Es indiscutible que ha habido negligencia, afirma
la relatora al concluir su visita
Altolaguirre, decepcionada por los nulos avances en
la investigación sobre asesinadas en Juárez
Lamenta que la recomendación 44/98 de la CNDH
no haya tenido resultados concretos
VICTOR BALLINAS
Al concluir su visita de dos días al país,
la relatora especial de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos
(CIDH) para los Derechos de la Mujer, Marta Altolaguirre, destacó
su decepción ante la lentitud de los avances registrados en la investigación
de los asesinatos de mujeres en Ciudad Juárez, iniciados en 1993
y que a la fecha suman 268.
Aseguró que, en la ciudad fronteriza, ''hay una
situación general y sistemática, y es indiscutible que ha
habido negligencia. No se ha puesto toda la voluntad requerida''.
En conferencia de prensa, la relatora ofreció
una primera reflexión sobre su visita, en donde apuntó que
no obstante la gravedad de la situación y las medidas que se están
desarrollando, ''la respuesta estatal frente a estos crímenes sigue
siendo marcadamente deficiente. Como lo expresaron varias autoridades locales,
la magnitud del problema no se equipara con las medidas adoptadas''.
Lamentó que la administración de justicia
en Chihuahua haya sido ineficaz para esclarecer estos asesinatos, propiciando
con ello la impunidad y la inseguridad. La impunidad, insistió,
está presente desde 1993, con las graves violaciones a los derechos
humanos de las mujeres de Ciudad Juárez, lo que contribuye significativamente
a la perpetuación de la violencia.
La relatora dijo que por los informes recibidos y las
exposiciones que le hicieron funcionarios estatales y federales, hay otras
iniciativas que fueron impulsadas para buscar solución a este problema
y no han recibido el seguimiento necesario. En especial se refirió
a la recomendación 44/98 de la Comisión Nacional de Derechos
Humanos (CNDH), la cual no ha tenido resultados concretos. Otro caso lo
constituye la fiscalía especial para la investigación de
homicidios de mujeres en Juárez, pues tampoco ha producido avances
deseados.
En entrevista con este diario, Altolaguirre manifestó
que se va acongojada por los testimonios que escuchó: ''Absolutamente,
estoy consternada y muy afectada. No es la primera vez que escucho testimonios,
hemos encontrado situaciones muy traumáticas en otros países,
pero lo ocurrido en Ciudad Juárez es intolerable, inaceptable y
parece haber ahí impunidad''.
Abundó: ''Me parece increíble que las autoridades
de un gobierno o de un estado hagan declaraciones que francamente deberían
ser sancionadas, al menos administrativamente, o no debieran existir funcionarios
en activo que piensen que las mujeres por su forma de vestir y por sus
necesidades son las responsables de que ocurran asesinatos''.
Se refería a las declaraciones del entonces gobernador
de Chihuahua, el panista Francisco Barrio Terrazas, quien en su informe
sobre los crímenes acusó a las mujeres juarenses de ser responsables
de que ocurrieran los asesinatos, por su manera de comportarse, por usar
minifalda y por salir a altas horas de la noche.
La funcionaria de la Comisión Interamericana de
Derechos Humanos agregó durante la conversación que ''es
terrible'' que los familiares de las víctimas no tengan acceso a
las etapas de la investigación. ''Entiendo la necesidad de discrecionalidad
en la fase inicial, pero el hecho de que se les niegue el acceso a la investigación
y a los avances que vaya teniendo me parece terrible; pasan los meses y
los años y a las familias se les maltrata y se les hostiga, incluso
hasta se les insulta. No tengo palabras para calificar esto''.
Comentó también que el actual gobernador
del estado, Patricio Martínez, le pidió la ayuda de las distintas
corporaciones policiacas internacionales. ''Se refirió al atentado
que él sufrió. Me parece preocupante, porque si el propio
gobernador se queja de la falta de resultados en su investigación,
siendo él la autoridad máxima, qué se puede esperar
en otros casos''.
