Se mantiene el consenso en torno a la minuta aprobada por la ALDF: dirigentes
Movilizarán partidos a militantes en defensa de la reforma política del Distrito Federal
En reunión privada, Fernández de Cevallos les habría ofrecido turnarla a otra comisión
BERTHA TERESA RAMIREZ
Los dirigentes de PAN, PRD y Convergencia por la Democracia en el Distrito Federal coincidieron en convocar a una movilización ciudadana para defender la iniciativa de reforma política aprobada por consenso de todas las fuerzas políticas en la capital del país, luego de que en el Senado de la República se agotaron los tiempos fatales para sacar adelante la iniciativa turnada a ese órgano legislativo hace cinco meses.
Al mediodía, el presidente de la mesa directiva del Senado, Diego Fernández de Cevallos, se comprometió ante los dirigentes capitalinos de PAN, PRD, PRI, PT y Convergencia por la Democracia a atraer el dictamen sobre la reforma política que se encuentra actualmente en la Comisión del Distrito Federal de esa cámara, para turnarlo a otra comisión y darle un plazo de 20 días -que es el reglamentario-, aunque en función de la urgencia dejó entrever la posibilidad de solicitar que se dictamine en 72 horas.
Señalaron que Fernández de Cevallos les informó sobre una propuesta para convocar a un periodo extraordinario de sesiones de la Comisión Permanente, que incluya en su agenda el tema de la reforma política del Distrito Federal.
No obstante, por la tarde, una propuesta formulada por el PRD para llevar a cabo un periodo extraordinario en el Senado, fue turnada a la primera comisión de la Comisión Permanente para su discusión, la cual se difirió para julio.
Al salir de la reunión privada con Fernández de Cevallos, los cinco líderes políticos ratificaron el consenso de todas las fuerzas políticas en la reforma política.
Víctor Hugo Círigo y José Luis Luege Tamargo manifestaron su preocupación por el hecho de que se hayan vencido los tiempos fatales que impuso la mesa directiva del Senado a la Comisión del Distrito Federal para presentar su dictamen, pues la reforma política fue concebida para que entrara en vigor a partir de 2003.
De esa postura discrepó el dirigente del PRI capitalino, Jorge Schiaffino Isunza, quien rechazó que haya tiempos fatales y aseveró que "si la reforma finalmente no puede salir este año y tiene que esperar hasta 2004, después del año electoral, no es un tiempo fatal, ni cambia la administración ni vamos a entrar en caos".
Señaló que durante la reunión con Fernández de Cevallos "quedó claro que tal vez no sea un solo senador el que no esté de acuerdo con ese dictamen. Nos dijo que tal vez son varios senadores de varios partidos políticos los que pueden hacer observaciones".
Antes, Schiaffino preguntó a los presidentes de los partidos que cuentan con senadores si están seguros de que sus legisladores votarán en el sentido que viene la reforma política, pues si es así no se advierte ningún problema, "pero si no es así tendremos que revisarlo. El propio diputado de Acción Nacional aquí nos dijo que ellos esperarían de regreso en la Cámara de Diputados la iniciativa con las observaciones para intentar corregirlas o para hacer un dictamen, pero que quede claro que no es un solo senador el que detiene el dictamen y que el PRI de ninguna manera está frenando la reforma".
En la reunión estuvieron presentes las diputadas locales Guadalupe García Noriega y Eugenia Flores Hernández, coordinadoras parlamentarias del PVEM y del PT en la Asamblea Legislativa, así como el diputado panista Jorge Lara, presidente de la Comisión del Distrito Federal de la Cámara de Diputados.