Afirma Bush que "ningún terrorista insignificante"
detendrá su viaje a Lima
Sorprendido, el gobierno peruano por atentados
Los grupos rebeldes Sendero Luminoso y Tupac Amaru niegan
implicación en los ataques
AFP, DPA Y REUTERS
Lima 21 de marzo. El gobierno peruano se manifestó
hoy "sorprendido" por el atentado dinamitero de la noche del miércoles
que dejó un saldo de nueve muertos y 30 heridos, al tiempo que el
presidente estadunidense, George W. Bush, afirmó que "ningún
terrorista insignificante" detendrá su viaje de este sábado
a Lima.
El ataque provocó las condenas de Estados Unidos
y otros países, e hizo que el presidente Alejandro Toledo se declarara
"in-dignado" y se viera obligado a regresar al país al cancelar
su participación en la cumbre internacional sobre financiamiento
al desarrollo que se realiza en Monterrey.
El
presidente afirmó, antes de salir de la ciudad mexicana, que aplicará
"mano dura" contra el terrorismo y en el castigo a los autores del atentado.
Aseveró que el "terrorismo" busca doblegar los esfuerzos del pueblo
y tiene un origen "siniestro" porque siembra violencia e intolerancia.
Las autoridades peruanas interpretaron el atentado como
un intento por dañar la imagen de Perú e impedir la visita
de Bush, pero confiaron en que no lo lograrán y que el mandatario
estadunidense arribará el sábado para la cumbre regional
andina.
Incluso sin la presencia del presidente Toledo, el gobierno
peruano había convocado a un foro de gobernabilidad con todas las
fuerzas políticas y cívicas para asumir una estrategia de
combate contra el terrorismo, y de inmediato se declaró en alerta
roja y dio la orden de acuartelamiento de las fuerzas armadas y la policía
nacional.
"El gobierno decidió poner en ejecución
la fase dos del plan de seguridad, el cual consiste en establecer zonas
rígidas en el centro histórico de Lima, así como intensificar
los patrullajes", informó el primer mi-nistro Roberto Daqino.
El primer vicepresidente y encargado del despacho presidencial,
Raúl Díez Canseco, admitió que "nos han sorprendido
a todos; nada hacía prever un atentado de esta naturaleza y ahora
nos encontramos muy preocupados", pues este tipo de atentados no se presentaban
desde hace casi una década.
Si bien un funcionario estadunidense no identificado y
la CIA dijeron creer que Sendero Luminoso estaría detrás
del atentado, ocurrido a cuatro cuadras de la embajada estadunidense en
Lima, voceros en prisión de ese grupo negaron tener alguna implicación,
según los "camaradas" Hugo y Arturo.
Estos voceros afirmaron que más bien buscaban desde
1993 una solución política que permita a los peruanos vivir
en paz.
También un vocero en prisión del Movimiento
Revolucionario Tupac Amaru se apresuró a rechazar que esa organización
tenga que ver con lo ocurrido, así como tampoco ningún otro
emerretista en libertad, según dijo el "compañero" Alvaro.
El atentado fue ejecutado con unos 50 kilos de explosivos
distribuidos en dos coches estacionados, que también causó
la destrucción de decenas de casas, comercios, un banco y vehículos,
como en la peor época de ataques del senderismo de los años
80 y principios de los 90.
Llama la atención que el bombazo haya ocurrido
cuando ya existían fuertes medidas de seguridad adoptadas por las
autoridades peruanas y estadunidenses con motivo de la reunión de
Bush con sus homólogos de Perú, Ecuador, Bolivia y Colombia.
Algunos analistas políticos no descartan que grupos
locales e internacionales estén involucrados en el atentado, así
como re-manentes del "montesinismo", en alusión al encarcelado ex
jefe de los servicios se-cretos Vladimiro Montesinos.