La población ocupada cada vez recibe
salarios más bajos, reportó el INEGI
Déficit de empleos de 6.1 millones; casi 500
mil laboran por propinas
La economía de México no crecerá
4%, como pronosticó Fox; podría ser de cero por ciento, adelantó
Bursamétrica América Latina, en la tercera crisis
en menos de una década: Cepal
ROBERTO GONZALEZ AMADOR Y ANTONIO CASTELLANOS
Sumergida en un nuevo periodo de estancamiento, la economía
mexicana acumuló en los siete años anteriores un déficit
en la generación de empleo formal de 6.1 millones de plazas. Al
mismo tiempo, la población que se mantiene ocupada percibe cada
vez un menor salario, indican reportes oficiales. Como signo del deterioro
en el monto de las percepciones, por lo menos 460 mil empleados labora
a cambio de propinas o pagos en especie, sin un ingreso fijo, así
sea el mínimo legal.
En este caso no se incluye a las personas que trabajan
sin contrato y sin salario mínimo en empresas y que viven de propinas,
como en supermercados, estacionamientos y gasolinerías, entre otras.
Las pobres perspectivas de crecimiento para este año apuntan a que
en 2002 seguirá creciendo el déficit en la generación
de puestos de trabajo, para atender un mercado laboral al que cada año
se incorporan 1.1 millones de trabajadores.
Otros 4.4 millones de trabajadores, que representan 38.7
por ciento del total de los mexicanos ocupados en el sector formal de la
economía, devenga un ingreso diario que no supera 82 pesos diarios,
de acuerdo con información del Instituto Nacional de Estadística
Geografía e Informática (INEGI). En ninguno de los casos,
el ingreso mínimo de los trabajadores alcanza para satisfacer las
necesidades más elementales de alimentación, salud y educación.
A contracorriente del optimismo oficial, que anticipa
un repunte del PIB de 4 por ciento este año, analistas de consultoras
y organizaciones internacionales prevén para México un modesto
crecimiento económico que, en el peor de los casos, podría
ser de cero y en el mejor de uno por ciento. Ello no es exclusivo de México,
y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe
(Cepal) estableció que la región, donde 114 millones menores
de 20 años viven sumidos en la pobreza, experimenta la tercera crisis
en menos de una década.
Las proyecciones de recuperación económica
lucen insuficientes para atender la demanda de nuevas plazas laborales.
La Cepal cree probable para México un crecimiento menor a 2 por
ciento, en línea con lo proyectado en los Criterios generales de
política económica del gobierno federal, que estiman un incremento
de 1.7 por ciento del producto interno bruto (PIB). Pero la consultora
Bursamétrica es poco optimista respecto de una vigorosa recuperación
como la calculada en 4 por ciento por el presidente Vicente Fox.
Los expertos de Bursamétrica Management México
estiman un crecimiento débil o negativo al segundo trimestre, basado
en el bajo consumo y disminuido nivel de gasto de inversión productiva.
Concede la posibilidad de que en el segundo semestre haya una mejor actividad
y que las exportaciones se recuperarán, pero recalca que el crecimiento
del PIB podría ser de entre 0 y uno por ciento para todo el año.
Es un pronóstico parecido al del Banco de México,
que sitúa las posibilidades de crecimiento en 1.8 por ciento para
este año, cifra similar a la de 1.6 prevista en la reciente encuesta
sobre expectativas del sector privado, elaborada por el banco central.
El salario del miedo
Los trabajadores mexicanos, en términos promedio,
tienen un ingreso de tres salarios mínimos, alrededor de 125 pesos
diarios. Pero con mayor detalle, la información del INEGI precisa
que de los 12.5 millones de personas empleadas en el sector formal, 6.8
por ciento percibe menos de un salario mínimo; otro 23.5 por ciento
devenga de uno a dos minisalarios, y 45.4 por ciento obtiene entre dos
y cinco salarios mínimos. Además, 15.9 por ciento de la población
ocupada gana más de cinco minisalarios, mientras que el 8.4 por
ciento restante no percibe un ingreso predeterminado y trabaja a cambio
de propinas o pago en especie.
Entre 1994 y 2001, periodo en el que cada año se
incorporó a la población económicamente activa (PEA)
un millón 100 mil personas, la economía mexicana sólo
logró generar 3 millones 659 mil plazas en el sector formal.
Al detalle, el fenómeno de la desocupación
en México está provocando un mayor desplazamiento de jóvenes
hacia la economía informal, una actividad que ya ahora, de acuerdo
con el INEGI, alcanza a generar riqueza por un monto equivalente a 30 por
ciento del producto interno bruto (PIB).
El sector formal de la economía sólo da
ocupación a 12 millones 425 mil 392 personas, de acuerdo con el
dato más actualizado, a abril pasado, del Instituto Mexicano del
Seguro Social (IMSS). Ello implica que el resto de la PEA, es decir, 23.5
millones de personas, está obligada a sobrevivir en actividades
informales, ya descontados los 2.5 millones que prestan sus servicios en
el sector público.
En México, los mayores salarios son devengados
por los trabajadores de la industria manufacturera, actividad que genera
una cuarta parte del PIB. Sólo en 2001, las empresas agrupadas en
esta actividad despidieron a 476 mil 547 personas, lo que implica que el
mayor número de despidos ocurridos el año anterior afectó
al núcleo de trabajadores de mejores ingresos.
Callejón sin salida
De acuerdo con las estadísticas del IMSS, en diciembre
de 2000, cuando inició la actual administración federal,
tenían un empleo formal 12 millones 732 mil 430 personas. La cifra,
en abril de 2002, se redujo a 12 millones 425 mil 392, lo que significó
una reducción de 307 mil 38 plazas, mientras que en ese periodo
por lo menos un millón y medio de mexicanos se incorporaron a la
PEA.
En el caso particular de la industria manufacturera, el
personal ocupado disminuyó de un millón 464 mil 735 trabajadores
en diciembre de 2000, a la cifra actual de un millón 358 mil 24.
Esta última cantidad incluso es inferior a la registrada en diciembre
de 1994, el momento en que inició la mayor crisis económica
del país en los anteriores 65 años, cuando esta actividad
daba ocupación a un millón 393 mil 884 personas.
Crisis global
El optimismo del gobierno respecto de las posibilidades
de recuperación no es compartido por organismos económicos
internacionales, que han llamado la atención sobre la "lentitud"
del repunte en Estados Unidos, el principal socio comercial de México.
Según el análisis de la Cepal, organismo
de Naciones Unidas encabezado por su secretario ejecutivo, José
Antonio Ocampo, la reactivación económica en América
Latina que se inició en 2000 se truncó antes de lo esperado.
Esta crisis es la más generalizada, debido a su carácter
global, y el principal canal de transmisión ha sido el comercial.
En la mayoría de los países el deterioro ha sido generalizado.
Además, el crédito interno sigue estancado
y refleja la debilidad de la demanda interna. Eso es claro en México,
donde el circuito del financiamiento no se ha reactivado y sólo
se da en crédito al consumo y en ciertos sectores del renglón
hipotecario. Se mantiene la cautela del sector financiero, destaca la Cepal.
Para toda la región, establece que las perspectivas
no son optimistas. Luego de los atentados del 11 de septiembre los mercados
de valores han retornado a la normalidad; el turismo en México y
el Caribe se ha recuperado parcialmente de la fuerte caída, pero
se retrasó en cerca de tres trimestres la recuperación de
las economías industrializadas. La previsión para México
no rebasa un PIB de 2 por ciento para el cierre de 2002.
Para qué alcanza un salario mínimo ($42.15,
en el DF)