Presenta en Monterrey el Programa de Desarrollo Regional Frontera Norte 2001-2006

Propone Fox Quesada alcanzar un TLC plus con EU y Canadá

El proyecto plantea la interconexión energética, el control de flujos migratorios y profundizar en la integración Es el complemento del PPP, sostiene En marzo, nueva reunión con Bush

JUAN M. VENEGAS Y DAVID CARRIZALES ENVIADO Y CORRESPONSAL

Monterrey, NL, 13 de febrero. Con la presentación del Programa de Desarrollo Regional para la Frontera Norte, que plantea, entre otros objetivos, la "interconexión energética con Estados Unidos", el control de los flujos migratorios de México y Centroamérica, y "profundizar en la integración" con Estados Unidos y Canadá, el presidente Vicente Fox Quesada confirmó hoy aquí su próximo encuentro ?el séptimo en poco más de un año? con su homólogo estadunidense George W. Bush.

"Vamos a hacer un corte de caja, un recuento de los avances que ha habido en la relación bilateral y a plantearnos soluciones" a problemas inmediatos, explicó Fox Quesada acerca de la reunión con George W. Bush, que se realizará el 22 de marzo en el marco de la Conferencia Internacional para el Financiamiento del Desarrollo, que empezará en la ciudad de Monterrey el 18 de marzo.

Confianza plena

Confiado, el jefe del Ejecutivo federal dijo a los gobernadores de los estados fronterizos reunidos aquí, que de la entrevista con Bush seguramente saldrán "importantes decisiones para cumplir los propósitos, metas y objetivos de este plan de desarrollo".

Más aún, el mandatario mexicano señaló que el avance de este programa será el complemento del Plan Puebla-Panamá (PPP), que pretende atender la otra parte de nuestro país: "los estados del sur-sureste mexicano, cuyas condiciones de desarrollo son muy inferiores, comparativamente, con la dinámica que vemos en las entidades fronterizas del norte".

Este "esfuerzo integrador", explicó, es de un "altísimo valor" para el país, pues "para que funcione con verdadera eficacia el plan de desarrollo de la frontera norte es importante atender el sur-sureste, y por eso la puesta en marcha del PPP, que pretende arraigar y generar oportunidades para los ciudadanos que viven en esa parte del país", y poner un freno "al problema creciente de la migración de Centroamérica en su camino hacia Estados Unidos, y que ciertamente están pasando un tiempo considerable en nuestro territorio mientras pretenden y pueden llegar a cruzar la frontera norte".

Como parte de su gira por Nuevo León, Fox Quesada convocó a los gobernadores de Baja California, Sonora, Chihuahua, Coahuila, Tamaulipas y Nuevo León para hacer juntos la presentación del Programa de Desarrollo Regional Frontera Norte 2001-2006.

Definidos sus objetivos a mediano y largo plazos, por cada sector y área de producción, en el documento que se hizo público en el Museo de Historia Mexicana se destaca que en materia de energía "los principales programas" estarán orientados al establecimiento de "interconexiones energéticas en México y con Estados Unidos".

Sin precisar cómo se alcanzará ese grado de "interconexión" con Estados Unidos, sólo se agrega enseguida, como segundo objetivo en importancia, "la exploración y explotación del gas en la Cuenca de Burgos".

En materia de seguridad pública y procuración de justicia, el programa tiene como metas reforzar la coordinación y colaboración intergubernamental e interinstitucional para la vigilancia en los principales puntos de internación hacia el vecino del norte, así como la "elaboración de un protocolo de seguridad conjunto México-Estados Unidos".

Paralelamente se anuncian planes específicos para la prevención, apoyo y rescate de migrantes en la región; el impulso del programa sanitario Vete sano y regresa sano, y un plan de ordenamiento ecológico para los 3 mil 152 kilómetros de la frontera con Estados Unidos.

