Las figuras serán de Bin Laden, Castro
y Castañeda
La familia Linares quemará hoy a los judas ''para
las nuevas generaciones''
ARTURO CRUZ BARCENAS
Hoy, sábado, en la calle Oriente 30, colonia Merced
Balbuena, atrás del Mercado de Sonora, la historia se vestirá
de papel y cartón, de pintura y diamantina, pero sobre todo de imaginación,
de esa rara síntesis que el pueblo crea al decidir quiénes
son los buenos y cuáles los malos, en el maniqueísmo real,
el del juicio de la sociedad hacia aquellos que no les han respondido y
son noticia. Cuando llegue la oscuridad y el sol ya se haya ido, la familia
Linares, artífices de entes sólo posibles en el cerebro,
procederá a quemar a los judas, en el marco del Sábado de
Gloria.
Recuerdan
los Linares cuando frente a su casa había árboles y colgaban
a los judas, al modo de cómo el traidor personaje, presa de arrepentimiento
y remordimiento, se colgó en un pirul. En el sincretismo, la quema
de Judas es el juicio del pueblo. Se quema a los traidores de varias maneras,
por muchas razones. En su momento fue a Carlos Salinas de Gortari, a quien
los Linares dieron figura de ratón o murciélago, con grandes
orejas, colmillos y sacos de dinero en las manos, y estampado en el pecho
las letras del TLC.
Así, atrás quedaron los Ortiz, malogrados
secretarios de Economía, Hacienda, Finanzas. Los más odiados
siempre. También ya no es noticia Gloria Trevi o Juan Gabriel. Hoy,
en un espectáculo vespertino, los Linares, creadores de alebrijes,
quemarán a los judas del 2001-2002, encabezados por Osama Bin Laden,
quien se enfrentará a su archienemigo George W. Bush; Vicente Fox
tendrá a su lado a su canciller Castañeda, enfrentándose
nada menos que a Fidel Castro. Será la quema de la historia de cartón
y engrudo.
A lo largo de la semana, los Linares se dan a la tarea
de preparar todo. El jueves pasado ya estaban listos muchos diablos, con
cuernos de varios colores, varios en tonos pastel, lo mismo que otros seres
salidos del infierno o de una cruda propia del delirium tremens.
Los Linares captan el odio popular. Los políticos tienen cuernos,
colmillones draculinos, les sangran los ojos, desorbitados. Es la venganza
a sus actos de gobierno.
En entrevista, habla Paula García, esposa de Miguel
Linares; se ha sumado a la tradición y ya hace sus propios monos,
miles desde que comenzó. Ahí están los charros panzones,
el hacendado, el policía, el campesino patarrajada, el terrorista.
Judas siempre es malo.
Recuerda el maestro Daniel Linares que los Judas de antes
eran el payaso, Cantinflas, Tin- Tan; personajes de revistas como
El Mamerto, el Jilimón, o un catrín de la Fachenda.
"Antes se abrían tiendas y pulquerías para
tronarlos (a los judas). Más me acuerdo de las pulquerías,
porque adornaban los barriles con flores y les ponían vales a los
judas para cambiarlos por cubos de pulque. Era una tradición fuerte
por dondequiera. Por las calles de Tacuba, en la Casa Bustillos.
Reconoce que la tradición ha decaído. "En
primera porque los cohetes están prohibidos y un judas sin cohetes
no es un judas. Ya sólo se ven en museos o tiendas de artesanías
para adorno; antes, los carros de pasajeros y los coches traían
sus judas colgados". También cuenta el costo y la escasez de carrizo.
Pero los Linares siguen con la tradición. No hay olvido. "Tenemos
15 años haciendo la quema de judas para que vean las nuevas generaciones
cómo se hacía''.
Este año, Leonardo Linares se inspiró en
Osama Bin Laden para darle vida al Judas Iscariote que vendió a
Jesús por 30 monedas, porque al igual que él, dice, "Osama
es un traidor y no confiesa lo que hizo''. Ganó en el concurso convocado
por el Museo Nacional de Artes y Culturas Populares de Coyoacán,
con el terrorista de cartón; recibió un premio en efectivo.
Sigue así la serie de logros de esta familia, como el de 1991, cuando
Pedro obtuvo el Premio Nacional de Artes y Tradiciones Populares.
Paula García agregó que se trata de quemar
el mal: "Hay un odio especial contra Judas, por eso se quema a los que
hacen mal al pueblo, y cada año cambian. Ahora serán varios
muy conocidos, varias figuras y correlones; es una mojiganga con la cabeza
del personaje, que lleva las manos movibles. Una persona va dentro; la
adornan con luces, silbatos, como si fuera un torito. Ahora el papel central
será de Jorge G. Castañeda y Fidel Castro".
Apuntó que nadie los apoya. "Nosotros hacemos el
trabajo y ponemos el material", "¿Hay mujeres judas?". "Sí,
este año va a estar Rosario Robles". Para Paula hacer judas es realizar
arte en papel. "Participa toda la familia, incluidos los niños.
Se va aprendiendo a dominar el papel. Conforme ha ido pasando el tiempo
se ha mejorado la técnica para hacer los monos. Los que requieren
más creación y trabajo son los alebrijes, que son los que
más han resaltado en el mundo".
Una figurita de los Linares tiene varios precios. Puede
comprar algunos por unos 100 pesos. Hay de 30 centímetros hasta
uno o varios metros. Hay diablitos de 40 pesos.