Responsabiliza de su integridad al Estado; "nunca he pensado suicidarme", dice
Bárbara Zamora recibe amenazas similares a las que sufrió Digna Ochoa antes de su muerte
ROSA ROJAS Y ANGEL BOLAÑOS
La abogada Bárbara Zamora denunció que este lunes recibió correos electrónicos amenazantes, con textos muy similares a los primeros de ese tipo que le llegaron en 1996 a la asesinada Digna Ochoa, quien fuera su socia en el bufete Tierra y Libertad. Los textos contienen las palabras: "Choques, accidentes, abogados, urgencias..."
Consultada por La Jornada manifestó su preocupación ante este hecho, porque se produce en el contexto de filtraciones y versiones sobre una presunta línea de investigación de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) en el caso de Digna Ochoa, quien presuntamente se habría "suicidado".
La abogada, especializada en derecho agrario y penal, responsabilizó al "Estado mexicano" y "a toda la gente que tiene la obligación de proteger la seguridad de las personas y el libre ejercicio de la profesión" por cualquier incidente en su contra.
"Quiero aclarar -agregó- que en ningún momento, nunca, he pensado ni pienso suicidarme, eso está fuera de mis planes, tengo muchísimas cosas buenas, nunca atentaría contra mi vida."
A pregunta expresa comentó que aún están pendientes parcialmente, por problemas burocráticos con la Secretaría de Gobernación, las medidas para protegerla que recomendó al gobierno mexicano la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
La noche de ayer Zamora López acudió a presentar la denuncia penal correspondiente a la PGJDF, pues se dijo preocupada por la similitud de las amenazas que en su momento recibieron Digna Ochoa y Pilar Noriega.
De las amenazas que ha recibido Noriega desde 1996, recordó una escrita con recortes de periódicos en términos similares a la que recibió en su dirección personal de correo electrónico y que dice: "colisión entre vehículos, abogados, condolencias..."
Se trata de la primera advertencia que recibe después del homicidio de Digna Ochoa. Refirió que el año pasado fue amenazada varias veces y los mensajes quedaron grabados en el contestador de su teléfono: sonidos de disparos, gritos y música de réquiem.
Bárbara Zamora llegó al edificio central de la PGJDF acompañada por una veintena de integrantes de la Asociación Nacional de Abogados Democráticos.
La abogada se entrevistó con el subprocurador de Averiguaciones Previas Centrales, Renato Sales Heredia, quien tiene a su cargo las investigaciones sobre el homicidio de Digna Ochoa. Mañana por la noche se reunirá con el procurador Bernardo Bátiz.
Aseguró que como abogada no realiza ninguna investigación relacionada con la muerte de Ochoa, "simplemente somos los abogados de la familia y quien está investigando es la procuraduría y la coadyuvancia la está haciendo el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro".
Dijo que por el momento no solicitó a la dependencia ninguna medida de protección, simplemente se limitó a presentar la denuncia, pero no descartó dicha posibilidad. Lo más importante, subrayó, es que esta amenaza no quede en la impunidad, como ocurrió con las que recibió Ochoa y Plácido, y que se investigue su origen.
Insistió en rechazar la hipótesis del suicidio en el caso de Digna Ochoa, pues recordó que incluso tenían proyectos para trabajar conjuntamente en la defensa de campesinos de Guerrero, así como de los proyectos de la Asociación de Campesinos Ecologistas de la Sierra de Petatlán, para lo que estaba ayudando a buscar financiamiento.
El presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal, Emilio Alvarez Icaza, quien conoció de la denuncia por voz de Zamora el lunes mismo, señaló que independientemente de algún tipo de seguridad que se pueda proporcionar a la abogada, como ocurre ya por ejemplo con la visitadora del ombudsman, Pilar Noriega, la mejor protección que la PGJDF puede brindar es dar con los responsables de dichas intimidaciones.
Por otra parte, el subprocurador Sales Heredia señaló que existen bases técnicas para sostener la hipótesis de suicidio y antes de desecharla propuso que las organizaciones no gubernamentales colaboren con la PGJDF con una "crítica constructiva", creando un fondo que permita la contratación de un perito que intervenga en la investigación junto con el consultor enviado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, Pedro Díaz Romero, a propuesta del mismo organismo internacional.