Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Martes 4 de junio de 2002
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Cultura
Abrirán muestra montada por Beatriz Zalce y presentación a cargo de Poniatowska

Legado y presencia del artista René Villanueva

PABLO ESPINOSA

El mundo de René Villanueva. Bajo ese título su compañera Beatriz Zalce montó una bella exposición que mañana será inaugurada en el Museo de Antropología e Historia de Toluca. La presentación estará a cargo de la escritora Elena Poniatowska y la intención de esta muestra, indica Beatriz, es que quien no conoció a René Villanueva lo conozca y quienes lo conozcan, lo sientan cerca, presente, completamente vivo.

La exposición incluye 62 cuadros de la autoría de René Villanueva (1933-2001) y están representadas ampliamente cada una de las tres épocas pictóricas del autor. Abarca también objetos personales que muestran a René escritor, autor de cuatro libros; René fotógrafo, sus investigaciones musicales, sus grabaciones de campo.

El 28 de junio se cumplirá un año del fallecimiento de René Villanueva, hombre de cultura, renacentista, combatiente que luchó toda su vida por una sociedad mejor. En esa fecha Los Folkloristas, su grupo, ofrecerá un concierto en el contexto de la exposición. En tanto, como invitación generosa a compartir la obra, el legado y la presencia de René Villanueva, Beatriz Zalce explica, en entrevista:

-¿Cómo es El mundo de René Villanueva?

-Es igualito a él. Es un mundo muy amplio, luminoso, sonoro, comprometido, generoso. Es ese mundo donde caben tantas cosas, como la música. Todos lo conocen como músico, pero él decía que era analfamúsico, que aprendió como los músicos folclóricos, a lo que él siempre quiso parecerse y no sólo se parece, sino que es y encarna. Es un mundo en el quecaben la pintura, los colores. Es un mundo en el que se aspira que quepamos todos, como dirían los zapatistas, como diría el propio René. Es un mundo donde además los afectos tienen una parte muy importante. Es una casa muy grande y muy llena de todo eso.

Poner el alma en todo

-¿Cómo está armado el guión museográfico para esta exposición?

-La intención es mostrar a René pintor en diferentes etapas. La primera de ellas, de 1957 a 1970, que es una etapa de una paleta un poco oscura, de contenidos muy fuertes, pues fue la época de la guerra en Vietnam. A René lo puedes acusar de todo, menos de no poner el alma en todo; era orozquiano hasta las cachas y una vez tuvo un sueño en el que veía unos personajes que eran unos hombres que en vez de cabezas eran manos, que generalmente eran puños, manos agresivas, garras. Pintó entonces una serie que llamó Las fuerzas brutas. Junto a eso había ya una búsqueda de algo más amable, la emoción por el color, el vitral, las naves y la musicalidad que da la arquitectura gótica. La segunda etapa de René, en la que ya se había asumido como músico y sus exposiciones las titulaba así: Con la música a otra parte, Con la música por dentro y la temática era totalmente musical y era un estallido de color.

''La música lo había llevado a muchos lugares y sus maestros no sólo eran los músicos indígenas. Don Timoteo, Arreveriano Platas, don Germán López López, El Palapo. También las tejedoras eran sus maestras, todo el colorido de la artesanía. Muchas de sus obras tenían una línea de un verde muy vivo, muy fosforescente y es algo que ves en los mosaicos huicholes. Era ya ese hombre muy pleno, realizado.

''Y luego una tercera etapa, de 2000 a 2001; René ya sabiéndose enfermo de cáncer lo primero que pinta es un cuadro terrible con unos colores verdaderamente alucinantes, un estallido violento de color y el título lo dice todo: Dolor sin nombre. La estridencia, pero después, conforme se dio cuenta que la sentencia de muerte no se cumplía, que incluso los médicos decían que no entendían cómo la enfermedad marchaba hacia atrás, su pintura fue haciéndose más reflexiva hasta caer en lo naive. Pidió a gente cercana que posara para retratos, como una manera de decir 'te quiero mucho, lo que te puedo dar es mi trabajo'. En esta última etapa se asumió plenamente como pintor.

''Haber dejado el grupo Los Folkloristas fue uno de los duelos más grandes de René. Y cuando surge el título de El mundo de René Villanueva, resulta evidente que es más. Es también Los conciertos de Brandeburgo, la música con la que René se despidió y que lo ha llevado a esa cosa perenne de la música.

''De los objetos personales fui eligiendo de entre lo entrañable. Me di cuenta que hoy la casa es una Scheherezada que te empieza a contar historias. Los cuadros, los objetos, las esculturas, todo cuenta historias. Es un coro de voces.''

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