Lanzan bolsas con excremento contra el Congreso
Reprime la policía argentina las protestas de docentes en La Plata
STELLA CALLONI CORRESPONSAL
Buenos Aires, 28 de febrero. Las protestas de desocupados, ahorristas y trabajadores continuaron hoy, como ya es habitual en Argentina, y algunas de ellas fueron duramente reprimidas, como la de los docentes de La Plata, mientras una manifestación de descontento de un grupo de vecinos terminó cuando lanzaron bolsas con excremento en las escalinatas del Congreso Nacional.
Por otro lado, esta noche fuentes judiciales dijeron que la jueza María Servini de Cubría ordenó la detención de Enrique Mathov, ex secretario de Seguridad Interior, por la causa que investiga los seis muertos en la Plaza de Mayo durante el estallido que terminó en la renuncia del presidente Fernando de la Rúa, el 20 de diciembre.
Ante el Congreso hubo hoy una nueva manera de expresar el repudio a la clase política, y fue bautizada como el mierdazo: los manifestantes pegaron en las bolsas de excrementos fotos de los jueces de la desprestigiada Corte Suprema y de políticos, y también exhibieron tapas de inodoros donde enmarcaron fotografías de ex presidentes como Carlos Menem y De la Rúa.
En La Plata, capital de la provincia de Buenos Aires, 16 docentes fueron heridos con balas de goma cuando buscaban ingresar a la legislatura provincial para impedir una ley que prevé recortes a la educación, mientras desocupados que bloqueaban una petrolera en la ciudad de Bahía Blanca fueron también reprimidos por la policía.
Y las protestas contra los bancos se redoblaron. Precisamente el juez Mariano Bergés ordenó el allanamiento de la sede del Banco Central, en el marco de una investigación por defraudación, originada en la denuncia de un docente jubilado y de otros ahorristas.
El magistrado trata de establecer si es verdad lo que arguyen los bancos: que el Banco Central no les permite devolver los ahorros confiscados desde diciembre pasado.
En el marco de esta misma causa, Bergés allanó los bancos Galicia, Sudameris, Citibank, Boston, Scotiabank, Río, y prohibió salir del país a unos 20 banqueros.
También la jueza Servini de Cubría cayó recientemente sobre otras entidades, especialmente sobre el Banco General de Negocios (BGN), cuyo presidente Carlos Rohm sigue detenido aquí. Al allanar ese banco se encontraron formularios en blanco del Banco Comercial de Uruguay y papeles de más de 20 empresas panameñas.
Detrás de todo este entramado bancario está el tema del lavado de dinero cruzándose con las fugas de capitales y la confiscación de todos los ahorros. Pero la magistrada defraudó a muchos que pedían justicia al cerrar la investigación sobre los 130 ricos y famosos que burlaron el corralito y pudieron disponer de su dinero, tema que saltó con el allanamiento al BGN.
El 20 de enero pasado el analista Claudio Zlotnik, del diario Página 12, se refirió a la presunta conspiración de la banca extranjera en lo que se llamaba "el plan Cárdenas", en referencia a su gestor, Emilio Cárdenas, quien durante el gobierno de Menem fue representante argentino ante Naciones Unidas, después de ser el abogado asesor en los ministerios de Obras Públicas, Justicia y Medio Ambiente, cuyos ex titulares ahora están acusados de corrupción en distintos juicios por negociar la privatización de las empresas estatales de servicios públicos en un temible canje de deuda pública.
Según Zlotnik, Cárdenas habría enviado al presidente Eduardo Duhalde un plan por el cual algunos bancos extranjeros (HSBC, Boston, Citibank) ofrecían traer el dinero para devolverlo a los ahorristas a cambio de quedarse con los bancos pequeños, sus clientes y desaparecer la banca pública.
Detrás de Cárdenas está el gran poder financiero y -según el analista- el canciller Carlos Ruckauf, quien parece no querer desgastarse por las dificultades que Duhalde debe afrontar en la crisis.
Si se diera esta devolución, los bancos que no pudieran devolver a sus clientes se declararían en quiebra, y es por esta razón que los banqueros locales hablan de conspiración. Así, devaluación, quiebra de entidades locales y otras calamidades servirían al objetivo final, el de la dolarización.
Precisamente hoy la Unión Industrial Argentina solicitó al Ministerio de Economía auxilio para las entidades financieras locales y los bancos no privatizados, el último "bocado" -según analistas- que busca el Fondo Monetario Internacional.
Este organismo, entre tanto, dijo que planea enviar una misión a Argentina la semana próxima, pero sigue sin hablar de auxilio financiero, mientras el Tesoro estadunidense estuvo satisfecho con el pacto fiscal de las provincias argentinas, pero enfatizó que lo que importa "es la implementación".