FORTALEZA 2002

Impulsado por la reactivación en EU, el PIB llegará a 1.7% al cierre de diciembre

Acelerado crecimiento para México en 2002, prevé el FMI

La quiebra de Enron, de magnitud equivalente a la crisis de Argentina, propagó desconfianza

ANTONIO CASTELLANOS ENVIADO

Fortaleza, Brasil, 12 de marzo. Claudio M. Loser, director del Departamento del Hemisferio Occidental del Fondo Monetario Internacional (FMI), aseguró hoy que México, impulsado por Estados Unidos, crecerá este año de manera acelerada y alcanzará un producto interno bruto (PIB) de 1.7 por ciento al cierre de diciembre.

Dijo que el FMI participará de manera directa y activa en la reunión cumbre de Naciones Unidas sobre financiación y desarrollo que se llevará a cabo a partir del día 18 en Monterrey, y señaló que de ese encuentro surgirán grandes acuerdos, aunque no se aplicarán de manera inmediata. Habrá que esperar un poco.

El progreso en Estados Unidos podría dificultarse, aceptó, y añadió que existen todavía algunos riesgos, por lo que no existen garantías de lo que vaya a pasar.

Se refirió a la desconfianza generada por dificultades como la quiebra de Enron, cuya magnitud es tan grande como la crisis en Argentina.

En conferencia de prensa, Loser manifestó que las negociaciones con México tienen el mismo tono que las de Brasil y Chile: son difíciles, pero no duras, y en ellas se analizan cuestiones técnicas.

Subrayó que el FMI no impone recetas a nadie, únicamente da recomendaciones, y consideró que las críticas que se le han hecho no tienen fundamento. Ciertamente, aceptó, hay algunos países en problemas, pero no es por resultado directo de los programas del FMI; se han desviado sus metas y han caído en políticas que implicaron mayor endeudamiento del que pueden absorber.

El caso de México es un ejemplo del manejo de una política económica sana, disciplinada: aprobada por su Poder Legislativo, tiene disciplina en el gasto y el endeudamiento, los resultados están a la vista y su recuperación es extraordinaria, apuntó.

Loser se sumó a las críticas hechas por el gobierno de Brasil a la política proteccionista de Estados Unidos en la 43 asamblea de gobernadores del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), y puntualizó que el fondo apoya absolutamente esa posición; considera necesario por lo menos una situación menos desfavorable para los países de la región.

Se le insistió en las críticas al FMI y la posibilidad de una revisión de sus programas que, de acuerdo con sus opositores, han provocado la pobreza en la que viven los habitantes de los países cuyos gobiernos han seguido sus recetas. El funcionario del fondo dijo que la revisión es permanente, ejemplificó que podrían verse sus planes de hace 10 años y los de ahora y se comprobarían los cambios.

Se refirió a la desaceleración de la economía mundial y dijo que en 2001 la tasa de crecimiento fue de 2.5 por ciento, la más baja de los últimos ocho años. El comercio mundial creció solamente uno por ciento, que es la tasa más baja de los últimos 30 años. Es la primera vez en la historia reciente en que se observa una desaceleración con niveles muy bajos de crecimiento en Estados Unidos, Canadá, Europa y Japón.

La situación en el año fue difícil, pero a partir de 2002 puede haber un cambio importante pues los indicadores apuntan hacia una fuerte mejora en Estados Unidos. Las cifras recientes confirman un cambio decisivo. Además, el precio del petróleo se ha fortalecido.

En estas condiciones el FMI revisó sus proyecciones de crecimiento para el mundo y para Estados Unidos. En 2002 espera en ese país una tasa de crecimiento de 2 por ciento, pero con un progreso creciente para llegar a más de 4 por ciento en 2003.

Estas proyecciones dependen en gran medida de las condiciones existentes, advirtió. No hay garantía de lo que va a pasar, porque en las economías más avanzadas existen riesgos de dificultades financieras. Está el caso de Enron, que tuvo una magnitud tan importante como la actual crisis en Argentina, pues la empresa tiene un impacto equivalente al de uno de los países más grandes de América Latina. Casos similares tendrían un efecto adverso sobre la confianza.

Habrá recuperación, pero no para todos

Fortaleza, 12 de marzo. El Fondo Monetario Internacional (FMI) aseguró este martes que espera que América Latina y el Caribe crezcan uno por ciento en 2002 contra 0.7 por ciento en 2001, impulsados por un fortalecimiento de Estados Unidos, alzas en los precios de las materias primas y una caída en los costos del financiamiento.

La estimación marca una revisión al alza desde la previsión de crecimiento de 0.7 a 0.8 por ciento para este año que el organismo divulgó a fines de diciembre.

Aunque el primer trimestre debe ser negativo, la recuperación comienza justo después, y en el cuarto trimestre de 2002 el organismo espera un crecimiento de 4 por ciento en la región.

''Con un crecimiento mundial más fuerte, recuperación de los precios primarios y mejores condiciones de financiamiento, se puede esperar que la región crezca en promedio uno por ciento'', explicó a los periodistas el director del Departamento del Hemisferio Occidental del FMI, Claudio Loser.

Pero, aclaró, el crecimiento no llegará para todos: ''Tendremos fuerte crecimiento o una recuperación en los países de Centroamérica, en México y también en Chile. En Brasil y Colombia también veremos recuperaciones de más de 2 por ciento. En el caso de Uruguay, el crecimiento probablemente sea negativo (...) En Venezuela el crecimiento también será negativo''.

Sobre Argentina, que atraviesa una seria crisis económica y social y devaluó su moneda, Loser admitió que es ''posible'' una caída del producto interno bruto (PIB) de 8 por ciento para el año. El presupuesto aprobado por el Congreso argentino el mes pasado proyecta una contracción económica de 4.9 por ciento, pero el lunes una fuente del Ministerio de Economía admitió que el gobierno trabaja con una proyección de caída del PIB de hasta 8.9 por ciento.

Las cifras del organismo indican que este año la economía de Brasil crecerá 2.5 por ciento, y la de Chile 3 por ciento.

Loser agregó que, sin contar a Argentina, América Latina crecería 2.5 por ciento en 2002, por lo que se situaría dentro del promedio de crecimiento mundial esperado por el organismo para este año de 2 por ciento.

El directivo estimó que la región alcanzará una inflación de 8 por ciento para 2002 y déficit del sector público de 3.7 por ciento.