Plantearán normas internacionales de contabilidad

La quiebra de Enron será analizada por expertos de la Unión Europea

AFP

Oviedo, 13 de abril. Un grupo de expertos analizará las implicaciones de la quiebra de la empresa estadunidense Enron en la Unión Europea (UE) y redactará una serie de recomendaciones para aumentar la transparencia en la contabilidad de las empresas europeas.

La UE, que trabaja en la elaboración de estas medidas, quiere acelerarlas tras el descalabro de la compañía estadunidense de energía en diciembre, debido a manipulaciones contables dudosas, lo que supuso la mayor quiebra empresarial en Estados Unidos.

Los ministros de Economía de la UE decidieron este sábado en esta ciudad al norte de España que un grupo de alto nivel experto en derecho mercantil analizará las implicaciones del caso Enron en Europa y presentará un informe preliminar en junio y el definitivo en septiembre.

El grupo examinará "el control interno y externo de las empresas y los mercados de capitales", indicó en conferencia de prensa el secretario general español de Políticas Económicas, Luis de Guindos.

Para la UE no se trata de "un problema de sobrerregulación, sino que hay que favorecer la transparencia y la claridad en los órganos empresariales", según De Guindos.

Dentro del control interno analizarán el funcionamiento de los consejos de administración de las empresas, las auditorías internas, el trabajo de los consejeros independientes y la remuneración de ejecutivos.

El plan de servicios financieros de la UE prevé la introducción de normas de contabilidad internacionales a partir de 2005, por lo que los 15 pretenden garantizar el cumplimiento de estas reglas y también convencer a Estados Unidos de que las acepten.

En el plano externo revisarán las auditorías, las prácticas contables, los servicios de los bancos de inversiones y los de las agencias de calificación.

Según la Comisión Europea, que en breve publicará una recomendación sobre la independencia del auditor, "el caso Enron ha llevado a cierta pérdida de confianza de la opinión pública en el servicio de auditoría", por lo que "debe aumentar la supervisión de la profesión de auditor" teniendo en cuenta que actualmente en la UE no hay normas al respecto.

La quiebra de Enron arrastró a la empresa auditora Arthur Andersen, acusada de haber destruido documentos de la contabilidad del grupo cuando las autoridades habían abierto una investigación sobre el escándalo.

Dijo que tanto a la UE como a Estados Unidos les preocupa que "las recomendaciones de los analistas financieros, a veces basadas en la negligencia, en los conflictos de interés o en esquemas inapropiados de incentivos a los trabajadores, puedan transmitir señales falsas o erróneas al mercado", según un documento de la comisión.