CIUDAD PERDIDA

Miguel Angel Velázquez

Digna: tesis dolosas

DESDE EL puerto de Veracruz han llegado algunas noticias que más que tratar de esclarecer la muerte de Digna Ochoa pretenden juzgar su imagen por algunos hechos, tal vez ciertos, que ubicarían a la abogada como una mujer desquiciada.

LA ESPECIE pretende permear la percepción de la opinión pública, que hasta el momento se niega a aceptar la hipótesis del suicidio, surgida de entre las filas del círculo más cercano a la defensora de los derechos humanos.

DESDE LUEGO hay quienes han acudido a escudriñar el pasado de Digna Ochoa, y Veracruz podría ser uno de los puntos claves para levantar tesis, seguramente mal intencionadas.

NO OBSTANTE, frente a las "investigaciones" de algunos medios que buscan la verdad, podría ocurrir que otra instancia hubiera tratado de saber si eran verdaderas las amenazas que recibió la activista.

ES MAS, podría ser que se demostrara que las autoridades policiacas, principalmente federales, hubieran hecho caso omiso a las demandas de Ochoa.

SI ESO ocurriera, sería mucho más difícil convencer a la opinión pública de un supuesto suicidio, que aparentemente no tiene sentido si se considera que Digna Ochoa estaría en una de las mejores etapas de su vida, pese a su ruptura con las organizaciones en las que militó.

Y COMO no es posible argumentar con solidez ese supuesto, la idea sería colocar la imagen de la luchadora social como una mujer con problemas mentales graves.

SIN EMBARGO, sea cual fuere la verdad o los intereses que esconden las revelaciones que sobre la vida de Digna Ochoa se hicieran, será en el ámbito legal donde deberán dirimirse, cernirse, todas y cada una de las hipótesis que rodean al crimen.

PRIMERO SERA necesario explicar hasta la saciedad por qué se han desechado algunas líneas de investigación; y segundo, comprobar, sea cual fuere, la hipótesis de mayor peso.

SI ESO es posible seguramente habrá confiabilidad en las investigaciones de la autoridad, pero lo que no se vale, ya que podría acarrear problemas graves, es tratar de destruir la imagen de Digna Ochoa.

LA PROCURADURIA General de Justicia del Distrito Federal espera a un especialista de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos para certificar el trabajo de investigación de la dependencia y, después de ello, informar a la opinión pública los resultados.

TODO PARECE indicar que la PGJDF tiene ya una hipótesis muy sólida sobre los hechos, pero sería muy lamentable que antes de que se expusieran a la opinión pública los hallazgos de la investigación se tratara de destruir, con base en la vida privada, el trabajo de Digna Ochoa, que aún hoy parece ser el móvil del crimen.

DENTRO DE muy poco tiempo se esperan las noticias de la propia PGJDF que den luz a este hecho, tan lamentable para la muy difícil labor de cuidar los derechos humanos en el país. Ya veremos.

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