Ortiz Mondragón niega desorganización respecto a la sede para canonizar a Juan Diego
La visita del Papa no dividirá al clero, dice obispo
Se reunirá Juan Pablo II con Vicente Fox y López Obrador, anticipa el cardenal Rivera Carrera
ANGELES CRUZ
La jerarquía católica no está dividida y la visita de Juan Pablo II se dará en un ambiente festivo sin nada que la pueda opacar, afirmó Guillermo Ortiz Mondragón, vocero oficial para la quinta visita del Papa.
Descartó que hubiera falta de coordinación o incluso desorganización en los días pasados, cuando se dio por hecho que la canonización del indio Juan Diego se realizaría en la diócesis de Ecatepec.
Más bien, dijo, en la decisión sobre el sitio de la canonización, prevaleció la importancia que tiene la Basílica de Guadalupe en la historia y la fe de los mexicanos. Ya el cardenal pidió disculpas (el domingo pasado) a los feligreses que no podrán estar presentes en ese momento, recordó.
En conferencia de prensa, para dar a conocer el casete musical Voces Unidas, que realizó la Comisión de Pastoral Juvenil (Comijam) de la Arquidiócesis de México, con motivo de la visita papal, el también obispo auxiliar de la ciudad de México dijo que Ecatepec "no fue eliminada, sino que se eligió" al templo guadalupano. Rechazó hablar sobre las opiniones del obispo Onésimo Cepeda luego de que la nunciatura dio a conocer la decisión, en el sentido de que "se quiso proteger demasiado al papa Juan Pablo II", o que si algo le iba a pasar, mejor que fuera en la Basílica y no en la diócesis de Ecatepec.
Por otra parte, Ortiz Mondragón admitió que "seguramente" habrá prácticas de comercialización "ajenas a la Iglesia" en ocasión del quinto viaje del representante de Roma a nuestro país.
Comentó que la asistencia de feligreses a la Basílica será controlada estrictamente, de tal suerte que cuenten con un lugar los laicos en misión permanente, los grupos indígenas, entre otros sectores representativos de la fe del pueblo. Habrá cabida para unas 20 mil personas, ocho mil dentro del templo y 12 mil en el atrio.
En ningún caso, señaló, la presencia del Papa será motivo de diferencias. "El entusiasmo es tan fuerte que no habrá algo que lo pueda opacar". Con relación a la organización de la misa de canonización de Juan Diego, señaló que tanto el gobierno federal como el capitalino, han reiterado su disposición a colaborar en todo lo que la Iglesia necesite para ese evento.
Por otro lado, el arzobispo primado de México, Norberto Rivera, precisó que en su visita a México el papa Juan Pablo II, habrá de reunirse con el presidente Vicente Fox y con el jefe de Gobierno del DF, Andrés Manuel López Obrador.
Entrevistado luego de reunirse la mañana de ayer con el mandatario local, el cardenal destacó que el encuentro con Fox Quesada será en la residencia oficial de Los Pinos, y que en el caso de López Obrador está por definirse el lugar exacto.
Seguridad garantizada
Rivera Carrera comentó también que se tiene garantizada la seguridad del Papa, pues se definieron los mecanismos de colaboración de las corporaciones policiacas con el Estado Mayor Presidencial (EMP), que tendrá bajo su responsabilidad esa tarea.