudadano" ajeno a filiaciones políticas es la organización "madre" de quienes pretenden obtener registro, como Alianza Republicana.
Salvador Ordaz Montes de Oca, también con un pasado ligado al PRI y quien ahora encabeza el Partido Liberal Mexicano ?cuya base social es un grupo de masones?, confiesa: "nosotros estamos pariendo chayotes; nuestras oficinas son las más modestas, porque aquí no hay prohombres ni riquezas. Hay quienes rifan refrigeradores o electrodomésticos, nosotros no, y no porque no queramos, sino porque para eso hay que tener dinero. De nuestra parte sólo tenemos la historia".