Martes 29 de enero de 2002
La Jornada de Oriente publicación para Puebla y Tlaxcala México

 
Salud

La cruda

n Antonio Cruz López

La cruda es una expresión mexicana que describe el estado posterior a la toxicofilia etílica o borrachera, causa de embriaguez con efectos tóxicos y pérdida de la consciencia; correctamente se llama resaca y a los médicos nos molesta atenderla como enfermedad de urgencia. La borrachera de ocasión o accidental no es el alcoholismo enfermedad, este conlleva la reiterada ingesta de bebidas alcohólicas que repercute negativamente en la vida individual, familiar, laboral y social de quien la sufre. La tolerancia al alcohol es individual, se afirma que 0.8 gramos por litro en sangre es la dosis infraclínica; sus efectos siempre son inmediatos, aunque se afirme lo contrario. El alcohol etílico es un componente de carbono, hidrógeno y oxígeno, que al contacto con un ácido da un éster y agua; una parte se absorbe en el mismo estómago y el resto en el intestino delgado, si es poca la cantidad, un aperitivo estimula la secreción gástrica, da movilidad intestinal y produce sensación de calor. Si la ingesta es mayor, el fenómeno es contrario, irrita la mucosa gastroentérica, inhibe sus secreciones y actúa sobre el sistema nervioso frenando sus funciones, hay excitación y euforia dentro de una lucidez aparente, pero hay anestesia, la solución de problemas matemáticos se dificulta, se retardan los reflejos, se disminuye la precisión y la agudeza visual. Si la ingesta es elevada, se observa depresión y ataxia, es decir, imprecisión, incordinación, pérdida del equilibrio, somnolencia, el calor que se siente es falso, porque la vasodilatación origina pérdida del calor corpóreo al deprimirse el centro termorregulador, por ello es que un ebrio que se queda dormido a la intemperie puede morir por baja temperatura, se puede llegar al coma y a la muerte. El alcohol oxidado en el organismo produce 7.1 calorías por gramo, pero no es alimento, por que se oxida muy rápido y no se almacena.
Daré a usted cuatro reglas de oro para menguar una cruda: 1. Nunca inicie una ingesta de alcohol con estómago vacío. 2. No tome sin comer, cada copa acompáñela de un vaso de agua, el alcohol deshidrata. 3. Si tomó ocho o más horas y no pudo intercalar agua, al llegar a casa tome un vaso grande de naranjada y deje otro cerca. La acción tóxica del alcohol libera adrenalina, ésta le causará taquicardia y molestias de resaca, en la madrugada bajan los niveles de glucosas, se repondrá con el vaso que dejó al lado. Perdió agua y electrolitos o sales, por tanto si la sed lo incomoda tome dos vasos de leche y dos botellas de líquido energético, hoy tan en boga. 4. Si nada de esto pudo hacer, despierta herido por la luz solar, dolor de cabeza lacerante, deprimido, tiene náusea, siente padecer a la vez parálisis cerebral, cáncer y menopausia, ¡cálmese, tiene resaca! Tome un té de menta o de jengibre, prepare un litro de agua en el que disuelva dos cucharadas grandes de azúcar, media cucharadita de sal, una pizca de bicarbonato y una tableta de potasio soluble, tómelo a sorbos, prepare unas migas para el desayuno, un par de huevos asados al comal y salga media hora a caminar o correr, el ejercicio hace a su linfa circular y evita que retenga toxinas. La cruda es una consecuencia del etilismo agudo, puede disminuirla o menguar sus estragos si ha seguido mis consejos, no la puede evitar, excepto que sea moderado cuando tome, de otra manera sufrirá la cruda sin piedad.