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Jueves 21 de marzo de
2002 |
n El órgano de la UAP acordó fijar postura sobre la educación superior |
En medio de críticas a la política presupuestaria federal, el CU aprobó el presupuesto para 2002 |
Ignacio Juárez Galindo n |
El Consejo Universitario (CU) aprobó ayer el presupuesto de la Universidad Autónoma de Puebla para el ejercicio fiscal de 2002, que ascenderá a mil 726 millones 719 mil 248 pesos. No obstante, la institución pondrá en marcha políticas de austeridad, ahorro y de búsqueda de recursos extraordinarios. Sin embargo, varios integrantes de dicho órgano criticaron el reducido apoyo que el gobierno federal otorgó a las instituciones de educación superior regionales, la inequidad en la distribución de los recursos, la política presupuestal, así como la postura que han asumido los tres últimos sexenios de "acotar" la autonomía de las universidades, por la vía de la asignación y comprobación de los apoyos financieros que reciben. |
Ante esta
situación, el máximo órgano de gobierno de la UAP
acordó fijar una postura pública respecto a las
políticas de educación superior de los gobiernos
federal y estatal, en la que se analice si dichas
directrices y los presupuestos que las acompañan
"son las que el país o las regiones realmente
necesitan". Durante la sesión extraordinaria, efectuada ayer en el salón Barroco del edificio Carolino, Jaime Vázquez, vicerrector de Planeación, Presupuesto e Investigación Institucional, presentó el proyecto de presupuesto para 2002. De entrada, el funcionario realizó una amplia descripción sobre la política presupuestaria y la forma en que se distribuyó los recursos a las instituciones. Informó que pese a haber un incremento de 15 mil 37 millones de pesos para el sector educativo, la educación superior sólo recibió 3 mil 850 millones de pesos, de los cuales, 2 mil 850 corresponden a las universidades estatales, 500 millones a la UNAM, 300 millones a la UAM y 200 millones al IPN, a lo que se agrega mil millones para el Conacyt. A decir del funcionario, tales cifras confirman "la inequidad en la asignación de recursos", así como la diferenciación entre las universidades estatales y "federales", eso sin contar que éstas últimas reciben partidas presupuestales en más de 30 apartados, mientras que las locales obtienen sólo en cuatro. Pese a haber un incremento nominal de 11.9 por ciento respecto al año anterior en educación superior, indicó, esto no se refleja en la asignación del subsidio ordinario -aquel que aportan los gobiernos federal y estatal- para el grueso de las instituciones estatales, puesto que "se trata de apoyos no regularizables que llegan etiquetados, a los cuales sólo se podrá acceder a través de proyectos específicos, en su mayoría de competencia, además de estar sujetos a la recaudación del ejercicio fiscal". Más adelante, Jaime Vázquez apuntó que ante la nula ampliación del subsidio público ordinario para gastos de operación -sólo recibió 4 por ciento para hacer frente a la inflación y los recursos para otorgar un incremento salarial del 5.25 por ciento-, la UAP inició reuniones de trabajo con la SEP federal, las cuales no tuvieron éxito. En su intervención, aseveró que "curiosamente cuando se tiene más claridad sobre el mejoramiento de la calidad y la rendición de cuentas, nos encontramos con que no existe una respuesta integral en la política presupuestal oficial". De paso, abundó que también pudo comprobar que no existe ninguna congruencia entre "las mayores exigencias y metas" exigidas por el gobierno "con los recursos que en los últimos años han sido destinados" a este sector. "Se está poniendo en riesgo las mismas metas trazadas por el propio gobierno para 2006", agregó. Empero, aclaró que sumado a la falta de incrementos a los subsidios existen "serias restricciones en el presupuesto para ciencia y tecnología". Como ejemplo, expuso que pese a que existe un aumento de mil millones de pesos, hay limitantes para la obtención de becas de repatriación, recursos para proyectos y posgrados de excelencia. Según estadísticas de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior, en 2002 para gasto en ciencia y tecnología hubo una disminución casi de 5 mil millones de pesos respecto al año anterior; mientras que en gasto de educación superior fue de 620 millones de pesos. Al finalizar su intervención, Jaime Vázquez concluyó que el gobierno federal ha instaurado una política presupuestaria "con condiciones restrictivas en el gasto y políticas públicas que condicionan el desarrollo, que no comprenden la dimensión de las actividades de las universidad públicas". Sostuvo: "Nuestro quehacer demanda más recursos necesarios sin más condiciones que la transparencia y la aplicación de rendición de cuentas de sus estados; estamos comprometidos y mantenemos postura de discusión abierta sobre retos de la educación pública mexicana y un financiamiento justo, con reglas claras que reconozca el desempeño institucional. Indispensable tener acceso a alternativas de financiamiento de vinculación y fondos internacionales". El presupuesto En cuanto al presupuesto para la UAP en
2002, Jaime Vázquez dio a conocer que está conformado
por mil 408 millones 134 mil 170 pesos de subsidio
ordinario, 236 mil 759 mil 434 de subsidios
extraordinarios y 81 millones 825 mil 644 peso de
ingresos propios. En total, el 65 por ciento de los
recursos son de gobierno federal, el 17 por ciento del
gobierno estatal, 14 por ciento de "fondos
específicos" y sólo el 5 por ciento de ingresos
propios. Con base en datos recabados, este año hubo un
incremento global de 263 millones 197 pesos al
presupuesto de la institución respecto al año pasado. La discusión Una vez concluido el desglose del
presupuesto, el CU se centró en su discusión. En un
principio, hubo reclamos de varios consejeros de que la
información se les había entregado un día antes de la
sesión extraordinaria y era necesario posponer su
aprobación, propuesta que fue rechazada. Sin embargo, el
debate sobre la necesidad de fijar una postura sobre la
política en educación superior impulsada por el
gobierno federal y hacer una revisión a los modelos
presupuestales, lo inició el presidente de la Comisión
Gran Visión 2020, Alfonso Velez Pliego. |