EUROCUMBRE
Con un fracaso parcial finalizó la cumbre
de la Unión Europea
Impide Francia en Barcelona la liberalización
del mercado energético prevista para 2004
"Limitado pero sólido", el compromiso alcanzado,
afirma el primer ministro Tony Blair
Pide declaración final a Israel acatar la ley
internacional y detener agresión a palestinos
ARMANDO G. TEJEDA ENVIADO
Barcelona, 16 de marzo. A pesar de los rostros
descompuestos ante el parcial fracaso de la cumbre de jefes de Estado y
de gobierno de la Unión Europea, el Ejecutivo español y presidente
de turno del organismo continental, el conservador José María
Aznar, lanzó un mensaje triunfalista en la única rueda de
prensa que dio a manera de conclusión del encuentro, que pretendía
liberalizar la energía y el transporte y flexibilizar el mercado
laboral.
Después de dos días de reunión de
los líderes europeos, que para el encuentro mo-vilizaron aviones
militares de alta tecnología, buques de guerra sólo previstos
para situaciones de guerra y cerca de 9 mil policías, lo que se
alcanzó fueron sólo acuerdos mínimos y un tibio llamado
a Israel para que acate la legalidad internacional y ponga fin al exterminio
del pueblo palestino.
Así, la cumbre cerró con un acuerdo para
una liberalización parcial del mercado energético para el
año 2004, luego de que hubo que reducir los objetivos que se tenían
inicialmente debido a la negativa de Francia a permitir que las empresas
compitieran en el suministro de electricidad doméstica, además
de que se ratificó la defensa de un mo-delo de protección
social.
Durante los días previos al Consejo Europeo, el
gobierno español, en su calidad de dirigente temporal de la Unión
Europea, lanzaba mensajes triunfalistas al sostener que en esta reunión
de alto nivel se aprobarían las directrices que a su juicio son
vitales para el futuro de la región, entre las que destacaban la
liberalización de la energía y el transporte, la flexibilización
del mercado laboral -que se traduciría en el abaratamiento del despido-,
la creación de un mercado financiero único continental y
la meta del pleno empleo para 2010.
Al final, y después de millones de dólares
gastados en despliegue policial e infraestructura para llevar a cabo el
consejo, las conclusiones fueron más bien mínimas.
Mensaje difuso y ambiguo
Aznar, acompañado por el presidente de la Comisión
Europea, Romano Prodi, y el secretario de política exterior de la
organización comunitaria, el español Javier Solana, compareció
ante los medios de comunicación internacionales para difundir los
acuerdos alcanzados, pero el mensaje fue más bien difuso y ambiguo:
"Se han dado pasos irreversibles para la liberalización económica
de la Unión Europea".
Pero si Aznar hace sólo unos horas aseguraba que
la privatización absoluta de la energía era un hecho inevitable
para que el continente se convirtiera en una región vital y capaz
de competir con el mercado estadunidense, este sábado la situación
cambió, sobre todo ante la frontal oposición de la delegación
francesa, que reclamó ante todo que se garantizara el servicio público
de este vital sector.
No obstante, el resultado fue que el mercado energético
se abrirá sólo hasta 2004, pero exclusivamente para las empresas
y los profesionales, con lo que se descartó el mercado doméstico,
reclamo que el eje formado por el presidente Aznar y los primeros ministros
Silvio Berlusconi y Tony Blair -de Italia y Gran Bretaña, respectivamente-
consideraban vital.
Blair, quien había pedido a sus socios comunitarios
la adopción de mayores medidas liberalizadoras al estilo de su país,
admitió que el acuerdo alcanzado en la cita de Barcelona resultó
"limitado pero sólido".
Por lo demás, se acordó incentivar el mercado
del transporte, eliminar las trabas para la libre movilidad laboral, impulsar
las nuevas tecnologías, de manera destacada el Internet, y crear
una tarjeta sanitaria que garantice ese servicio básico a los ciudadanos
europeos.
También fueron superadas las diferencias sobre
el sistema de navegación satelital Galileo, imprescindible para
enfrentar el monopolio estadunidense.
En consonancia con los objetivos plan-teados hace dos
años en el proceso de Lisboa, para hacer de la Unión Europea
la economía más competitiva del mundo, se ratificó
el cronograma para la unificación de los mercados financieros de
los 15 socios que, según cálculos, aportarán medio
punto de crecimiento anual a partir de su concreción definitiva.
Conflicto en Medio Oriente
Los mandatarios europeos acordaron emitir un comunicado
en el que reiteran el discurso que han mantenido durante los meses recientes
en torno al conflicto bélico en Medio Oriente, en el que exigen
a Israel "una retirada inmediata de sus tropas de las áreas bajo
control de la Autoridad Nacional Palestina, detener las ejecuciones extrajudiciales,
congelar los asentamientos y respetar el derecho internacional".
Asimismo, sostienen que el "uso de una fuerza excesiva
y una política que pretende golpear a los palestinos todavía
con más fuerza conduce a reacciones violentas, que no garantizarán
la seguridad de Israel y no pueden ser justificadas".
Del mismo modo, apelan a la Convención de Ginebra
y reclaman que se levanten las restricciones a las que sigue sometido el
presidente Yasser Arafat, después de que el gobierno del ultraderechista
Ariel Sharon anulara su confinamiento en la ciudad de Ramallah.