Inaceptable, que el gobierno israelí
haya prohibido la entrada de los equipos de rescate
Jenin fue escenario de "horrores que superan el entendimiento
humano": enviado de la ONU
"Es un infierno, una masacre", afirma el director de
la agencia para los refugiados palestinos
AFP Y DPA
Jenin, 18 de abril. El enviado especial de la ONU
para Medio Oriente, Terje Roed-Larsen, denunció este jueves que
el campo de refugiados de Jenin, en Cisjordania, fue escenario de "horrores
que superan el entendimiento humano".
"Está todo destruido, es como si hubiera sufrido
un terremoto. Es inaceptable, un horror que supera el entendimiento humano",
declaró Roed-Larsen, al visitar el campo este jueves acompañado
de miembros de la Cruz Roja y de Naciones Unidas.
Afirmó
que es "completamente inaceptable" que el gobierno israelí haya
prohibido hasta hoy, seis días después del final de los combates
en el campo, que los equipos de búsqueda y rescate se desplacen
hasta el lugar para asistir a los supervivientes y a aquellos que vuelven
a sus casas, así como para enterrar los cadáveres que todavía
no fueron evacuados. "Moralmente, es repugnante", aseguró.
El director de la agencia de la ONU para los refugiados
palestinos, Peter Hansen, se expresó en términos semejantes
al afirmar: "Es un infierno, y no es exagerado llamar a esto una masacre,
un término que hasta ahora evité utilizar. Pero ahora que
vi la realidad con mis ojos no puedo llamarla de otra manera".
"Vi gente en total conmoción, cuyas casas habían
sido destruidas. Vi familias tratando de desenterrar gente bajo las montañas
de piedras, pedazo a pedazo. Un experto en terremotos que me acompañaba
me dijo que desde hace mucho no había visto una destrucción
masiva de esta dimensión" dijo el encargado. Hansen agregó
que probablemente jamás podrá determinarse el número
de muertos en el campo de Jenin.
Luego de concluir la operación militar, que dejó
un saldo de 23 soldados israelíes muertos, el ejército mantiene
cerrado el acceso a este campo de refugiados, salvo para grupos reducidos
de periodistas que son invitados. Para los militares israelíes,
Jenin, un escaso kilómetro cuadrado de tierra donde vivían
unas 15 mil personas en tiempo normal, no era un campo de refugiados palestinos
ordinario, sino una "fortaleza para terroristas".
En Jenin, los soldados llevaron a cabo este jueves una
retirada parcial que en principio no afectó al campo de refugiados.
Según los servicios médicos palestinos, cinco cadáveres
fueron encontrados el miércoles en un camión refrigerado,
a tres kilómetros del campo.
"Todo lo publicado es mentira. No tenemos nada que
ocultar": portavoz israelí
"Todo lo que se ha publicado sobre el campo de refugiados
de Jenin es mentira y no hay evidencias que lo demuestren. No hubo masacre
de palestinos, no tenemos nada que ocultar", declaró Rafi Laderman,
portavoz oficial del ejército israelí, durante una visita
al campo de refugiados de esta ciudad del norte de Cisjordania.
El
Consejo de Seguridad de Naciones Unidas comenzó este jueves un debate
sobre la situación en Medio Oriente que podría tener como
resultado una resolución sobre Jenin. Estados Unidos advirtió
al organismo que pospondrá su veto si el proyecto de resolución
pide una investigación sobre los ataques en el campo de refugiados
en Jenin.
El secretario general de la ONU, Kofi Annan, por lo pronto
pidió que se envíe a los territorios palestinos ocupados
una fuerza multinacional armada, autorizada a recurrir a la fuerza para
poner fin a la espiral de violencia.
El ministro israelí de Defensa, Benjamin Ben Eliezer,
anunció que según sus cálculos, el ejército
se retirará de varias regiones palestinas autónomas de Cisjordania
como Nablus y Jenin antes del domingo.
Las declaraciones de Ben Eliezer pueden ser el primer
resultado concreto de la misión del secretario de Estado estadunidense,
Colin Powell, en Medio Oriente, que concluyó el miércoles
en Jerusalén sin lograr su principal objetivo: un alto el fuego
entre israelíes y palestinos, que implicaría también
una retirada de las tropas israelíes de las regiones ocupadas en
Cisjordania y una denuncia clara de la violencia terrorista por parte de
los dirigentes palestinos.
Plantean la reconstrucción
La comunidad internacional comienza a pensar en las formas
de financiar la recuperación de los lugares destruidos o seriamente
dañados por la ofensiva militar israelí en Cisjordania, una
tarea difícil, ya que el ejército prohíbe en muchos
lugares todavía ocupados el acceso de los expertos.
"No se puede saber cuántos millones o miles de
millones de dólares serán necesarios, ya que los soldados
israelíes nos impiden entrar en las zonas que todavía ocupan",
declaró en Jerusalén el representante de la comisión
europea en Cisjordania, Jean Bretechi.
A finales de diciembre de 2001 el Banco Mundial calculó
que la destrucción de las infraestructuras palestinas llegaba a
307 millones de dólares desde el principio de la intifada, en
septiembre de 2000.
"Este cálculo deberá multiplicarse por dos
si contamos todo lo ocurrido desde entonces", señaló.