Conflicto por tierras desencadenó actos violentos

Sin arreglo, disputa entre bases de EZLN y Aric Independiente

Niegan zapatistas haber provocado el enfrentamiento; "sólo nos defendimos, ellos nos agredieron", aseguran

HERMANN BELLINGHAUSEN ENVIADO

Municipio Autonomo Francisco Gomez, 8 de junio. Tanto las bases de apoyo del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) del poblado San Marcos como el concejo autónomo de este municipio se deslindaron de la violencia que se desencadenó el día 6 por un desacuerdo de límites con las bases de la Aric Independiente que habitan en El Recuerdo. "Los zapatistas no agredimos. Ellos nos atacaron", aseguran los pobladores de San Marcos.

Ahora relatan a La Jornada su versión de los hechos. Un hombre joven, testigo presencial, habla en nombre de sus compañeros: "El problema empezó la mañana de ese día 6, cuando llegamos al campo que teníamos preparado para arrojar los postes de la línea (los límites) que nos corresponde. El día anterior habíamos dejado 358 postes, pero cuando llegamos para poner el alambre faltaban 80. Veníamos 60 compañeros, ya listos con el alambre y las grapas. Como vimos el faltante, fuimos a preguntar qué pasó a la gente de El Recuerdo".

Colindantes con el ejido San Miguel (donde se realizó en 1995 el primer encuentro entre los comandantes del EZLN y la delegación gubernamental para pactar lo que serían los diálogos de San Andrés), San Marcos y El Recuerdo son dos nuevos centro de población establecidos en las tierras recuperadas del que fuera el rancho Altamira, propiedad del ganadero Juan Mijangos hasta 1994. Como otros miles de campesinos de los valles y cañadas de Ocosingo, decenas de familias tzeltales, tanto zapatistas como de la Aric Independiente, ocuparon dichos predios de común acuerdo.

Durante los años recientes han convivido en aceptable armonía, más allá de ciertas fricciones cotidianas. Pero en los pasados meses esta relación se ha visto alterada por disputas agrarias, que tienen que ver con límites y la titulación de la propiedad por parte del gobierno.

"Buscamos a la autoridad de los ariques en El Recuerdo para que nos explicara dónde quedaron nuestros postes", agrega el vocero de San Marcos. "No íbamos en plan de pelear. Observamos que su representante, Eusebio Jiménez, se acercó pacíficamente. Veníamos en buen plan, y si traíamos nuestros machetes fue nomás porque estábamos trabajando, no como amenaza. Entonces llegó otro de la Aric, Jesús Lorenzo, bien encabronado y nos tiró de machetazos. Ahí fue cuando hirió al compañero Jacinto Mendoza Pérez.

"Entonces nosotros lo agarramos para que no siguiera macheteando a los compañeros. Vinieron otros dos igual, y los agarramos también. Los de la Aric Independiente se dejaron venir con palos y machetes, y sus mujeres con piedras. Habían quemado nuestros postes y nos estaban esperando para pelear. Ellos nos pegaban, pero nosotros nomás nos defendimos. Por eso de ellos no hay heridos." Luego de la agresión, los de San Marcos detuvieron a otros dos ariquistas.

A los agresores, cuenta, "los llevamos a La Garrucha (también Francisco Gómez, cabecera del municipio autónomo y sede del Aguascalientes III), donde el concejo los tuvo detenidos". Las primeras versiones de los hechos, difundidas por Germán de la Rosa, delegado en Ocosingo de la Secretaría de Gobierno del estado, enfatizaban el hecho de los detenidos y hablaban de "enfrentamiento". Los indígenas de San Marcos matizan: "No fue enfrentamiento, porque nosotros nos defendimos, nunca los atacamos". Agregan que "el motivo es que los de la Aric quieren toda la tierra, nos quieren sacar. Nosotros estamos buscando acuerdo".

Los días 7 y 8 un importante grupo de miembros de la Aric Independiente se trasladó a La Garrucha, pero tras muchas horas de pláticas no llegaron a otro acuerdo que la liberación de sus cinco compañeros, detenidos por las autoridades autónomas por atacar y herir a las bases de apoyo del EZLN. El mediodía de hoy los ariquistas se retiraron sin firmar el acta de acuerdo, propuesta por la Comisión Agraria en Resistencia del municipio Francisco Gómez. El documento, sin la firma de Manuel Lorenzo Pérez, dirigente de la Aric, ni de Jesús Lorenzo, representante de El Recuerdo, plantea:

"Que la línea que abarca el predio Buenaventura, de 100 hectáreas, y el de Santa Rita, de 91, quedará para los hermanos de San Miguel. El lunes 10 de junio se trazará la línea acordada de San Marcos y El Recuerdo, y juntas, la Aric Independiente y la Comisión Agraria, terminarán el trazo de los dos poblados. En cuestión de linderos, los hermanos medirán las partes que les corresponden y en cuanto al perjuicio de la madera se respetará entre las autoridades de cada poblado."

El documento fue firmado por Caralampio Pérez Alvarez y Eusebio Pérez Hernández, de la Comisión Agraria en Resistencia, y por los dos delegados de San Miguel. Sólo lo rechazó el representante de El Recuerdo, con lo cual el problema queda sin resolver, y sigue latente el riesgo de nuevas diferencias entre los indígenas.

Por su parte, las autoridades del municipio autónomo Francisco Gómez denunciaron en un comunicado los hechos del ejido San Miguel. Insisten en que las bases zapatistas no agredieron a los ariquistas, sólo se defendieron. Declaran: "No vamos a permitir más provocaciones, así que nuestras bases actuarán" para defenderse de estas personas. Y responsabilizan a las autoridades de la Aric y del poblado El Recuerdo de cualquier acto de violencia "que pueda suceder en el ejido San Miguel".