MONTERREY 2002

Este año han muerto más de mil 300 ilegales en EU

ONG exigen eliminar políticas que criminalizan los flujos migratorios

DAVID CARRIZALES Y ENRIQUE MENDEZ CORRESPONSAL Y ENVIADO

Monterrey, NL, 21 de marzo. Representantes de más de 30 organizaciones de migrantes y ex braceros de México y Estados Unidos, preocupados porque tan sólo en lo que va del año han muerto más de mil 340 migrantes en su intento por internarse sin documentos al país vecino, plantearon hoy la aplicación de políticas globales que resuelvan los problemas de desplazamiento, desempleo y salida de las naciones pobres, comenzando por la eliminación de políticas de vigilancia trasnacional como la Operation Disrupt (Operación Reventar, iniciada en América Latina en 1995), que "impiden y criminalizan los flujos migratorios".

Reunidos aquí, como parte de los foros alternos a la Conferencia Internacional sobre la Financiación para el Desarrollo auspiciada por la Organización de Naciones Unidas (ONU), los líderes de organizaciones sociales, campesinas y de derechos humanos exigieron pasos concretos para resolver los problemas migratorios.

Citaron entre esas medidas la eliminación de los programas de ajuste estructural que el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional (FMI) imponen a los países en vías de desarrollo, además de la cancelación de la deuda externa de éstos.

Asimismo, los voceros de organizaciones como Alianza Cívica, Asociación para la Residencia y Ciudadanía de América, Asociación Tepeyac, Coalición Nacional por la Dignidad y la Amnistía, Coalición de Texas por la Dignidad y la Amnistía, El Barzón de Nuevo León y la Coalición Pro Justicia en las Maquiladoras, entre otras, demandaron un programa de legalización amplio y completo para todas las nacionalidades de migrantes indocumentados y sus familias que viven en Estados Unidos.

Fernando García, de la Red Fronteriza para los Derechos Humanos, expuso asimismo que las organizaciones participantes en el foro demandaron la legalización de futuros flujos migratorios, ya que necesitan ser garantizadas por cualquier programa cuestiones mínimas, como los derechos a una entrada legal y ordenada, al trabajo y a la residencia permanente.

Las organizaciones no gubernamentales y asociaciones de migrantes expusieron en la reunión que la defensa y protección de los derechos de los migrantes deben incluir reformas para eliminar la discriminación hacia ellos en el lugar de trabajo.

Además, es necesario que tengan recursos suficientes para hacer valer los derechos laborales y civiles; así, deben eliminarse las restricciones basadas en el estatus migratorio para obtener servicios sociales y legales.

Se exigió también que los migrantes tengan libertad para escoger y cambiar de empleo, que tengan igualdad de derechos y protecciones bajo la ley laboral y los derechos civiles, así como protección legal en caso de que sufran abusos debido a actos de racismo.

Demandaron la protección de los derechos humanos y civiles, para lo cual es indispensable la desmilitarización de la frontera Estados Unidos-México, y que se revisen las estrategias antiterroristas.

Las asociaciones de migrantes pidieron poner fin a los procesos injustos de asilo político y deportación. Finalmente señalaron: "Hoy levantamos la voz para aclarar que sí contamos, que sí existimos, que somos seres humanos y gritamos una vez más que seremos parte de la integración global sólo cuando se reconozca de país a país, de frontera a frontera, que todo ser humano es igual en dignidad y derechos".