Ť El viernes comenzará la temporada de la OSN
Diemecke: los músicos deben ser escuchados para evitar esas bombas
CARLOS PAUL
Escuchar y respetar la opinión de los atrilistas cuando de música se trata es uno de las lineamientos del director titular de la Orquesta Sinfónica Nacional (OSN), Enrique Arturo Diemecke.
En referencia al reciente conflicto de la Orquesta Filarmónica de la Ciudad de México (OFCM), expresa que no está muy enterado de lo que sucede y que deben ser ''ellos mismos los que deben resolver ese problema".
Sin embargo, añade: ''A lo que invito siempre es a escuchar a los músicos. Creo que ellos son los expertos. Estudian durante muchísimos años, realizan audiciones de oposición para entrar a las orquestas y para hacer su trabajo deben ser muy dedicados.
''Muchas veces se les toma simplemente como trabajadores, por lo que su opinión no es respetada ni escuchada; entonces se llega a un punto caótico y por eso resultan esas bombas, porque no se les escuchó cuando se debía."
Diemecke considera que ''el diálogo siempre será lo más adecuado y que lo esencial es seguir haciendo música, así como darles el apoyo a esos músicos para que continúen haciéndola", más en esta urbe que tiene 20 millones de habitantes.
Más orquestas para más público
Como ejemplo, el director señala: ''He trabajado en países como Nueva Zelanda, que tiene 3.5 millones de habitantes y existen seis orquestas sinfónicas. Si existe un país con esas condiciones, por qué aquí una delegación que tenga 3.5 millones de personas no podría también tener seis orquestas sinfónicas". En una ciudad como la nuestra, opina Diemecke, ''deberíamos tener un montón de orquestas", pues existe el público para ello.
''En mi caso -añade- me concentro en lo que sucede en la OSN, pues todo lo que haga la agrupación, bueno o malo, repercute en las orquestas del país y lo que le sucede a otras orquestas también nos afecta de alguna manera. Por eso nos preocupa una situación como ésa (la de la OFCM), pues no queremos que ningún músico tenga que vivir circunstancias infelices".
Respecto del mecanismo para estructurar un programa musical, ''en la OSN tenemos un consejo de programación". Lo que se hace es que "primero recolecto y escucho las ideas de los músicos, ellos dan una pauta de lo que quieren tocar; luego como director artístico compagino y pongo en orden esas ideas. Después junto con el consejo y el director del instituto (Nacional de Bellas Artes) nos ponemos de acuerdo en los lineamientos musicales".
En esta ocasión, será con la Cuarta sinfonía de Mahler, que la OSN dirigida por su titular Enrique Diemecke comenzará su temporada de Conciertos de Primavera 2002, con el título Música y magia, el viernes 1o. de febrero, en el Palacio de Bellas Artes.