En la conferencia de prensa, la funcionaria de la CIDH
refirió que en su visita a la ciudad fronteriza observó una
falta de confianza ''notable y generalizada'' en la administración
de justicia en la entidad. Por un lado, explicó, ''los familiares
y sus representantes manifestaron constantemente que no cuentan con la
información básica y la asistencia que requieren para que
haya justicia. Es evidente que esta falta de información jugó
un papel muy importante en la falta de confianza en el sistema de justicia''.
Pero además, durante la entrevista que la relatora
sostuvo con familiares de las víctimas y miembros de la sociedad
civil, le fueron expuestas dudas sobre las bases de sustentación
en las sindicaciones de personas supuestamente culpables. Específicamente,
los familiares manifestaron incertidumbre sobre la verdadera identidad
de los cadáveres presentados por las autoridades.
Preocupada, indignada, Altolaguirre criticó la
falta de consideración de algunas autoridades hacia familiares que
se acercaron para preguntar sobre el avance de las investigaciones. Agregó
que recibió informes de varios afectados que se sienten desprotegidos
y que, por el contrario, le manifestaron que han sido amenazados y maltratados.
De acuerdo con esos informes, subrayó la relatora
de la CIDH, es evidente que hay una tendencia a relacionar el delito con
la forma de vestirse o comportarse de la víctima, culpándola
en vez de dirigir la atención al victimario. Este tipo de tratamiento
o respuesta refleja una discriminación inaceptable.
En su conclusión, Altolaguirre, además de
reconocer los esfuerzos del gobierno mexicano y de la sociedad para buscar
soluciones al problema de la violencia contra la mujer en Ciudad Juárez,
expresó su decepción, pues dijo que ante la grave situación
en esa ciudad fronteriza hay lentitud en la investigación.
Llamó a que se esclarezcan esos crímenes
y se castigue a los responsables de acuerdo a derecho, porque no hacerlo
es propiciar y solapar la impunidad. ''Cuando no se sanciona y castiga
a los responsables de violaciones a derechos humanos y crímenes,
el mensaje que se envía a la sociedad es de total impunidad.''
Al inicio de la conferencia, la relatora informó
que su visita fue producto de invitación de organismos no gubernamentales
(ONG), los que en diferentes misivas le detallaron que de 1993 a la fecha
más de 200 mujeres han sido asesinadas con violencia brutal en Ciudad
Juárez, y le dieron a conocer la situación de ineficacia
en la administración de justicia.
El gobierno mexicano ''me invitó a realizar la
visita in loco'', para constatar la violencia que viven las mujeres.
Esta se explica en una carta que me fue enviada por organizaciones no gubernamentales,
donde expresan que ''desde 1993, las mujeres que viven en Ciudad Juárez
tienen miedo. Miedo de salir a la calle y recorrer la distancia del camino
de su casa a su trabajo. Miedo a los 10, 13, 15 y 20 años. No importa
si se es niña o ya mujer...''
Esta situación que se vive en Juárez, resaltó
la funcionaria, ha impactado la conciencia de la población. ''Vine
aquí para constatar estos hechos y me voy decepcionada por los nulos
avances, por la lentitud en las investigaciones y acongojada por todos
los testimonios recibidos.''
Altolaguirre concluyó ayer su visita y lamentó
que no hayan podido coincidir las agendas de ella y el ombudsman
nacional, José Luis Soberanes. ''Le doy el beneficio de la duda
de que su programa de trabajo estaba apretado, pero me habría gustado
conocer en qué situación se encuentra la recomendación
44/98 sobre las mujeres de Ciudad Juárez. Hubiera sido importante
conversar con él, pero eso se puede suplir solicitándole
desde la CIDH que envíe información por escrito al respecto,
porque la sociedad en su país no conoce en qué avance está
dicha recomendación. Nosotros tampoco''.