Otros aspectos del proyecto fronterizo tienen que ver con el fortalecimiento de la banca de desarrollo, "que se concentrará en el financiamiento y apoyo para infraestructura ambiental; desarrollo institucional de estados y municipios; apoyo al desarrollo de proveedores nacionales, y respaldo a la competitividad internacional" de las empresas instaladas en las seis entidades fronterizas.

La estrategia foxista para esta región destaca otros programas económicos dirigidos a "la competitividad de la industria de exportación; el apoyo a cadenas productivas y proveedores para la exportación, y apoyo técnico y financiero a las pequeñas y medianas empresas".

En el sector de comunicaciones y transportes, las metas fijadas son la conservación y el mantenimiento de la red carretera; el mejoramiento y la construcción de la infraestructura de transporte; la ampliación y modernización de los puertos fronterizos, y la modernización de los servicios de telecomunicaciones.

De igual forma, se plantea el ordenamiento de cuencas y acuíferos, y el desarrollo institucional de los organismos operadores de agua.

Ventana de oportunidades

Fox Quesada distinguió en el plan de desarrollo de la frontera norte "una ventana de oportunidades importantes" para que las relaciones con Estados Unidos y Canadá "queden más sólidas que nunca".

Explicó: "El propio Tratado de Libre Comercio ha mostrado su gran capacidad para promover desarrollo, y este desarrollo, particularmente, se ha dado en la zona fronteriza de nuestros países. La idea de impulsar el concepto de un Tratado de Libre Comercio plus, es esa. Es decir, hay que profundizar en la relación, profundizar en la integración. Esta debe ser una línea estratégica y por esto la importancia de conectarnos estrechamente con los estados fronterizos de Estados Unidos, sostener una relación muy intensa, planes de trabajo en equipo que permitan vitalizar y hacer sinergia en esta frontera norte".

El Presidente manifestó su optimismo en alcanzar esos objetivos, y dijo que el hecho de que su mandato haya empezado casi al mismo tiempo que el de Bush, "nos abre la oportunidad y nos permite en el mediano plazo, sostener la relación, crecerla y obtener los beneficios que todos estamos esperando".

A la presentación del plan fronterizo acudieron los gobernadores Eugenio Elorduy, de Baja California; Armando López Nogales, de Sonora; Tomás Yarrington, de Tamaulipas; Patricio Martínez, de Chihuahua; Enrique Martínez, de Coahuila; y el anfitrión nuevoleonés Fernando Canales Clariond, así como el comisionado presidencial para Asuntos de la Frontera Norte, Ernesto Ruffo Appel.

En otras actividades que el mandatario realizó hoy en Nuevo León, inauguró un hotel en el municipio de Guadalupe; puso en marcha las nuevas instalaciones de Seguridad Pública del Estado; se reunió con padres de familia, alumnos, rectores y directores de planteles educativos de la entidad; se entrevistó en privado con directores y propietarios de medios de comunicación, y visitó la empresa Nemak y el Parque Industrial Tolteca.

En este último punto, Fox Quesada firmó el Convenio para el Fomento a la Vivienda Infonavit, y entregó casas-habitación y escrituras a beneficiarios del Instituto Nacional de Vivienda y del estatal Fomento Metropolitano de Monterrey (Fomerrey).

México, libre de bamboleos

Al término de la gira de Fox, el gobernador de Nuevo León, Fernando Canales, dirigió un claro mensaje a Andrés Manuel López Obrador: "Le pedimos al Presidente de la República su apoyo, también, para que haya seguridad en la capital del país y que los que la visitamos con frecuencia tengamos tranquilidad". Y en clara alusión al cambio de secretario de Seguridad Pública en el Distrito Federal, advirtió que la facultad de designación a ese cargo corresponde únicamente al jefe del Ejecutivo federal.

Fox dejó correr el mensaje. Después de entregar casas y escrituras del Infonavit, orientó su discurso al área económica y aseguró que México "no se va a bambolear por tormentas" y que no caerá "en los berenjenales en que se metieron otros países por gastar más de lo que tenían".