Es un planteamiento de cooperación para
que la isla avance, considera Bravo Mena
Con el voto contra Cuba, el gobierno de Fox le saca
el trabajo sucio a EU, dicen dirigentes de PRD y PT
La Doctrina Estrada no puede utilizarse con un doble
sentido, advierte Rosario Robles
Las dirigencias de PRD y PT cuestionaron ayer duramente
la decisión del gobierno de Vicente Fox de ''invitar'' al gobierno
de Cuba a esforzarse por respetar los derechos humanos en la isla, pues
consideraron que con ello sólo se convierte en ''un instrumento
servil'' y le ''saca el trabajo sucio'' a Estados Unidos, además
de que asume una política exterior de doble moral, porque sí
aplicó la Doctrina Estrada en el caso de Venezuela, pero no en su
voto en Ginebra.
En contraparte, el presidente de Acción Nacional,
Luis Felipe Bravo Mena, consideró que el sumarse al proyecto de
Uruguay para que se envíe un relator de la ONU a La Habana, no constituye
una actitud de injerencia o un ataque a Cuba. ''Es un planteamiento de
cooperación para que el gobierno cubano avance'' en esa materia,
dijo.
Casi en el mismo sentido, el presidente de la Confederación
Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Jorge Espina Reyes,
dijo que con esta decisión no se trata que México se vuelva
''intervencionista'' e incluso consideró que los postulados de la
Doctrina Estrada ''ya están en desuso'' y han sido utilizados ''para
pasar por alto atropellos''.
El empresario agregó: ''Estamos en un periodo de
transición y no podemos esgrimir la Doctrina Estrada para todo.
Tuvo una función y tiene cosas rescatables, pero tampoco podemos
ponernos de perfil ante todo. No lo pudimos hacer ni en la Segunda Guerra
Mundial''.
Sin embargo, la presidenta nacional del PRD ?en su primera
conferencia de prensa como tal?, Rosario Robles Berlanga, dijo que dicha
doctrina no puede utilizarse por el gobierno foxista con un doble sentido,
esto es, aplicar el principio de no intervención en el caso de Venezuela
y después soslayarlo cuando se trata de Cuba.
Sostuvo asimismo que en tanto no se modifique la Constitución,
la actual administración está obligada a respetarla, y planteó
que antes de preocuparse por lo que ocurre en aquel país, el gobierno
debería centrar sus esfuerzos en defender los derechos humanos de
los indocumentados mexicanos.
''Sería más adecuado promover un rechazo
enérgico a la violación de las garantías individuales
de los migrantes en Estados Unidos, actitud ratificada con la decisión
de la corte'' de ese país, resaltó.
A su vez, el representante del PRD ante el IFE, Pablo
Gómez Alvarez, afirmó que al canciller Jorge G. Castañeda
''le gusta mucho el alambreo''. Por esa afición deja de cumplir
con una política exterior de principios y descuida la soberanía
nacional que a lo largo de la historia ''ha sido atropellada por Estados
Unidos''.
Afirmó que el gobierno de Vicente Fox tiene una
actitud ''muy proclive'' hacia el gobierno de Estados Unidos, y eso es
lo preocupante, ''que no nos gusta ver que nuestra política exterior
esté sometida a los dictados de Washington. Y si no es así,
que nos digan por qué no se impulsa que la Organización de
Naciones Unidas condene la violación de los derechos humanos de
los migrantes mexicanos''.
En el mismo tenor, el dirigente del Partido del Trabajo
(PT), Alberto Anaya, consideró que a Castañeda y su jefe,
el presidente Fox, les interesa más quedar bien con Estados Unidos
que respetar la Constitución y la Doctrina Estrada, que claramente
establecen que en materia internacional México debe atender la política
de no intervención y la libre determinación de los pueblos.
Declaró que mientras el presidente Fox y su secretario
de Relaciones Exteriores callaron y no defendieron los derechos humanos
de los mexicanos sin documentos en Estados Unidos, ahora contribuyen a
''sacarle el trabajo sucio'' a ese país que, ''en un acto criminal,
mantiene un bloqueo económico contra Cuba''.
Más tarde, en una entrevista en el aeropuerto de
la ciudad de México, Anaya calificó la decisión del
gobierno de México como ''una traición a Cuba'', y anunció
que posiblemente la próxima semana su grupo parlamentario en la
Cámara de Diputados presentará una solicitud de juicio político
contra Castañeda por violentar la Constitución.
Insistió en que Fox ''se interesa más por
convertirse en un instrumento servil a los intereses de George W. Bush
y de su gobierno, que por mantener la tradición histórica
en la política internacional.
?Las posturas diferentes, por lo que se refiere a Venezuela
y Cuba, ¿cómo pueden interpretarse? ?se le preguntó.
?Como una política de doble moral. Nada se dice
cuando los migrantes mexicanos sufren violaciones a sus derechos sociales,
políticos y laborales; no se dice nada cuando se les caza como bestias
y se les condena en los campos en calidad de semiesclavos, no se dijo nada
cuando se lesionaron sus derechos más elementales, y mucho menos
sobre las violaciones a las garantías que persisten en México.
Por otro lado, en Monterrey, el comité regional
del Movimiento Mexicano de Solidaridad con Cuba (MMSC) calificó
de ''cínica'' la postura del gobierno foxista al ''invitar'' a Cuba
a que mejore el respeto a los derechos humanos, con lo que se convierte
en ''peón de brega de George W. Bush y de los intereses del gran
capital internacional''.
Agregó: ''Hay un cinismo inaudito, porque Estados
Unidos, el impulsor real de esta condena contra Cuba, utiliza como peones
a gobiernos títeres, que así pretenden obtener algunas migajas
del imperio promotor, cómplice, patrocinador, autor intelectual
y apoyador económico de sabotajes, intentos de asesinato contra
Fidel Castro y otras acciones para terminar con la revolución cubana''.
Por su parte, el dirigente panista Luis Felipe Bravo Mena
criticó ''el doble lenguaje de quienes se llenan la boca para luchar
por los derechos humanos en México y en otros lados, pero en el
caso de Cuba simplemente cierran los ojos. Ahí hay una incongruencia
grave, que descalifica totalmente a quienes se dicen defensores de derechos
humanos, pero lo hacen de manera selectiva''.
Afirmó que la iniciativa de Uruguay ?que se pondrá
a votación en la Comisión de Derechos Humanos de la ONU?
''es equilibrada, respetuosa y no confrontativa, sino de cooperación
y de aliento al gobierno de Cuba para que dé pasos en el avance
de los derechos civiles y políticos, como lo ha hecho en los derechos
sociales''.
Por su parte, la Promotora Internacional de Derechos Humanos
(PIDH) se congratuló por el voto de México contra Cuba en
Ginebra, al que calificó como un acto ''de congruencia y de valor''
del presidente Fox, aunque debió admitir que en México aún
persisten violaciones a las garantías de los ciudadanos.
DE LA REDACCION, CON INFORMACION DE DAVID CARRIZALES,
CORRESPONSAL